Un grupo de 25 civiles armados, comandados por un teniente desertor, atacó en la madrugada de este domingo el fuerte Paramacay en la localidad de Naguanagua del centroccidental estado de Carabobo. Los atacantes no pasaron de las garitas de seguridad del cuartel y el acto terrorista fue prontamente controlado. En realidad se trató solamente de […]
Un grupo de 25 civiles armados, comandados por un teniente desertor, atacó en la madrugada de este domingo el fuerte Paramacay en la localidad de Naguanagua del centroccidental estado de Carabobo. Los atacantes no pasaron de las garitas de seguridad del cuartel y el acto terrorista fue prontamente controlado.
En realidad se trató solamente de un acto de propaganda para crear el imaginario de que se trataba de una rebelión militar, tal como trataron de instalarlo los medios hegemónicos en el exterior. En Venezuela, la calma es total.
El presidente Nicolás Maduro afirmó que el acto terrorista fue perpetrado por civiles pagados desde Colombia y Miami. «El teniente desertor ya está capturado y esta colaborando activamente con la información. También tenemos los testimonio de los siete civiles. Fueron traídos del Zulia, Yaracuy y Caracas, no es personal militar, les pagaron para traerlos a esta aventura desde Colombia y Miami, siendo un acto de desesperación», agregó.
Maduro también informó que un teniente desertor desde el año 2014, participó en el ataque y se autonombró jefe del mismo. «Ha vivido en Miami bajo la protección de Patricia Poleo y Rafael Poleo, ha vivido entre Miami, Costa Rica, Panamá y Colombia. Está siendo activamente buscado».
«El peligro de la democracia venezolan no parece estar en el interior del país, sino en el exterior. La campaña que han emprendido desde hace meses, reforzada ahora contra la Asamblea Nacional Constituyente, que ha llegado hasta el Vaticano y que no tiene comparación con ninguna parte otra agresión a ningún país, con su epicentro en Washington, se expande a casi toda América Latina y la Unión Europea. Pareciera que no cesarán en su empeño de desestabilizar el gobierno del presidente Maduro», señalaba en su editorial el direcrtor de Ültimas Noticias, Eleazar Díaz Rangel.
Y se refería a la reciente declaración del secretario de Estado estadounidense Rex Tillerson, quien en rueda de prensa dijo que las diversas agencias de inteligencia de Estados Unidos «están estudiando las formas de obligar al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, a abandonar el poder». Más claro, ni el agua, señala. Lo que confirmó en el mediodía del domingo el senador estadounidense Marco Rubio, respaldando la acción terrorista.
Fuentes no oficiales reportaron 10 detenidos (dos de ellos heridos), dos atacantes muertos y un teniente del ejército herido de gravedad. El oficial desertor de la Guardia Nacional es el excapitán Guaicaipuriano Scott, que actualmente residía en Estados Unidos, en complicidad con un Teniente de la Compañía de comando y cerca de 25 efectivos.
Desde el comienzo quedó claro que no se trataba de ninguna insurgencia militar, sino de una operación de propaganda que incluyó un ataque de civiles disfrazados de militares y un video de un oficial retirado, dado de baja por medidas disciplinarias hace tres años, grabado en el exterior.
Diosdado Cabello, dirigente del partido Solcialista Unidos de Venezuela y miembro de la Asamblea nacional Constituyente, fue informando de la situación a través de sucesivos tuits, entre los cuales informó que » El primer estadounidense que apoyó el show mediático montado por este grupúsculo terrorista, fue del Senador Republicano Marco Rubio, quien señaló en su cuenta Twitter lo siguiente:
Ay la oposición
En un comunicado divulgado a través de su cuenta en twitter, la Mesa de Unidad Democrática (MUD) «demanda a Nicolás Maduro informar detalladamente y rendir explicaciones ante el país a raíz del episodio ocurrido (…) en la instalación militar del Fuerte Paramacay, estado Carabobo». Raro que demanden a alguien a quien no reconocen…. sobre un hecho que ni siquiera califican.
En el texto, la coalición opositora expresa: «Sabemos que tanto él como su gobierno nunca dicen la verdad, pero es nuestro deber (…) insistir en la exigencia de una explicación apegada a los hechos, y ajena a las manipulaciones y cálculos oscuros que caracterizan al régimen». Luego insiste en que «el empeño de Nicolás Maduro y el pequeño grupo que lo acompaña de ejercer dictatorialmente el poder, refleja la división y el quiebre institucional que también ocurre dentro de la Fuerza Armada Nacional».
Comunicado de la FANB
La Fuerza Armada Nacional Bolivariana, informó en la madrugada del domingo 6 se produjo un ataque terrorista de tipo paramilitar en contra de la 41 brigada blindada del ejército, en Valencia, Estado Carabobo. La acción fue ejecutada por un grupo de delincuentes civiles portando prendas militares y un primer teniente en situación de deserción.
Añadió que los mismos fueron repelidos en forma inmediata por el personal adscrito a la precitada unidad superior, practicándose varias detenciones, incluyendo la del referido oficial subalterno. Parte del grupo logró sustraer algunas armas y están bajo intensa búsqueda por parte de organismos de seguridad del estado.
Señaló que la operación terrorista incluyó la difusión de un video grabado por un oficial subalterno que hace tres años fue separado de la institución por traición a la patria y rebelión, el cual huyó del país y recibió protección en Miami, Estados Unidos. Los sujetos capturados han confesado haber sido contratados en los estados Zulia, Lara y Yaracuy, por activistas de la extrema derecha venezolana en conexión con gobiernos extranjeros.
