¿Adivinen qué? Ha habido una pequeña alza en las ganancias de algunas corporaciones. A las corporaciones y a los bancos más grandes les está yendo un poco mejor. Así que los expertos ven una «recuperación». Sin embargo, esto no es una gran sorpresa. El gobierno dio a los bancos y a la industria automovilística billones […]
¿Adivinen qué? Ha habido una pequeña alza en las ganancias de algunas corporaciones. A las corporaciones y a los bancos más grandes les está yendo un poco mejor. Así que los expertos ven una «recuperación».
Sin embargo, esto no es una gran sorpresa.
El gobierno dio a los bancos y a la industria automovilística billones de dólares en rescate. No es de extrañar que estén mejorando.
Si Washington le diera $1,2 billones de dólares en efectivo a un programa genuino de empleos, en vez de dárselos a la AIG, Citigroup, Bank of America, Wells Fargo y al resto de los ladrones, los 30 millones de trabajadores/as que ahora se encuentran sin empleos o sub empleados/as, también estarían mucho mejor.
Si el gobierno gastara $10 o $12 billones de dólares para pagar las deudas impagables de los/as trabajadores/as y garantizara sus préstamos de la misma manera en que ha hecho para Wall Street, los/as trabajadores/as aún seguirían explotados/as y mal pagados/as, pero las cosas no estarían tan malas.
En cambio, hay 30 millones de trabajadores/as desempleados/as o sub empleados/as, con una tasa de desempleo a niveles de depresión en las comunidades africana-americanas y latinas, y las cosas continúan poniéndose peor, no mejor, para ellos/as y sus familias.
1.000 solicitudes para 30 empleos
Una prueba de cuán difícil es para los/as obreros/as encontrar empleos, especialmente para los/as trabajadores/as africano-americanos/as, fue revelada en un artículo sobre el desempleo en Uniontown de Alabama, cuyo condado que lo rodea, Perry County, es muy pobre y casi el 70 por ciento es población negra. A Uniontown se le había pagado $3 millones de dólares para verter miles de toneladas de cenizas que se derramaron en un sitio al oriente de Tennessee el pasado mes de diciembre.
En un anuncio se dijo que este contrato crearía 30 empleos en un condado cuya tasa de desempleo es del 17 por ciento. La compañía Arrowhead Landfill dejó de tomar solicitudes después de que mil personas se presentaran. (New York Times, 29 de agosto)
La situación en Perry County es como la situación en Michigan, Ohio, Rhode Island, California, Carolina del Norte, Nevada y condados y ciudades por todo el país. Un estimado conservador es que por todo el país hay seis personas desempleadas por cada empleo disponible y las cosas se están poniendo peor.
Aumentan las ganancias cortando empleos
Son los despidos masivos de trabajadores/as por los capitalistas lo que está detrás de la leve y temporal alza en las ganancias de las empresas y no una renovada actividad en las ventas.
«El mercado subió este verano y está en su máximo del año», publicó el periódico Wall Street Journal el 31 de agosto, «estimulado en gran parte por ganancias del segundo trimestre mayores de lo que se esperaba. Pero el motor significativo de la buena noticia fue el recorte en los costos. Muchas compañías tuvieron ventas decepcionantes».
Los empresarios se están enfrentando a una contradicción: «Uno no puede simplemente reducir los costos para siempre para poder tener ganancias sostenibles», dijo un estratega de la firma de investigaciones de inversiones, Zack Investment Research. «Se necesitan ingresos para crecer [en ganancias]».
Los empresarios cuentan con las ventas para obtener ganancias. Hacen dinero del sudor y sangre de los/as trabajadores/as, vendiendo lo que los/as trabajadores/as producen. Pero para aumentar las ganancias, los patronos han recortado los salarios, reducido la fuerza laboral, disminuido las horas de trabajo y los beneficios. Mientras cada compañía trata de aumentar sus ganancias recortando la mano de obra, esta tendencia inevitablemente profundiza y amplía la pobreza y las dificultades.
«La reducción del costo» es una palabra en clave que significa despidos, congelación de salarios, recortes de salarios y de horas de trabajo. Temiendo bajas en las ventas, los empresarios también recortan los inventarios, lo que resulta en menos órdenes. A su vez, menos órdenes significa más desempleo o sub empleo.
