Comenzó en Vancouver el segundo Congreso Mundial de la Confederación Sindical Internacional (CSI) que reúne, desde el 21 hasta el 25 de junio, a mil delegados/as que representan a 176 millones de trabajadores de todo el mundo. «Los trabajadores y trabajadoras han pagado y están pagando el precio de la crisis, y no van a […]
Comenzó en Vancouver el segundo Congreso Mundial de la Confederación Sindical Internacional (CSI) que reúne, desde el 21 hasta el 25 de junio, a mil delegados/as que representan a 176 millones de trabajadores de todo el mundo.
«Los trabajadores y trabajadoras han pagado y están pagando el precio de la crisis, y no van a aceptar pagar por la crisis de la deuda que se está desarrollando ahora», dijo el Secretario General de la Confederación Sindical Internacional (CSI) Guy Ryder en una reunión mantenida hace unos días con una delegación de la Agrupación Global Unions y el Primer Ministro Canadiense Stephen Harper, próximo anfitrión de la Cumbre del G8/G20 en Canadá a desarrollarse entre el 25 y 27 de junio.
Y desde Vancouver, los sindicatos emitieron una declaración (1) dirigida a los líderes mundiales que se reunirán en Toronto, en la que proponen un plan exhaustivo para el desarrollo de la economía mundial a partir de la recesión. En el documento, advierten del grave peligro que supone que los gobiernos implementen de forma prematura medidas de austeridad fiscal en las economías del G20, llevando a la economía global a una recesión global. «La economía mundial sigue sumida en la peor crisis de empleo desde la Gran Depresión. La recuperación es débil, frágil e irregular. Las medidas de austeridad sólo servirán para debilitar, o incluso paralizar, el crecimiento, llevando así a nuestras economías de vuelta a la recesión», se señala en el documento. Y se agrega: «Los líderes del G20 no deben permitir que los mercados bursátiles dirijan la política económica. Los sindicatos solicitarán a los líderes del G20 que cumplan con la promesa que hicieron en la Cumbre de Pittsburg, a saber, situar el empleo de calidad en el núcleo de la recuperación, y centrarse en la creación, a corto plazo, de puestos de trabajo a fin de sostener la recuperación y reducir a medio plazo los déficit públicos».
El plan alternativo de los sindicatos solicita a los líderes del G20 que mantengan las medidas de estímulo centradas en el empleo y el crecimiento y apoyen medidas que sitúen un modelo de mercado laboral sostenible, basado en el trabajo decente, en el eje del marco de las políticas post-crisis; que pongan fin a los ataques especulativos a las divisas y proporcionen un régimen fiscal justo que incluya la implementación de un Impuesto sobre las Transacciones Financieras (ITF) para frenar el comportamiento especulativo al tiempoque se recaudan los fondos necesarios para pagar la crisis y otros bienes públicos. Lo que parece mas importante es que reformen el sistema financiero a través de la acción coordinada del G20 de manera que se rompa con el círculo vicioso de un sistema financiero no reformado que dirige las tomas de decisiones del Gobierno y retiene al mismo tiempo la volatilidad que podría desencadenar otra crisis a medio plazo.
En vísperas del congreso de la CSI, se reunieron los jóvenes sindicalistas de todo el mundo debatieron sobre la situación de la juventud en el lugar de trabajo .»La gente joven tiene la mismas necesidades que la gente mayor, también necesitan un trabajo decente para poder tener una vida decente», dijo Jefferson Coriteac, Presidente del Comité de Juventud Força Sindical de Brasil.
«Los jóvenes también tienen que comer, pagarse el alquiler, mantener a su familia…Y sin embargo se encuentran entre los primeros afectados en tiempos de crisis, y entre los primeros en tener las condiciones de trabajo más precarias». Durante el pasado fin de semana, en el Comité de Juventud se discutieron sobre los retos futuros para la gente joven: «Las cifras de desempleo juvenil por todo el planeta son enormes y aterradoras», dijo Sharan Burrow, Presidenta de la CSI, «y se trata de un problema global que tenemos que abordar. En algunos países el desempleo juvenil llega a un 80%», agregó.
La Confederación Sindical Internacional (CSI) es la principal organización sindical internacional, cuenta con 312 organizaciones afiliadas en 156 países y territorios, sumando una membresía total de 176 millones de trabajadores.
– Elvira Corona es periodista italiana.