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Soñadores y constructores en la historia del PT brasileño. Diálogo

Fuentes: Sin Permiso

«Hay que decir que el potencial de cooptación de las instituciones capitalistas es muy fuerte. Sabemos de la experiencia de la socialdemocracia en otras partes. Por eso hay que volver a los orígenes, que este libro recupera. Donde los fundadores venían de la clandestinidad, de los movimientos sociales y barriales, de las aportaciones de los cristianos de la Teología de la Liberación. Los militantes del partido mantienen ese fuego original. Nosotros confiamos en la democracia interna, en el derecho de tendencias y en la movilidad social para cambiar las cosas y mantener al propio partido en el campo de la izquierda. Las alternativas a la izquierda del PT no logran salir de la cultura y de la práctica grupuscular; son muy sectarios y de horizontes estrechos. No llegan a dialogar con la población, no logran constituirse en puntos de referencia para cambios factibles, ni a escala local, ni a escala regional, ni a escala nacional. Hay una conciencia clara en los movimientos sociales de que somos la segunda fuerza parlamentaria en el Congreso Nacional, el partido más simpático, el partido en el que la gente más confía en todo el país, y eso nos mantiene a todos a la izquierda, dentro del partido, peleando por un partido socialista que no ha abdicado de su historia. Con la comprensión de que es mejor esto que un pequeño grupito, acaso dotado de mayor densidad programática, pero incapaz de modificar las cosas.»

Carlos Abel Suárez, redactor de SINPERMISO en Buenos Aires , dialogó la semana pasada en Porto Alegre con su viejo amigo y camarada Raúl Pont, ex alcalde de la ciudad cuna del Presupuesto Participativo, dirigente del ala izquierda del PT brasileño y miembro de Consejo Editorial de SINPERMISO.

Se as coisas sâo inatingíveis…ora! / Nâo é motivo para nâo querê-las…/ Que tristes os caminhos, se nâo fora / A mágica presença das estrelas! / Mario Quintana, en Espelho mágico

Con esta cita del poeta «gaúcho» comienza el libro Muitos caminhos, uma estrela- memórias de militantes do PT, presentado esta semana en Porto Alegre. Se trata del primer tomo de una obra, editada por la Fundación Perceu Abramo, que reúne los testimonios de los fundadores del Partido de los Trabajadores (PT). En esta primera entrega, un volumen de unas 500 páginas cuidadosamente editado, son entrevistados doce fundadores, quienes relatan los debates, las luchas y las experiencias de los primeros pasos del PT.

Como bien dicen los coordinadores Alexandre Fortes y Marieta de Moraes Ferreira, en la presentación del trabajo, estas entrevistas y las que serán publicadas en dos próximos tomos, unos 50 testimonios en total, constituyen, además de una reflexión sobre el origen del PT, un fresco muy representativo de las transformaciones económicas, sociales, políticas y culturales de Brasil en la segunda mitad del Siglo XX.

Las entrevistas son apenas una muestra de la preocupación de preservar la historia del partido como parte de las luchas sociales que le dieron origen. Para la selección de los primeros entrevistados se tuvieron en cuenta la diversidad de género y de raza, sus experiencias en la lucha social y política y la representación de las distintas regiones del país.

En efecto, fueron entrevistados los sindicalistas Dalma Bom, Olivio Dutra, Luiz Dunci y Paulo Roca; dirigentes de las luchas rurales Avelino Ganzer, Manoel da Conceiçâo; luchadores sociales como Benedita da Silva e Irma Passoni; uno de los más brillantes intelectuales brasileños, el profesor Antonio Candido; el histórico de la izquierda brasileña, Apolonio de Carvalho y los militantes entonces más jóvenes destacados en combate contra la dictadura, Hamilton Pereira y Raúl Pont.

Los coordinadores admiten, asimismo, que sortearon no pocas dificultades para plasmar esta primera selección de entrevistas. Entre ellas la tensión que plantea a quienes piensan que una historia del PT «no se puede limitar a las figuras de proyección nacional, ya que en realidad el partido fue el resultado de la lucha de miles de militantes, muchas veces anónimos, que incluso dieron la vida por la causa». En efecto, el archivo del PT cuenta ya con unas 1.500 entrevistas y casi 6.000 horas de grabación para su Historia Oral.

Sin embargo, con esta primera entrega de Muitos caminhos, uma estrela se puede afirmar sin riesgo que en su pequeña gran historia el PT desarrolló raíces profundas.

La serie comienza con una entrevista a Apolonio de Carvalho realizada el 4 de marzo de 2005, poco antes de la muerte de esta figura legendaria de la izquierda brasileña. Participó den el levantamiento armado contra el gobierno de Getulio Vargas en 1935, miembro de la columna Prestes, puesto en prisión tras la derrota, de donde salió para sumarse a las Brigadas Internacionales que combatieron en España contra Franco. Huyó, en 1942, del campo de concentración francés, al que había sido confinado, para intervenir de manera destacada en los destacamentos de la Resistencia contra los nazis. Condecorado con la Legión de Honor por el gobierno francés, vuelve a Brasil en 1945, integrándose en el Partido Comunista (PCB) y viviendo en la clandestinidad hasta 1953. En 1964 rompe con el PCB, y en 1970 es detenido por el gobierno militar hasta que sale junto a otros 39 presos políticos, canjeado por el embajador alemán, que había sido secuestrado por la organización guerrillera Vanguardia Popular Revolucionaria (VPR). Regresó más tarde del exilio para continuar la lucha contra la dictadura militar y estar en la primera fila de fundación del PT. Por su trayectoria, los compañeros le reservaron la ficha de afiliación número uno del nuevo partido. Sobre esta distinción dice Apolonio: «Prefiero atribuir a los cabellos blancos esa situación muy privilegiada….los cabellos blancos siempre ayudan ¿no es así? (Se ríe)»

Pero esta vida emblemática no es una excepción entre entrevistados. También los recuerdos del Antonio Candido, uno de los grandes intelectuales brasileños, hacen su aportación a esta reconstrucción de los inicios del PT, como el resto de los entrevistados, que recorren las experiencias de la clandestinidad, la lucha social, sindical, barrial y estudiantil, pero al mismo tiempo plantean un debate sobre el presente.

