La Isla de Margarita, en la República Bolivariana Venezuela, se convirtió este sábado en la capital del Sur del mundo, con la participación activa de un número importante de presidentes africanos y suramericanos, quienes se han dado cita durante la II Cumbre del ASA, lo que demuestra que por medio del compromiso político se puede […]
La Isla de Margarita, en la República Bolivariana Venezuela, se convirtió este sábado en la capital del Sur del mundo, con la participación activa de un número importante de presidentes africanos y suramericanos, quienes se han dado cita durante la II Cumbre del ASA, lo que demuestra que por medio del compromiso político se puede lograr la integración.
Líderes del eje Sur-Sur han expuesto una gama de ideas en pro de articular de manera conjunta las relaciones culturales, sociales, históricas y económicas de ambas regiones.
En ese sentido, algunas de las propuestas asomadas por el presidente de la República, y anfitrión del evento, Hugo Chávez, fue la de conformar «una especie de mesa estratégica presidencial; gente dedicada exclusivamente al trabajo de diseñar un plan estratégico durante el período 2010-2020′.
Por su parte, el líder revolucionario y presidente de Libia, Muammar Al Gadafi, aplaudió en su turno las iniciativas progresistas de América Latina.
Asimismo, el Jefe de Libia y autor del Libro Verde, manifestó que aspira lograr junto con sus homólogos, «resultados prácticos y concretos que consoliden las victorias políticas y económicas de nuestros pueblos».
Una de las intervenciones más elocuentes fue la del presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, quien dijo creer «en el poder de transformación de una alianza de regiones que viven realidades similares».
Lula además, resaltó un punto que no se había tocado anteriormente. El primer mandatario brasileño reconoció que «gracias a los esfuerzos de la Unión Africana (UA) el continente marcha rumbo a la construcción de la paz y la consolidación de la democracia. Por tanto, Unasur tiene mucho que aprender de la UA. La mano visible del Estado debe ocupar el vacío regulatorio que dejó la mano invisible del mercado».
Durante su turno, el vicepresidente de Nigeria, Goodluck Jonathan, pidió pertinencia y recordó que es preciso tener presente que «reuniones como éstas a veces caen en retórica, superemos las dificultades y con voluntad política asumamos acciones y pongamos en práctica todo lo que acordemos».
El presidente de Sudafrica, Jacob Zuma, manifestó en nombre de su nación el «honor de formar parte de este histórico acontecimiento que reimpulsa la cooperación Sur-Sur».
La presidenta de Argentina, Cristina Fernández, dijo: «Tal vez los poderosos no se dieron cuenta que con sus políticas de dominación y exclusión, casi como una acción-reacción, su propio egoísmo contribuyó a formar un mundo diferente».
Analistas consideran que para llevar a cabo procesos de integración, la voluntad política es uno de los aspectos fundamentales. Este sábado, en Margarita, todos los presidentes congregados, sin excepciones, han demostrado que para la integración entre África y América del Sur, los recursos, infraestructura y sobre todo voluntad política y social, están a la orden del día.
Fuente: http://abn.info.ve/noticia.php?articulo=200628&lee=16