La dirigencia de la República Bolivariana de Venezuela con Nicolás Maduro al frente y el apoyo de la mayoría del pueblo, han fortalecido las políticas sociales y económicas que le permitieron salir adelante en 2019, pese a las constantes agresiones financiero-económicas lanzadas por Estados Unidos y sus aliados de la derecha criolla. Estructurando perspicaces iniciativas […]
La dirigencia de la República Bolivariana de Venezuela con Nicolás Maduro al frente y el apoyo de la mayoría del pueblo, han fortalecido las políticas sociales y económicas que le permitieron salir adelante en 2019, pese a las constantes agresiones financiero-económicas lanzadas por Estados Unidos y sus aliados de la derecha criolla.
Estructurando perspicaces iniciativas a lo largo y ancho del territorio, Venezuela logró evadir todos los tropiezos que le interpuso Washington en el pasado año como fueron intentos de golpe de Estado, ataques a instalaciones militares, sabotajes contra la producción petrolera, acaparamiento de alimentos y medicinas, contrabando de mercancías hacia las fronteras y purulentas campañas desinformativas.
Casi ningún país de Latinoamericana, con excepción de Cuba, ha logrado resistir, como lo ha hecho Venezuela, los grandes embates lanzados durante años por las administraciones estadounidenses que insisten en querer controlar la región como si fuera su patrio trasero.
En el reciente informe anual presentado por el presidente Maduro ante la Asamblea Nacional Constituyente se evidenció que con las decisiones políticas adoptadas durante 2019 se lograron sobrepasar y esquivar las adversidades que provocan el bloqueo.
«Nuestro modelo social, enfatizó, fue puesto a prueba en las circunstancias más duras y adversas que jamás hemos enfrentado pero volvió a brillar con luz propia a través de todas sus virtudes de las misiones, el movimiento Somos Venezuela, y de esa forma se demostró la gran fortaleza del gobierno para acompañar al pueblo en su vida social».
Como un acto de piratería y latrocinio que supera cualquier norma, convención o apego al derecho internacional, denunció que en un escenario de dramáticas restricciones de ingresos de divisas dirigido desde Washington, a Venezuela le han sido robado, por «los centros de poder imperial y sus lacayos», cerca de 40 000 millones de dólares de los activos, bienes y efectivos en el extranjero.
Analicemos con cifras reales los logros obtenidos en 2019 con la magia bolivariana de esquivar las extorsiones (llamadas por Washington, sanciones) agresiones financieras y robos de bienes que solo le pertenecen a Caracas.
Con un esfuerzo extraordinario, el gobierno creó nuevos centros laborales, tanto en el campo como en las ciudades y logró contener la tasa de desempleo en 6 %, mientras el índice de trabajo formal se situó en 60 %.
El impuesto recaudado en el año por el sector tributario, subió al 65 % por lo que se alcanzó una disminución en el déficit fiscal.
Con el fin de proteger a la familia de los efectos de la guerra económica, se distribuyeron más de 8,5 billones de bolívares a más de 17 000 000 de personas.
Mediante el sistema digital «Patria» a través del Plan Integrar a las Víctimas de la Guerra Económica, se atendieron a 1 300 000 personas en el área de la alimentación, salud, educación y vivienda.
En esa misma línea, se garantizó un subsidio de casi 100 % dirigido a los servicios básicos prestados por el Estado.
Las enormes dificultades económicas no impidieron que en el año se edificaran 500 000 viviendas mientras que del 2011 al 2019 se han construido y entregado más de 3 000 000 de hogares al pueblo, lo que es un record para cualquier país. La meta hasta el 2025 es llegar a 5 000 000 de viviendas.
En un año de vida, la Gran Misión «Venezuela Bella» rehabilitó 2 500 espacios públicos como plazas, bulevares, espaciosos parques, miradores turísticos y centros de recreación en 167 ciudades del país.
La educación de la población en general se continúo impulsando al expandirse en un 6 % la matrícula escolar y en la actualidad más de 10 000 000 de personas están inscriptas en el sistema público.
La salud pública no ha dejado de avanzar y sus servicios se han llevado a los puntos más recónditos de la geografía. Solo en 2019 se realizaron 590 000 cirugías y se atendieron 373 000 partos y cesáreas. Además se incrementaron los servicios de odontología y la confección de prótesis dentales gratuitas.
Fundamental ha sido la atención alimentaria de la población al entregarse 120 000 000 de combos con 1 800 000 toneladas de comida con subsidios de protección equivalentes al 99 % mensual. Un dato sumamente destacado fue que el 60 % de las entregas se realizó con productos nacionales y en 2020 se prevé llevarlo al 100 %.
La producción petrolera, primordial rubro de la economía bolivariana que estuvo deprimida por las constantes agresiones financieras desde el exterior y grupos terroristas de la oposición interna, se elevó entre septiembre y finales de diciembre a 1 000 000 de barriles diarios y para 2020 se estima alcanzar los 2 000 000 de barriles al día.
En el presente año el porcentaje destinado a la inversión social será del 76 %, cifra difícilmente superada por cualquier otra nación.
Muchos se preguntan cómo un pueblo bloqueado financiera y económicamente pudo haber alcanzado estos logros y la respuesta es sencilla: por la voluntad política del gobierno que trabaja por mejorar la vida de sus ciudadanos.
Hedelberto López Blanch, periodista, escritor e investigador cubano.
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.