El diplomático rechazó la intromisión en la política interna de Venezuela. De igual modo, apoyó la declaración del senador Arcadio Díaz, quien afirmó que el senado español «no tiene competencia para evaluar los procesos penales en otros países»
El embajador venezolano, Julián Isaías Rodríguez, rechazó la intromisión en la política interna de Venezuela y hace suya la posición del portavoz del Grupo socialista en el Senado español cuando califica la incompetencia de España «para valorar la constitucionalidad de otros países»
Embajada de la República Bolivariana de Venezuela ante el Reino de España. Madrid, 23 de octubre de 2009.- El embajador de la República Bolivariana de Venezuela ante el Reino de España, Julián Isaías Rodríguez, aseguró que la moción aprobada el miércoles 21 de octubre por el Senado español sobre Venezuela constituye «un intento por enturbiar las buenas relaciones» que mantienen los gobiernos de España y Venezuela. «Pero no lo lograrán», puntualizó.
«Esta moción forma parte de una campaña orquestada por la derecha española y la oposición venezolana con el propósito de tergiversar nuestra realidad democrática y soberana y enturbiar las buenas relaciones existentes entre los gobiernos. La mayoría que aprobó esta moción en el Senado español no persigue otro objetivo que poner en peligro las grandes inversiones que empresas españolas han realizado en nuestro país».
En sintonía con las declaraciones de la Presidenta de la Asamblea Nacional venezolana, Cilia Flores y el Presidente de la Comisión de Política Exterior del mismo organismo, Roy Daza, el embajador Rodríguez rechazó enérgicamente la intromisión del Senado español en la política interna de Venezuela, pero hace suya la intervención del portavoz del Grupo socialista, Arcadio Díaz Tejero, al señalar de manera expresa la incompetencia del Senado español «para valorar la constitucionalidad de otros países».
«Es lamentable que la derecha española insista en su campaña de manipulación contra Venezuela y que pretenda irresponsablemente llevarla a las instituciones españolas. Es igualmente lamentable la cobertura dada por algunos medios a la moción al ocultar detalles trascendentes del debate, como por ejemplo la intervención del senador, Arcadio Díaz Tejero, quien aludió a la sesión como «una suerte de juicio público’ «, señaló el representante diplomático.
En este sentido, el senador del PSOE preguntó, además, si esta Cámara estaría en condiciones de pronunciarse sobre «los procesos judiciales que se realizan en Estados Unidos» y «sobre los procesos que se siguen contra Silvio Berlusconi». El senado español -afirmó Díaz Tejero- «no tiene competencia para evaluar los procesos penales en otros países», por lo que exhortó a «ser responsables con los procesos internos que se están viviendo en otros países».
Con una diferencia de sólo 18 votos, los senadores españoles representantes del Partido Popular y de otros partidos de derecha, «lograron imponer una moción injerencista en los asuntos propios del Poder Judicial venezolano, que pretende presionar al Gobierno del presidente José Luis Rodríguez Zapatero para que realice una exhortación a las autoridades venezolanas que violentaría nuestra soberanía y nuestro Estado de Derecho», afirmó el embajador.
El senador Dionisio García Carnero del PP cuestionó, a propósito del debate sobre la moción aprobada, al «régimen dictatorial de Hugo Chávez», pero a juicio del embajador Rodríguez «mejor sería que tanto el senador García como su partido, el PP, se preocupasen de aclarar la trama de corrupción Gürtel, en la que algunos dirigentes de ese partido han desafiado a las autoridades españolas y aún a las de su propia tolda política para mantenerse en los cargos que desempeñan».