El jefe de la Dirección de los Servicios de Inteligencia y Prevención (Disip), comisario Miguel Rodríguez Torres, presentó ayer en rueda de prensa en Caracas, paso por paso, el desmantelamiento del grupo cívico-militar del caso de los paramilitares en Caracas. Rodríguez habló de las evidencias en compañía del ministro de Interior y Justicia, general en […]
El jefe de la Dirección de los Servicios de Inteligencia y Prevención (Disip), comisario Miguel Rodríguez Torres, presentó ayer en rueda de prensa en Caracas, paso por paso, el desmantelamiento del grupo cívico-militar del caso de los paramilitares en Caracas.
Rodríguez habló de las evidencias en compañía del ministro de Interior y Justicia, general en jefe Lucas Rincón Romero; el director de la Policía Científica (Cicpc), comisario Marcos José Chávez; y el subdirector del Cicpc, comisario Raúl Yépez.
Mostrando el cronograma y fotos de los presuntos culpables del ingreso de los paramilitares colombianos, inició su exposición sobre los hechos:
El 12 de abril descubren la presencia del bloque central Bolívar de los paramilitares de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), buscando establecer contacto con la gente de Fedenaga. El día 15 se inicia la movilización de una columna de uniformados y armados de La Pista (Colombia) hacia sector venezolano y el Cufan realiza una operación militar. La intención del grupo de irregulares era establecer una base de operaciones en el Sur del Lago para facilitar el tráfico de drogas hacia el Caribe a través del Lago de Maracaibo. «Sabíamos que ya estaban haciendo contactos con elementos del Gobierno Regional (Zulia) y federaciones de ganaderos para conseguir la facilidad de tarficar por esa zona», según la Disip.
Luis Andrés Enrique Pino declara a la Fiscalía Militar que él, siendo escolta de Iván Ruviere y entrenador de los paramilitares en la finca, asistió a un pent house del coronel Jesús Faría Rodríguez, ubicado en Plaza Las Américas frente a los bomberos. Hubo una reunión de conspiración que asistió Iván Ruvier, Nieto Quintero, coronel Faría Rodríguez y otros militares y civiles, que él no identificó en ese momento.
El 19 de abril falleció por insuficiencia cardíaca el ciudadano Clemente Chávez, de 38 años, en la finca Daktari, y a través de un permiso otorgado por la alcaldía de El Hatillo tramitado por Gustavo Zingg Machado, por la funeraria Vallés y firmado por los doctores Carlos Febres y José Lobos, quienes embalsamaron el cuerpo. De manera fraudulenta lo sacan del país.
Se hizo un trabajo de inteligencia sobre la Onidex de San Antonio del Táchira, ante una presunta complicidad para pasar a los paramilitares. Hubo una reunión clandestina en una población cercana al Nula, donde se habló del traslado de personas y la entrega de 2 millones de dólares a los comandantes paramilitares Lucas y Omar.
La oficina de Inmigración y Frontera del estado Táchira le otorga el permiso colectivo hacia Caracas. Los implicados son Julio Javier Naime, porque aparece autorizado para escoltarlos hasta la capital y un sub-oficial de la Guardia Nacional, José Rafael Rojas Eugenio. El sargento Rojas Eugenio tenía contacto con el general Ferreira, ex director de la Onidex que estaba relacionado con el coronel Contreras, era uno de los dirigentes del movimiento. Freddy Alonso Velásquez Sánchez aparece en uno de los permisos colectivos.
El 23 de abril (2004) se produce una reunión en la calle Los Jardines, Quinta 1204, propiedad de Lion Delfino en el Country Club. En esa reunión estaba presente un funcionario de la Disip. Se habló de asesinar al presidente (Chávez). Decían que cualquier operación que se hiciera de toma de Miraflores y de cualquier otro objetivo, si no se mataba al Presidente era un fracaso.
Hablaban de ejecución de atentados contra el coronel Jonathan Faría, comandante del Destacamento 56, y que había que eliminarlo por su liderazgo ante los guardias nacionales y contra el coronel Arcón Matos. También atentar con unos objetivos gubernamentales y matar grupos radicales del 23 de enero.
Los militares serían bloqueados con policías metropolitanos vestidos de campaña como las tropas del Ejército en el sector de Catia y 23 de enero para evitar el apoyo hacia Miraflores. Grupos paramilitares iban a actuar sobre el comando móvil de la Guardia Nacional y sobre el Palacio de Miraflores.
