Entre los sectores que se oponen a la venta pública de los terrenos petrolíferos se encuentran el Movimiento de Trabajadores Rurales sin Tierra – MST -, la Federación Única de los Petroleros – FUP -, la Asociación de los Ingenieros de la Petrobrás y el gobernador del estado de Paraná, Roberto Requião. La FUP afirma […]
Entre los sectores que se oponen a la venta pública de los terrenos petrolíferos se encuentran el Movimiento de Trabajadores Rurales sin Tierra – MST -, la Federación Única de los Petroleros – FUP -, la Asociación de los Ingenieros de la Petrobrás y el gobernador del estado de Paraná, Roberto Requião.
La FUP afirma en un documento que la licitación de tierras con potencial petrolífero representará grandes prejuicios para Brasil. El sindicato denuncia que se pretende vender a las multinacionales «tierras de la costa marítima vecinas a campos de producción estratégicos donde Petrobrás ya invirtió cerca de 800 millones de dólares».
Por su parte Roberto Baggio, miembro de la coordinación nacional del MST, resalta que «Brasil corre el riesgo de quedar sin reservas de petróleo cuando sea escaso mundialmente, y esto traerá consecuencias en el área social». El MST acampó en la explanada de los ministerios en Brasilia en señal de protesta contra la licitación.
A su vez el gobernador Requião presentó un pedido de inconstitucionalidad del remate de áreas petroleras. La solicitud había sido atendida por uno de los jueces del Supremo Tribunal Federal brasilero y la licitación se había suspendido. Sin embargo, el presidente del Tribunal Superior rechazó el pedido de inconstitucionalidad con lo que el remate finalmente se realizó.
La secretaria ejecutiva de Petróleo y Gas del Ministerio de Minas y Energía, Maria das Graças Costa, aseguró que «en ningún momento el gobierno brasileño pensó en desistir de esta sexta rueda de licitaciones. Además la funcionaria agregó que estas ventas son necesarias para mantener la tranquilidad en materia energética.
Durante la licitación de áreas con potencial petrolero, se vendieron 7 de los 13 bloques ofrecidos. La estatal Petrobrás quedo con el control absoluto de la explotación apenas en uno.