Incrementan ejecuciones hipotecarias, se propagan ciudades de tiendas de campaña
A pesar de que se habla de recuperación y la reactivación del mercado inmobiliario, las ejecuciones hipotecarias están aumentando y empeorando al profundizarse la crisis en el desempleo. Hubo 360.000 ejecuciones de hipotecas en julio, un aumento del 7 por ciento del de junio y 32 por ciento más que el año anterior. Una cifra récord de 13,6 por ciento de los hogares, se encuentra en ejecución hipotecaria o retrasada en sus pagos de hipoteca. Cada vez más las ejecuciones hipotecarias son en hipotecas seguras de trabajadores/as que han perdido su empleo.
Al perder los/as trabajadores/as sus empleos, aumentan los/as sin techo y ciudades de tiendas de campaña están surgiendo por todo el país. Ante el temor de una rebelión de masas, muchos municipios están legalizando estas ciudades. Ejemplo de ello son Nashville en Tennessee, Ontario (cerca de Los Ángeles), Ventura y Sacramento en California; Lacy en Washington y Champaign en Illinois. Estas son algunas de las muchas localidades que ya proveen servicios a las personas sin hogar o permiten que las instituciones de beneficencia lo hagan.
La Ciudad de Nueva York y Seattle por otro lado, han tratado de reprimir el creciente movimiento de gente sin techo.
En Nashville, en una noche cualquiera hay 4.000 personas sin hogar, según las autoridades de la ciudad, y sólo 785 camas en albergues. En la actualidad hay por lo menos 30 campamentos de tiendas en Nashville.
David Olson, de 47 años de edad, es típico de la nueva población sin hogar. Él y su esposa terminaron viviendo bajo un puente de carretera en Nashville después de que perdió su empleo en una fábrica de tubos de cemento en Iowa. Vinieron a Nashville para un trabajo inexistente de construcción. «Tengo cinco años de experiencia en carpintería y 10 años construyendo techos y no puedo encontrar un trabajo». (Wall Street Journal, 11 de agosto) La ciudad y las organizaciones sin fines de lucro encontraron viviendas para 25 personas. David Olson no era una de ellas.
Esta es la respuesta para las personas sin techo en el país capitalista más rico del mundo. Deja que las masas desalojadas vivan en tiendas de campaña en lugar de proporcionar viviendas, lo que debe ser un derecho fundamental de todas las personas.
El desempleo lleva a hipotecas fallidas. Es indicativo del resto de la crisis inmobiliaria y del endeudamiento excesivo de todo tipo que 84 bancos ya hayan fracasado este año. Además, hay 416 bancos, con activos de $299 miles de millones de dólares, en la lista de la Federal Deposit Insurance Corporation en peligro de fracasar. La FDIC tiene sólo $10 miles de millones restantes en su fondo para hacer frente a los bancos insolventes.
En lugar de ayudar a pagar a las personas con problemas hipotecarios, lo que mantendría a los bancos solventes, la FDIC ha gastado $40 mil millones tomando bancos insolventes y fusionando muchos de éstos con otros bancos.
La FDIC ha creado «acciones de pérdidas» en la que dejan que los bancos más fuertes asuman el control de otros más débiles y garantizan desde el 80 hasta un máximo del 95 por ciento de las pérdidas potenciales de los préstamos malos de bienes raíces. Sería la medida más directa y eficiente el usar las decenas de miles de millones de dólares para garantizar el pago de los/as hipotecas a los/as propietarios/as de viviendas, mantenerles en sus hogares, evitar que los precios de la vivienda caigan y mantener los vecindarios sin que se deterioren. Pero la FDIC está manipulando el proceso para que los tiburones bancarios se vuelvan más fuertes al devorar los bancos más débiles.
‘La madre de todas las recuperaciones sin empleos’.
En lo que se refiere a la clase obrera, bajo la crisis económica está la crisis de desempleo. Cada vez está más claro que el sistema capitalista, en su estado actual de desarrollo, no puede resolver la creciente crisis masiva de desempleo.
