Ángeles: Tenemos muchos temas para consultarte. Si te parece empezar por esta noticia que se conoció de un nuevo ataque del IRA después de mucho tiempo en Irlanda. Petras: Parece que hay un grupo que siempre estaba en disidencia con la dirección central sobre el acuerdo de paz y el reparto de poder con los […]
Ángeles: Tenemos muchos temas para consultarte. Si te parece empezar por esta noticia que se conoció de un nuevo ataque del IRA después de mucho tiempo en Irlanda.
Petras: Parece que hay un grupo que siempre estaba en disidencia con la dirección central sobre el acuerdo de paz y el reparto de poder con los grupos protestantes más conservadores, un gobierno de coalición con la presencia todavía de tropas inglesas en el norte del país. Es obvio que el acuerdo no llegó a satisfacer a amplios sectores populares en Irlanda, particularmente la presencia continua de los ingleses. También el hecho de que la capacidad del gobierno de coalición no satisface las necesidades sociales que han afectado a gran parte de los católicos pobres. Ahora eso no indica en ningún caso que la vía armada o lo que sea, tiene respaldo entre la gran masa de los católicos. La insatisfacción tiene otros canales, otras formas de expresarse, a partir de marchas, huelgas, protestas, acciones de masas. Este acto no va a tener ningún respaldo incluso entre los sectores críticos a los líderes católicos. El peligro es que utiliza este acto a los anglosimpatizantes para reprimir las protestas que están surgiendo a partir de la crisis económica y otras expresiones de disidencia.
Hay que no descartar el hecho de que hay infiltrados entre este grupo de disidentes. Hemos tenido muchas pruebas, documentadas, de que los grupos extremistas así eran infiltrados. Testimonios públicos incluso de los infiltrados que después renegaron de su actividad. Que incluso agentes mataran a su propia gente para crear una situación conflictiva que limite las propuestas populares. Me parece algo muy provocativo en este momento, particularmente porque el contexto en Irlanda ahora, de crisis económica muy profunda y desocupación, ocurre algo así. Es que no hay contexto político y social para este tipo de incidentes, particularmente la gente está insatisfecha. No hay un acto político represivo de tortura o de grupos o escuadrones de muerte, no hay un contexto que implique en este momento un tipo de asalto militar de esta índole. Por eso digo que tengo sospechas de que podría ser una provocación de la derecha, por las agencias inglesas que utilizan a algunos agentes y algunos extremistas, para hacer eso y distraer al público del problema económico, del problema social, las limitaciones del co-gobierno.
Ángeles: Otro tema que te queríamos plantear es el de las maniobras norteamericanas en Corea del sur y la reacción de Corea del norte frente a esto.
Petras: Hace mucho tiempo que la propaganda mundial, incluso en Estados Unidos y en América Latina en Uruguay, han tratado de pintar al gobierno coreano del norte como muy irracional, intransigente, inflexible, guerrero, hambreador, todas estas imágenes. Mientras, durante el período de Bush los coreanos del norte negociaron un acuerdo donde ellos aceptan desnuclearizar sus fábricas, sus lugares de preparación de armas nucleares, pero como contrapartida iban a recibir inyecciones de inversiones, préstamos económicos, financiamiento, para reconstruir su economía. Ellos cumplieron en un grado importante pero en vez de recibir las contrapartidas principalmente de Estados Unidos, Corea y Japón, encontraron 3 tipos de obstáculos. Primero, el hecho de que Japón empezó a enfatizar otros problemas, por ejemplo las relaciones con japoneses raptados del pasado, segundo, conflictos sobre la forma de armas no nucleares de Corea del norte, los experimentos en misiles.
También hay un cambio en el gobierno de Corea del sur que el gobierno liberal, de centro izquierda conciliadora, está reemplazado por un gobierno de la derecha dura, que empieza a retirar la ayuda económica y a perjudicar las relaciones establecidas entre sur y norte.
Y tercera, los Estados Unidos en vez de aceptar los primeros pasos hacia la desnuclearización y empezar a aumentar la ayuda económica, empieza a introducir otras exigencias, por ejemplo, de que hay que poner unas inspecciones muy intrusivas en los lugares más delicados de la defensa de Corea del norte, sin firmar acuerdos políticos para la reconciliación, para el final de la guerra. Entonces frente al hecho de que Corea del norte no encuentra la reciprocidad, empieza a utilizar una retórica más bélica para poner sobre la mesa que ellos van a terminar con las concesiones unilaterales si no reciben la reciprocidad. Una táctica que va a practicar el equipo de Obama es utilizar una retórica de negociación, imponer condiciones de negociación no recíprocas, es exigir que las contrapartidas sacrifiquen intereses estratégicos, mientras ellos no están dispuestos a hacer concesiones a la misma altura. Y termina con el pretexto de que las negociaciones fracasan por la culpa del enemigo y por esta razón tenemos que fortalecer y aumentar nuestras presiones militares. Es un estilo negociador hacia la apuesta militarista.
Ángeles: Ya que nombrás a Obama, ¿es verdad que va a sustituir el petróleo de Chávez por el petróleo de Lula?
Petras: Bueno, eso es posible. Washington ha hecho todo lo posible para debilitar el gobierno de Chávez o a partir de presiones, intervenciones golpistas, electoralistas, etc. Dentro de este panorama obviamente si tienen una oportunidad de conseguir fuentes de petróleo en América Latina, es decir afuera del medio Oriente, lo van a hacer. Pero mientras tanto los pozos nuevos de Brasil están en aguas profundas que necesitan una costosa tecnología y con el precio abajo de 40 dólares las petroleras no están con ganas de invertir miles de millones en este momento para extraer petróleo con estos precios. Brasil todavía está lejos de generar un excedente para exportar a Estados Unidos, mucho menos la cantidad de petróleo que necesita los EE.UU. En este contexto la opción de Washington de sustituir Venezuela por Brasil no está sobre la agenda en este momento. Podría ser en 5 ó 10 años. Pero quién sabe lo que va a pasar en tanto tiempo.
