Castrocomunismo, socialismo de la unión soviética, autocracia, y otros más, han sido los apellidos que le han endilgado al recién nacido y, por tanto, poco conocido socialismo del siglo XXI.Uno de sus ideólogos, Haiman El Troudi, aclaró ayer a un grupo de trabajadores de la Cadena Capriles, que el único apellido de este nuevo «sistema» […]
Castrocomunismo, socialismo de la unión soviética, autocracia, y otros más, han sido los apellidos que le han endilgado al recién nacido y, por tanto, poco conocido socialismo del siglo XXI.
Uno de sus ideólogos, Haiman El Troudi, aclaró ayer a un grupo de trabajadores de la Cadena Capriles, que el único apellido de este nuevo «sistema» es el de siglo XXI. «Se le llamó así, para desligarlo del socialismo tradicional, y de otras prácticas con las cuales le puedan vincular», insistió.
Descartó por completo que se pretendan emular modelos como el de Cuba. «Nos gusta hablar de la transición antes que de determinismos que buscan una definición cerrada del socialismo».
Dejó claro que «el socialismo del siglo XXI será lo que todos en colectivo decidamos que sea». Destacó que el Poder Popular debe partir de la organización y comprensión del entorno, para luego pasar a la elaboración de un plan de acción, el cual contará con los recursos necesarios para aplicarlo.
Luego, se deberá implantar la administración comunitaria y la contraloría social.
Bajo todo ese preámbulo, una aproximación de El Troudi, es que se trata de un sistema y una idea que edifica una nueva sociedad, regida por el poder popular en profunda democracia participativa y protagónica, con igualdad material y cultural entre las personas, para la satisfacción de sus necesidades y para su vida digna, y el desarrollo integral de los seres humanos.
Reconoció que hay que trabajar más para acabar con el uso excesivo de la imagen del presidente Hugo Chávez. «No comparto el culto a la personalidad, pero tampoco niego el derecho que tiene el pueblo de seguir a su líder», acotó.
Admitió que aún existe un modelo comunicacional que no ha logrado explicar de qué se trata el socialismo del siglo XXI. Insistió en que el presidente Hugo Chávez, irá dando poco a poco las directrices, y puso las manos en el fuego para afirmar que el Mandatario piensa y concibe el proceso tal cual lo ha esbozado.
El capitalismo fracasó. El Troudi está convencido de que el capitalismo como modelo es inviable, «porque propone que todos podemos ser ricos, y para ello necesitaríamos cinco planetas tierra para que todos llegáramos a serlo».
Enumeró una serie de antivalores que promueve el capitalismo, y que el socialismo del siglo XXI deberá desplazar con los rasgos distintivos del hombre y la mujer socialistas. Calificó como «antivalores»: la explotación del hombre por el hombre; consumismo; culto al fetiche materialista y la corrupción; entre otros.
El ideal y el sistema. Según El Troudi la consigna del socialismo del siglo XXI es empujar la sociedad hacia arriba, «seamos todos y todas clase media». Pero aclara que esa clase debe estar alejada de los antivalores capitalistas.
Precisó que el modelo que se busca implantar en Venezuela, busca la consecución de un hombre nuevo, de una nueva sociedad.
Como sistema pretende lograr la democracia infinita basada en el Poder Popular; la inclusión, seguridad y protección social; el desarrollo armónico descentralizado del territorio (para lograr que todos los habitantes tengan oportunidades iguales); el internacionalismo (para que otros países apliquen el modelo); en lo militar la autodeterminación, independencia y soberanía; y una economía con nuevas relaciones de producción.
NO DEBERÍA SER
- Capitalista de Estado (Se debe marchar hacia empresas de producción social)
- Populista paternalista (Se pretende acabar con la cultura de papá Estado resuelve todo)
- Practicante de un excesivo centralismo democrático
- Castrador de la participación y el protagonismo popular (La finalidad es lograr el desarrollo integral del ser humano)
- Totalitario Ateo
- Mesiánico
- Armamentista (sin confundir con dotación necesaria del país para la defensa de su territorio)
- Unipartidista
- Extrapolador de modelos
- Auspiciante de la división entre dirigentes y dirigidos.