Caminando por el Mercado de Porto Alegre, restaurado admirablemente por la gestión municipal del PT, conversamos con Raúl Pont sobre la importancia del libro en esta coyuntura política de Brasil.

– Es un trabajo muy bueno de la Fundación Perseu Abramo, que está a cargo del memorial del PT y de sus publicaciones, entre ellas la revista Teoría y Debate, que tiene ya más de 20 años. El libro resume la visión de cada uno de los dirigente desde los orígenes del PT. Las experiencias que traían de los sindicatos, de las organizaciones sociales, de los barrios, de la lucha clandestina contra la dictadura. Es una referencia muy fuerte para los que queremos un partido de lucha, anticapitalista, Para los que mantenemos la memoria de un partido de lucha, con una gran democracia interna.

– En general, en América Latina los partidos están muy devaluados, mientras que el PT, pese a todos los problemas, conserva vitalidad. ¿Por qué se dice que es el único partido moderno de Brasil?

– La vieja ARENA, que apoyaba a los militares, y el PMBD fueron los partidos tolerados por la dictadura. El PT nació de las luchas de 1979 y 1980. En las elecciones de 1982, el PT fue el único que se construyó desde abajo hacia arriba. Con la gente, en la lucha de los movimientos, sindicales y sociales. Por eso su origen es muy distinto, particularmente por su democracia interna, por la existencia de tendencias, por la elección por el voto directo de todos sus dirigentes y por la representación proporcional en todos los organismos.

– ¿Se podría decir que el PT es un partido democrático-republicano, mientras los otros son un aparato electoral?

– Yo hablo en este libro de esas posiciones y de la necesidad de profundizar la democracia cada vez más. Trabajar hacia fuera estimulando la participación directa en todas nuestras administraciones. Tal fue la experiencia del Presupuesto Participativo y otras iniciativas que abren un espacio casi infinito de incitación al debate, a la participación y construcción del régimen democrático.

– Los intentos de una reforma política para afirmar ese curso hasta ahora no han prosperado. ¿Por qué?

– El principal obstáculo que tenemos es el sistema político-electoral. Las elecciones a los puestos ejecutivos son separadas de las legislativas. El voto por lista abierta ha fomentado el individualismo, ha sido un estímulo al poder económico, y para la corrupción de los procesos electorales. Porque lo que vale es la plata, quién puede pagar la campaña más cara. Eso es brutal. Ningún presidente, gobernador o prefeito (alcalde, intendente) llega al gobierno con mayoría, con gobernabilidad. De allí los compromisos. Lula tuvo que distribuir los ministerios entre los partidos del centro. Un ministerio pelea por la reforma agraria y el otro a favor del agronegocio. Es una esquizofrenia permanente. El próximo mes tenemos elecciones municipales en todo el país. Lula está muy bien; la última encuesta nacional de la Folha de Sao Paulo le da 64 por ciento de opiniones favorables, entre bueno y óptimo. Un récord para un presidente en la mitad de su segundo mandato. El PT tendrá una victoria importante, puede ganar las grandes capitales; está muy bien en San Pablo, en Recife, en Fortaleza, en Salvador, en Belo Horizonte. Sin embargo, por la atomización que provoca el voto nominal, no vamos a tener mayoría en los cuerpos legislativos. Para que esa gran transformación a la que aspiramos pueda concretarse -la integración sudamericana, lucha frontal contra el imperialismo, reformas más radicales, etc.-, se requiere un reforma política profunda.

– Entre aquellos sueños de los primeros pasos del PT y estas realidades ¿cuál es el balance?

– Hay que decir que el potencial de cooptación de las instituciones capitalistas es muy fuerte. Sabemos de la experiencia de la socialdemocracia en otras partes. Por eso hay que volver a los orígenes, que este libro recupera. Donde los fundadores venían de la clandestinidad, de los movimientos sociales y barriales, de las aportaciones de los cristianos de la Teología de la Liberación. Los militantes del partido mantienen ese fuego original. Nosotros confiamos en la democracia interna, en el derecho de tendencias y en la movilidad social para cambiar las cosas y mantener al propio partido en el campo de la izquierda. Las alternativas a la izquierda del PT no logran salir de la cultura y de la práctica grupuscular; son muy sectarios y de horizontes estrechos. No llegan a dialogar con la población, no logran constituirse en puntos de referencia para cambios factibles, ni a escala local, ni a escala regional, ni a escala nacional. Hay una conciencia clara en los movimientos sociales de que somos la segunda fuerza parlamentaria en el Congreso Nacional, el partido más simpático, el partido en el que la gente más confía en todo el país, y eso nos mantiene a todos a la izquierda, dentro del partido, peleando por un partido socialista que no ha abdicado de su historia. Con la comprensión de que es mejor esto que un pequeño grupito, acaso dotado de mayor densidad programática, pero incapaz de modificar las cosas.

Raúl Pont es miembro del Consejo Editorial de SinPermiso, diputado en Rio Grande do Sul y dirigente nacional del PT. Carlos Abel Suárez es miembro del Comité de Redacción de SinPermiso.