Sebastián Piñera, el hombre que en unos días asumirá su segundo mandato como presidente de Chile, es la séptima persona más rica del país y la 745 a nivel mundial según la revista Forbes. Su fortuna asciende a 2.700 millones de dólares. El nuevo presidente desciende de una familia chilena de élite y su vida […]
Sebastián Piñera, el hombre que en unos días asumirá su segundo mandato como presidente de Chile, es la séptima persona más rica del país y la 745 a nivel mundial según la revista Forbes. Su fortuna asciende a 2.700 millones de dólares.
El nuevo presidente desciende de una familia chilena de élite y su vida está marcada por los negocios. Los mismos involucraron diversas ramas: inmobiliaria, aerolíneas, supermercados, recursos naturales, televisión, tarjetas de crédito y equipos de fútbol, entre otros.
Desde el comienzo los negocios de Piñera estuvieron envueltos por la polémica. El inicio de su historial en el mundo empresarial se puede fechar en 1977 cuando ingresó al negocio bancario brindando asesoría al Banco de Talca a través de su firma Infinco. Dos años más tarde, fue nombrado gerente general del banco al que prestaba asesoría. Durante la gerencia general de Piñera el banco tenía prestado 200 millones de dólares, cinco veces su capital y reservas, cuando la ley permitía un límite máximo de 25 %. Los mismos se otorgaban a sociedades fantasmas. A su vez se aprovechó de beneficios que el Banco Central otorgaba a exportadores, fingiendo exportaciones en empresas relacionadas. Por estos motivos en 1982 ordenaron su arresto por fraude al Banco de Talca e infracciones a la Ley General de Bancos. Piñera evitó la cárcel estando prófugo veinticuatro días hasta que sus abogados obtuvieron un recurso de amparo que garantizó su libertad.
Sus negocios inmobiliarios también estuvieron viciados por la polémica, ya que -entre otras cosas- con ellos despojó de sus territorios a pueblos originarios. Tal es el caso de la compra de 6 millones de hectáreas en Isla Grande, Chiloé, para construir el Parque Tantauco en 2004. El proyecto se llevó adelante pero tuvo el rechazo de las comunidades huiliches que reclamaban sus derechos sobre las tierras, amparados en el Tratado de Tantauco.
Su paso más conocido por el mundo de los negocios es el de LAN Chile. En 1994 compró el 16 % de la aerolínea y posteriormente llegó a ser presidente de la misma. También se registraron polémicas en torno a esta actividad: en 2009 la Superintendencia de Valores y Seguros lo multó por comprar 3 millones de acciones de la compañía, luego de haber accedido a información privilegiada al haber sido parte de la sesión de directorio donde se había presentado de manera reservada el balance del trimestre anterior.
También el presidente empresario enfrentó acusaciones por negocios en un sector muy sensible: el farmacéutico. En 2009 se desató un escándalo al destaparse la existencia de colusión de precios entre las cadenas de farmacias en Chile. Piñera, quien condenó el hecho públicamente, en realidad estuvo involucrado ya que poseía acciones en FASA (Farmacias Ahumada).
En coherencia con su historial, durante su paso por el sector público se constataron conflictos de intereses y nuevos negociados. En 2009, antes de asumir su primer mandato, creó un fideicomiso ciego para administrar sus inversiones durante su presidencia. Sin embargo, solo incluyó un tercio de su cartera. El diputado Fuad Chain denunció que durante su presidencia Piñera conocía todas sus inversiones.
En 2010 se desató una gran polémica alrededor de la compra de acciones de la pesquera peruana Exalmar por parte de su Holding Bancard. En ese entonces Chile y Perú se encontraban litigando en La Haya para definir los límites marítimos internacionales. Finalmente el fallo fue favorable a Perú y por ende a la empresa de la que el presidente había adquirido recientemente acciones. Por esta causa fue imputado por la justicia, aunque en 2017 quedó libre de cargos.
Otro caso controvertido durante su presidencia se dio cuando la Comisión Nacional del Medio Ambiente de Chile aprobó por unanimidad un proyecto minero a cielo abierto a pesar de las falencias del estudio de impacto. Piñera era el principal accionista de la Copec, empresa impulsora del proyecto.
Recientemente el flamante presidente chileno se vio involucrado en la investigación del Centro de Investigación Periodística (CIPER) que descubrió que algunas empresas declaraban falsamente sus ganancias (comprando firmas en quiebra a partir de las cuales reportaban pérdidas) para pagar menos impuestos. En 2017 esta misma organización reveló que Piñera tenía una cuenta millonaria depositada en el paraíso fiscal de las Islas Vírgenes, la cual fue omitida en su declaración jurada.
La vida de Sebastián Piñera ha estado marcada por los negocios más que por la política. Incluso dentro de la función pública no descuidó sus intereses privados y se lo acusa de haber aprovechado su lugar para incrementar su fortuna. Más que presidente Piñera es el presidente empresario.
Fuente: http://www.celag.org/sebastian-pinera-presidente-empresario/