Ángeles: En el tema de las relaciones entre EE.UU. y América Latina, queríamos pedirte un análisis sobre lo que está pasando en México porque las noticias todos los días muestran un desarrollo muy importante del narcotráfico pero sobre todo lo que se muestra son acciones muy espectaculares, mutilaciones, hallazgo de muchos cadáveres, decapitaciones. Pero queda como en un segundo plano una realidad y es que EE.UU. se está metiendo cada vez más en México, incluso habla hasta del envío de marines
Petras: Hay una propuesta de unificar o vincular la presencia de tropas norteamericanas directamente con el ejército mexicano. El problema de fondo es que la quiebra en México, la quiebra de la agricultura, la masificación de pobreza especialmente entre la juventud, está muy vinculada con el tratado de libre comercio entre México, estados Unidos y Canadá. Este comercio desplaza a millones de mexicanos. Y en el grado que los EE.UU. construye barreras para que la población excedente mexicana no pueda salir de la pobreza en EE.UU., se queda, y sin ocupación y sin futuro quedan disponibles para el reclutamiento en la única industria que está floreciendo, que es la droga.
El crecimiento del tráfico y producción de droga está directamente vinculado con la caída del empleo y los ingresos en los sectores desplazados por el tratado de libre comercio.
Y sustituir la represión militar simplemente no funciona porque los mismos presupuestos estatales están en la baja y las oportunidades para los oficiales de corromperse en el comercio más dinámico que es la droga, es enorme. El problema no tiene ninguna solución. Aumenta en el estado la corrupción, la corrupción fomenta a los narcotraficantes. Hay una relación dialéctica: más crece el narcotráfico, más corrupción; más corrupción oficial, facilita el narcotráfico. En esta situación es un círculo vicioso y cada vez que ponen más soldados más intervienen en los conflictos.
Hay que decir una cosa: cuando matan o capturan narcotraficantes, muchas veces es porque los oficiales estatales están tomando partido por otro grupo de traficantes, es una forma de eliminar la competencia no que simplemente estén aplicando la ley de manera uniforme.
Hay un cartel en Chihuahua, otro en Tijuana, en Ciudad Juárez. Si uno quiere identificar hay sectores oficiales con unos y otros de los carteles incluso altos oficiales nacionales en el gobierno. Por eso nunca pueden solucionar este problema. Más que nada porque la depresión económica en EE.UU. incluso la salida de cientos de miles de mexicanos volviendo a México ahora sin trabajo allá en su país, va aumentar la violencia, la descomposición. No hay un movimiento mexicano urbano que pueda orientar este descontento. Andrés López, el candidato de la oposición, es un buen político electoralista, es socialdemócrata, pero no tiene ninguna solución frente a la crisis actual. El se está postulando para las próximas elecciones que faltan muchos años. Los zapatistas quedan en Chiapas, hacen lo que pueden, sobreviven con ayuda económica de las ONG. Grupos intelectuales en la ciudad de México hablan y escriben cosas interesantes pero están totalmente afuera de cualquier alternativa práctica con una base de masas. Es un país políticamente explosivo pero sin ningún canal político. Frente a eso, los traficantes ofrecen soluciones de corto plazo: un trabajo, un ingreso. Con muchos riesgos de perder la vida dentro de 2 ó 3 años.
Ángeles: Y la importancia de México al lado de EE.UU. hará que por supuesto se le preste una atención especial, diferente.
Petras: Sí, una atención pero sin soluciones. La militarización de México coincide con un aumento de asesinatos. Es evidente que el problema es socio económico y político y no militar. El gobierno de México puede multiplicar por 10 el número de soldados y no va a tocar el tema de fondo.
Ángeles: Estos eran los temas que teníamos para consultarte y además queríamos decirte que el sábado el gobierno hizo un acto acá. Tabaré Vázquez, lo hizo como gobierno, como presidente rindiendo cuentas, pero el Frente Amplio convocó para que fueran los frenteamplistas con las banderas del Frente Amplio y trajeron 40 ómnibus desde el interior del país con gente para el acto. Un discurso donde habló de todo lo bien que se ha hecho en este gobierno y donde además se planteó que la crisis este año aquí al Uruguay no le va a hacer mella. Dijo los agoreros están diciendo que el Uruguay se va a romper en pedazos pero dio cifras, estadísticas y de todo, para explicar que acá no va a pasar nada, que estamos mejor que el resto, incluso la cifra de crecimiento, lo que se va a crecer este año. Un país la verdad que ideal planteó para Uruguay en este año electoral.
Petras: Sí, bueno, es un típico discurso oficial electoral. pero los hechos en el mundo real marchan en dirección opuesta. Yo digo que la gente primero tiene que evitar deudas porque el empleo va a bajar, deben cuidar los colchones bien para ahorrar su dinero porque los sistemas financieros están muy frágiles mundialmente y creo que deben buscar otra forma de entender el mundo porque si sólo prestan atención a los medios oficiales van a tener un gran choque en julio o agosto cuando caiga la bomba económica sobre sus cabezas. Siempre hay un optimismo falso sembrado por los gobiernos para tranquilizar a la gente pero mucha gente muchas veces cuando este tipo de discurso parece que tiene un efecto tranquilizador, después cuando la gente descubre otra realidad el desencanto puede ser mucho más profundo y la angustia y la bronca mucho más grandes.