Los impactos de los cultivos de agroenergía en Brasil fueron tema de debate, hoy (10) por la mañana, en el Plenario 3 de la Cámara de Diputados, en Brasilia. El evento, promovido por el Centro de Monitoreo de Agrocombustibles (CMA) de la Reporter Brasil y por el Frente Parlamentario de la Tierra, discutió los resultados […]
Los impactos de los cultivos de agroenergía en Brasil fueron tema de debate, hoy (10) por la mañana, en el Plenario 3 de la Cámara de Diputados, en Brasilia. El evento, promovido por el Centro de Monitoreo de Agrocombustibles (CMA) de la Reporter Brasil y por el Frente Parlamentario de la Tierra, discutió los resultados del primer volumen del informe «El Brasil de los Agrocombustibles: Los Impactos de los Cultivos sobre la Tierra, el Medio y la Sociedad», publicado por el CMA.
El debate contó con la participación de parlamentarios y representantes del Movimiento de Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST), de la Comisión Pastoral de la Tierra, de la Confederación de Trabajadores de la Agricultura (Contag), de la Federación de Trabajadores de la Agricultura Familiar (Fetraf) y del Ministerio de Desarrollo Agrario (MDA).
El primer volumen del estudio del CMA, dividido en tres informes anuales, evalúa los efectos de los cultivos de soja y de mamona. En esta etapa, los investigadores anduvieron 19 mil kilómetros por diez estados brasileros, además de Paraguay, para analizar el impacto de los cultivos.
En el segundo volumen, los datos recogidos serán sobre maíz, algodón, dendé y babaçu. En el tercero, será la oportunidad de la caña y del piñon manso. Son tenidos en cuenta los aspectos socioeconómicos, ambientales, de la tierra, laborales, además del impacto sobre las comunidades indígenas y tradicionales.
Según el diputado federal Adão Pretto (PT-RS), que estuvo coordinando la mesa de debate, el único consenso alcanzado fue que no se puede dejar la agricultura familiar centralizarse solamente en el monocultivo, debiendo por lo tanto, haber una mayor diversificación en los cultivos. Para el diputado, la agricultura familiar debe dar prioridad a la producción de alimentos.
Los representantes del Ministerio de Desarrollo Agrario criticaron los resultados del informe del CMA y afirmaron que la política de agrocombustibles fue creada como una alternativa de la agricultura familiar. Sin embargo, la ONG Repórter Brasil resaltó que el estudio fue realizado directamente con la opinión de los agricultores.
Actualmente, el cultivo de productos para producir agrocombustible todavía es insignificante en las pequeñas propiedades, de acuerdo con Adão Pretto. «Debemos discutir el futuro, pues si comienza a dar dinero, ellos van cambiar los alimentos por los biocombustibles», resalta.
El propio diputado llegó a presenciar la interrupción de cultivos tradicionales en los pequeños agricultores en Río Grande do Sul en tiempos de la expansión de la soja en el estado: «Tengo recelos de que el agricultor caiga en el monocultivo. ¿Qué es lo que va a comer con sólo plantar caña? Van a terminar yendo a la interrupción de cultivos como ocurrió con la soja».
El año pasado, el diputado visitó Venezuela para conocer la realidad agrícola de ese país. «Los venezolanos viven alrededor del petróleo. El litro de leche cuesta mucho más caro que la gasolina», resalta. Además, él señala que la mayor diferencia entre la agricultura venezolana y la brasilera es que ésta última está mucho más diversificada. «Allá la reforma agraria está más avanzada, pero no hay gente para trabajar en las tierras expropiadas. La producción de alimentos deja mucho que desear», enfatiza.
Las noticias sobre Seguridad Alimentar son producidas con el apoyo del Banco del Nordeste de Brasil.
Traducción: Daniel Barrantes – [email protected]