Cuba y Venezuela anunciaron hoy un salto en su alianza económica, que incluye la operación de una refinería en la isla, la búsqueda de petróleo en el Golfo de México, a 100 kilómetros de Cancún, el tendido de un cable submarino de fibra óptica y la explotación de níquel y de un hotel de gran […]
Cuba y Venezuela anunciaron hoy un salto en su alianza económica, que incluye la operación de una refinería en la isla, la búsqueda de petróleo en el Golfo de México, a 100 kilómetros de Cancún, el tendido de un cable submarino de fibra óptica y la explotación de níquel y de un hotel de gran turismo.
El valor del paquete de acuerdos no fue precisado, pero compromete cientos de millones de dólares, con un amplio horizonte que proyecta a Venezuela como un inversionista en la isla y no sólo como un socio comercial o proveedor de petróleo.
Aunque los planes pactados en firme se basan en la explotación de recursos naturales, un lote de convenios en estudio marca un giro hacia prospectos de desarrollo industrial.
Los nuevos emprendimientos muestran el «creciente proceso de unión e integración» entre los dos países, dijo el presidente cubano en funciones, Raúl Castro, en un acto de firma de documentos al que asistió el mandatario venezolano, Hugo Chávez.
El presidente de Venezuela insistió en una de sus propuestas a los cubanos, deslizada en la víspera: «Podríamos conformar en un futuro próximo una confederación de repúblicas; dos repúblicas en una, dos países en uno».
Chávez visitó el domingo en la localidad surcentral de Cienfuegos la refinería Camilo Cienfuegos, que arrancará este fin de año procesando 65 mil barriles diarios de petróleo, para alcanzar los 108 mil barriles diarios en una segunda etapa.
La empresa mixta tiene un valor estratégico, porque está prevista su conexión con un oleoducto que llega a una terminal de almacenamiento para supertanqueros en el noroeste de Cuba, con lo cual surgiría una plataforma de servicios petrolíferos única en el Caribe, dispuesta para la exportación.
La planta, de tecnología soviética, dejó de funcionar por la crisis económica de la década pasada y reiniciará labores ampliada y modernizada. El proyecto incluye dos muelles para buques y una red de distribución interna por ferrocarril y camiones cisterna.
La inversión de la primera fase es de 236 millones de dólares y de mil 300 millones de dólares en la segunda, y se suma a sendos proyectos venezolanos de refinerías en Nicaragua y Ecuador, dijo Chávez.
Las dos empresas estatales firmaron contratos para la exploración y explotación de petróleo en tres zonas ubicadas frente al extremo occidental de Cuba: a) cuatro lotes en aguas profundas, en los límites marítimos con México; b) un lote en aguas someras y c) otro lote en tierra, en la provincia de Pinar del Río.
No hubo detalles sobre este caso, pero la suscripción de contrato para explorar y explotar en la zona cubana del golfo de México indica que los estudios preliminares realizados en el primer semestre del año dieron resultados positivos.
Chávez firmó aquí un decreto presidencial que autoriza la creación de una empresa mixta con Cuba para el tendido de un cable submarino de fibra óptica de mil 550 kilómetros entre los dos países, con salidas de conexión para el Caribe.
El plan, de 70 millones de dólares, unirá las comunicaciones entre los dos países y, entre otras consecuencias, facilitará el acceso de la isla al Internet.
También quedaron constituidas una empresa mixta para la explotación de minerales del níquel y otra para la construcción y explotación de un hotel en Cayo Paredón Grande, un islote frente a la costa norcentral cubana.
En la fase de estudio quedaron proyectos conjuntos para producir cemento, construir una petroquímica, una regasificadora y una mejoradora de crudo y para crear una industria naval pesquera.