Guy Standing ha escrito este prólogo que reproducimos al libro La Renta Básica. ¿Por qué y para qué? (Catarata, 2021) que acaba de publicarse.
En este nuevo libro se desarrollan distintos aspectos relacionados con la renta básica. En la nota de prensa de la editorial podemos leer: “Un calzoncillo no es un traje ni un subsidio condicionado es una renta básica. Desde hace más de tres décadas, la asociación internacional Basic Income Earth Network la define como una ‘asignación monetaria, individual, incondicional y universal’, pero son muchas las cuestiones que se desprenden de ella. ¿Es una propuesta justa? ¿A qué nos referimos cuando hablamos de justicia? ¿Es viable económicamente? ¿Las izquierdas y las derechas que dicen defenderla se refieren a lo mismo? ¿Qué aportan los debates feministas sobre la renta básica a la fundamentación de la misma? ¿Por qué los sindicatos han sido en general refractarios a esta propuesta? ¿Qué nos dicen los experimentos sobre la relación de la renta básica con la salud mental?” En algunos capítulos y apartados del libro también han colaborado distintos autores y autoras: Nuria Alabao, Jordi Arcarons, Sarah Babiker, Francisco Javier Braña, David Casassas, Carme Porta, Sergi Raventós, Lluís Torrens e Iñaki Uribarri. El epílogo está escrito por María Julia Bertomeu. SP
La
mayoría de la gente dice que cree en la libertad; cualquier persona que dijera
lo contrario no sería considerada seriamente. Pero básicamente hay tres
variedades de libertad. Este libro trata sobre la más ambiciosa y exigente de
ellas, y ha sido escrito por alguien que ha dedicado años en su defensa de
forma excelente.
Sin embargo, consideremos las otras dos variedades antes de volver a la
republicana. Históricamente, los privilegiados y los de la “derecha” política
han abrazado lo que en el lenguaje moderno podría llamarse libertad libertariana, es
decir, la “libertad de elegir” nominal, que en la mente de Isaiah Berlin
implica libertad negativa – libertad ante las restricciones del Estado– y
libertad positiva –libertad para elegir trabajos, diferentes bienes y servicios
de consumo, etc. Para los libertarianos modernos, el Estado mismo es y siempre
será una restricción a la libertad, y como tal debe ser virtualmente abolido.