Según la OIT, se necesitan crear 22 millones de puestos para recuperar los niveles precrisis: 14 millones en los países ricos y ocho en las naciones en desarrollo.
El empleo a nivel mundial no recuperará los niveles previos a la crisis hasta el 2015 si se continúa con las políticas actuales, lo que alimentará la tensión social, dijo el viernes la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Anteriormente, la agencia de Naciones Unidas pronosticaba que esto ocurriría para el 2013. Según la OIT, se necesitan crear 22 millones de puestos para recuperar los niveles precrisis: 14 millones en los países ricos y ocho en las naciones en desarrollo.
La economía mundial ha comenzado a crecer de nuevo, con signos alentadores de recuperación del empleo especialmente en algunas economías emergentes de Asia y América Latina, dijo la OIT en su informe anual sobre el Mundo del Trabajo.
«Pese a esos avances significativos (…) nuevas nubes han emergido en el horizonte del empleo y las perspectivas han empeorado significativamente en muchos países», declaró.
Raymond Torres, el principal autor del informe, dijo en rueda de prensa que la pérdida de empleo desde que comenzó la crisis ha ascendido a 30 ó 35 millones. La OIT tiene una previsión de desempleo para este año de 213 millones, con una tasa del 6,5 por ciento.
Para Estados Unidos -donde un desempleo persistente se ha convertido en uno de los principales temas de la campaña para las elecciones de noviembre- aún hacen falta 6,9 millones de puestos de trabajo para recuperar los niveles precrisis, dijo el economista de la OIT Steven Tobin.
La pérdida prolongada de empleo y la percepción creciente de injusticia amenazan con aumentar la tensión social, dijo la OIT.
En 35 países para los que existe datos, casi el 40 por ciento de las personas que buscan trabajo llevan más de un año sin empleo, lo que conlleva el riesgo de desmoralización y problemas psicológicos.
La agencia indicó que se había detectado malestar social vinculado a la crisis en al menos 25 países, entre ellos en algunas economías emergentes en recuperación.
En más de tres cuartas partes de los 82 países con información disponible, la percepción de la gente de su calidad y nivel de vida había descendido en el 2009 respecto al 2006, mientras que la satisfacción en el trabajo también disminuyó incluso entre los que están empleados.