Un artículo de Prensa Asociada informó el 24 de agosto: «Tantos empleos se han perdido, casi siete millones desde que comenzó la recesión en diciembre de 2007, que la tasa de desempleo seguirá estando elevada mucho después de que la economía comience a recuperarse».
«Muchos/as estadounidenses desempleados/as han perdido el seguro por desempleo y beneficios por cesantía y están agotando sus reservas de ahorros. Otros/as están ahorrando más y gastando menos, todavía preocupados/as por la peor crisis económica desde la Gran Depresión».
El comunicado citó a Alan Sinai, un respetado analista burgués quien dijo: «Ésta será la madre de todas las recuperaciones sin empleos».
La gran mayoría de los despidos durante la presente crisis han sido despidos permanentes. Lo que significa que de los siete millones de empleo destruidos hasta ahora, la mayoría no se recuperará. El promedio de la deuda en cada hogar es alrededor de $10,000. El desempleo sigue subiendo. Los sueldos y beneficies disminuyen. Las quiebras personales están aumentando.
Las compañías de seguros de salud, las compañías farmacéuticas y los hospitales privados que funcionan para sacar ganancias, están desgastando los beneficios de cuidado de salud de las 250 millones de personas que están cubiertas por planes de seguros. El número de personas sin seguro de salud está constantemente subiendo al crecer el desempleo y ahora está cerca de 50 millones de personas.
En total, no hay probabilidad de una restauración capitalista verdadera, una donde los/as trabajadores/as regresen al trabajo; donde se acabe la ansiedad e inseguridad impuestas por el miedo a los despidos y cierres de fábricas y donde cesen las demandas por concesiones; donde los salarios suban a un nivel que sostenga una vida sin penurias y donde los trabajos estén seguros.
El sueldo anual promedio del 80 por ciento de la clase trabajadora ha disminuido a $33.000 al año, esto es uno y medio el nivel oficial de pobreza (Business Week, 27 de agosto). Si no hay resistencia mientras los/as trabajadores/as están forzados/as a competir cada vez más uno/a con el/la otro/a en pos de empleos, los sueldos disminuirán, los sindicatos se debilitarán, y la fuerza colectiva de la clase trabajadora se debilitará.
La lucha de clases independiente y unida es la única forma de superar esto
La única manera de superar esta crisis es que se unan en la lucha la clase trabajadora y todos/as los/as oprimidos/as. El tiempo de esperar por el liderazgo del Partido Demócrata para revertir el destino de los/as trabajadores/as debe terminar. El tiempo de esperar que el capitalismo se restaure y vuelva en auge ha terminado.
El movimiento sindicalista debe unirse a las comunidades; los/as que están organizados/as en uniones deben unirse con los/as no organizados/as; los/as que tienen trabajo deben unirse con los/as desempleados/as. Los/as trabajadores/as nacidos/as en los Estados Unidos deben unirse a los/as inmigrantes, incluyendo a los/as indocumentados/as. Los/as trabajadores/as blancos/as deben rechazar el racismo y las divisiones. Esta es la única forma de construir un movimiento poderoso capaz de cambiar el estado de cosas.
Éste es exactamente el objetivo del Movimiento Pro Rescate del Pueblo (Bail Out the People Movement) y decenas de organizaciones auspiciadoras que están construyendo una movilización masiva para una Marcha para Empleos en Pittsburgh el 20 de septiembre para protestar la reunión de los G-20, los veinte gobiernos ricos que se van a reunir para tratar de reforzar el sistema de ganancias que desangra a los/as trabajadores/as del mundo.
Habrá un militante Campamento de Tiendas de campaña que estará en solidaridad con los/as desempleados/as a partir del fin de semana de 19 y 20 de septiembre culminando en la Marcha para Empleos el 20 de septiembre.
Las buenas noticias son que a fines de agosto los sindicatos de Trabajadores/as del Acero (Steelworkers) y el sindicato Eléctricos Unidos/as (United Electrical), que tienen sus oficinas centrales en Pittsburgh, han respaldado formalmente la Marcha para Empleos, la cual ya está también encontrando apoyo en la comunidad africana-americana de Pittsburgh.
Vayan ustedes. Declaren que un trabajo o un ingreso es un derecho. Si tiene empleo, luche para retenerlo. Si no tiene trabajo, luche para conseguir uno.