A la reunión del Country Club asistieron el comandante Prieto Morales, sargento José Vargas, coronel Semprún Vallecillos, mayor Wajab Coronado, mayor Fuentes Marval, el capitán Anderson Díaz, capitán Nieto Quintero, teniente Lenín Pimentel, coronel Jesús Farías, Gustavo Zingg Machado (prófugo), coronel Castro Yelles (procesado), y Jorge Lemus.
Aparece involucrado en la reunión un coronel de la Aviación aún no identificado quien explicó la participación de un avión F-16 en los planes que ellos pretendían realizar.
A los días de esa fecha (23 de abril) era el Aló Presidente (suspendido) y ese coronel de la Aviación mencionaba que la señal de actuación era el despegue del avión F-16 y que había que bombardear el Aló Presidente donde fuese. Algunos de los oficiales e inclusive la persona nuestra que estaba allí, manifestó que no estaba de acuerdo con el bombardeo porque iban a morir inocentes, según sus términos, y el coronel le dijo que esa era parte del sacrificio que había que hacer para sacar a Chávez de poder.
La Disip acusó a Pedro Carmona Estanga de estar involucrado en el caso de los paramilitares desde Bogotá, tras detectarle el correo electrónico que le envió una señora de nombre María de Choissone, quien se apodó «Yayita». Lee así: «Querido don, ante todo un gran abrazo. Me encargan averiguar si los superiores de allá están en cuenta o brindando apoyo a la tarea escolar que los alumnos de allá que están becados aquí están realizando con todo entusiasmo estudiantil, esperando obtener una calificación sobresaliente próximamente. Pues aquí los instructores están al tanto de las actividades escolares de esos muchachos, pero querían saber si los superiores de allá están al tanto ya que los de acá, que preguntan, no tienen acceso a la información de la programación establecida allá porque es muy especializada dado a lo difícil de su asignación. Aquí los alumnos están estudiando con mucha aplicación, pero tenemos curiosidad de saber cuánto respaldo de sus representantes, si tú tienes ideas. Deberían de presentar examen final muy pronto. Besos, Yayita».
La Disip asegura que no eran alumnos y por ello dispara la alarma que una actividad de tipo subversivo iba a ocurrir.
El 9 de mayo se llevó a cabo la captura de los paramilitares y además la aprehensión de José Ayala, comandante «Lucas», que estaba uniformado de campaña con un chaleco, una pistola, inclusive, no quería entregar el armamento porque todo se resolvía con una llamada telefónica. Cuando el paramilitar es capturado con un celular en mano, comienza a llamar a Gustavo Zingg Machado. Tienen inclusive 73 cruces de llamadas antes y después de los hechos. Inmediatamente, cuando conversan, Gustavo Zingg se comunica en 31 oportunidades con Orlando Urdaneta, quien iba a ser el puente entre el sector político para resolver el problema a José Ayala.
La intención de Orlando Urdaneta era de hablar con un alcalde que la Disip no nombró porque aún no tiene las pruebas, con la finalidad de autorizar a la Policía Metropolitana para que los paramilitares pudiesen desplazarse sin ningún tipo de inconvenientes.
Implicados
Pedro Carmona Estanga acusado de estar involucrado en el caso de los paramilitares desde Bogotá, tras detectarle el correo electrónico que le envió una señora de nombre María Luisa de Choissone.
María Luisa De Choissone Directora ejecutiva del Bloque de Prensa Venezolana. La Disip asegura que el e-mail estaba escrito en clave entre el don (Pedro Carmona) y Yayita (ella).
Orlando Urdaneta Actor y animador de TV. El día de la captura de los paramilitares habló en 31 oportunidades con el empresario Gustavo Zingg. Lo acusan de ser puente entre el sector político. Le detectaron 31 llamadas el mismo día de las detenciones de los «paras» con Gustavo Zingg Machado (Gustavo Quintero).
Liliana Hernández Diputada de Primero Justicia. La Disip la implicó en el caso de los paramilitares por prestar apoyo a la incursión irregular en el país.
Rafael Marín Ex secretario general de AD. Uno de los paramilitares capturados por la Disip confesó que Marín fue una de las personas que financió su entrenamiento en Venezuela.
Ovidio Poggioli Ex director del Aeropuerto Simón Bolívar. Uno de los paramilitares lo nombró en su declaración como colaborador del plan.
Robert Alonso Empresario cubano-venezolano propietario de la Daktari, donde estaban alojados 137 irregulares. Vinculado con reuniones de grupos anticastristas, opositores y paramilitares.
Gustavo Zingg Machado (antes Gustavo Quintero Machado) Empresario del Zulia. Participó en una reunión en el Country Club de Caracas donde se planificó un golpe de Estado y financió la estadía de los irregulares en la capital.