La FANB recordó, asimismo, que la sola elección de la Asamblea Constituyente permitió que volviera la armonía y paz a la sociedad venezolana luego de un período de violencia focalizada, por orquestación de factores internos y externos que buscan una intervención extranjera en venezuela. Y finaliza: «El ataque terrorista de hoy no es más que un show propagandístico, una entelequia, un paso desesperado que forma parte de los planes desestabilizadores y la conjura continuada que se viene gestando, para intentar evitar que se consolide el renacimiento de nuestra República»
Un grupo de 25 civiles armados, comandados por un teniente desertor, atacó en la madrugada de este domingo el fuerte Paramacay en la localidad de Naguanagua del centroccidental estado de Carabobo. Los atacantes no pasaron de las garitas de seguridad del cuartel y el acto terrorista fue prontamente controlado.
En realidad se trató solamente de un acto de propaganda para crear el imaginario de que se trataba de una rebelión militar, tal como trataron de instalarlo los medios hegemónicos en el exterior. En Venezuela, la calma es total.
El presidente Nicolás Maduro afirmó que el acto terrorista fue perpetrado por civiles pagados desde Colombia y Miami. «El teniente desertor ya está capturado y esta colaborando activamente con la información. También tenemos los testimonio de los siete civiles. Fueron traídos del Zulia, Yaracuy y Caracas, no es personal militar, les pagaron para traerlos a esta aventura desde Colombia y Miami, siendo un acto de desesperación», agregó.
Maduro también informó que un teniente desertor desde el año 2014, participó en el ataque y se autonombró jefe del mismo. «Ha vivido en Miami bajo la protección de Patricia Poleo y Rafael Poleo, ha vivido entre Miami, Costa Rica, Panamá y Colombia. Está siendo activamente buscado».
«El peligro de la democracia venezolan no parece estar en el interior del país, sino en el exterior. La campaña que han emprendido desde hace meses, reforzada ahora contra la Asamblea Nacional Constituyente, que ha llegado hasta el Vaticano y que no tiene comparación con ninguna parte otra agresión a ningún país, con su epicentro en Washington, se expande a casi toda América Latina y la Unión Europea. Pareciera que no cesarán en su empeño de desestabilizar el gobierno del presidente Maduro», señalaba en su editorial el direcrtor de Ültimas Noticias, Eleazar Díaz Rangel.
Y se refería a la reciente declaración del secretario de Estado estadounidense Rex Tillerson, quien en rueda de prensa dijo que las diversas agencias de inteligencia de Estados Unidos «están estudiando las formas de obligar al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, a abandonar el poder». Más claro, ni el agua, señala. Lo que confirmó en el mediodía del domingo el senador estadounidense Marco Rubio, respaldando la acción terrorista.
Fuentes no oficiales reportaron 10 detenidos (dos de ellos heridos), dos atacantes muertos y un teniente del ejército herido de gravedad. El oficial desertor de la Guardia Nacional es el excapitán Guaicaipuriano Scott, que actualmente residía en Estados Unidos, en complicidad con un Teniente de la Compañía de comando y cerca de 25 efectivos.
Desde el comienzo quedó claro que no se trataba de ninguna insurgencia militar, sino de una operación de propaganda que incluyó un ataque de civiles disfrazados de militares y un video de un oficial retirado, dado de baja por medidas disciplinarias hace tres años, grabado en el exterior.
Los tuits de Diosdado Cabello
Diosdado Cabello, dirigente del partido Socialista Unidos de Venezuela y miembro de la Asamblea nacional Constituyente, fue informando de la situación a través de sucesivos tuits, entre los cuales informó que » El primer estadounidense que apoyó el show mediático montado por este grupúsculo terrorista, fue del Senador Republicano Marco Rubio, quien señaló en su cuenta Twitter lo siguiente:
Ay la oposición
En un comunicado divulgado a través de su cuenta en twitter, la Mesa de Unidad Democrática (MUD) «demanda a Nicolás Maduro informar detalladamente y rendir explicaciones ante el país a raíz del episodio ocurrido (…) en la instalación militar del Fuerte Paramacay, estado Carabobo». Raro que demanden a alguien a quien no reconocen…. sobre un hecho que ni siquiera califican.
En el texto, la coalición opositora expresa: «Sabemos que tanto él como su gobierno nunca dicen la verdad, pero es nuestro deber (…) insistir en la exigencia de una explicación apegada a los hechos, y ajena a las manipulaciones y cálculos oscuros que caracterizan al régimen». Luego insiste en que «el empeño de Nicolás Maduro y el pequeño grupo que lo acompaña de ejercer dictatorialmente el poder, refleja la división y el quiebre institucional que también ocurre dentro de la Fuerza Armada Nacional».
Comunicado de la FANB
La Fuerza Armada Nacional Bolivariana, informó en la madrugada del domingo 6 se produjo un ataque terrorista de tipo paramilitar en contra de la 41 brigada blindada del ejército, en Valencia, Estado Carabobo. La acción fue ejecutada por un grupo de delincuentes civiles portando prendas militares y un primer teniente en situación de deserción.
Añadió que los mismos fueron repelidos en forma inmediata por el personal adscrito a la precitada unidad superior, practicándose varias detenciones, incluyendo la del referido oficial subalterno. Parte del grupo logró sustraer algunas armas y están bajo intensa búsqueda por parte de organismos de seguridad del estado.
Señaló que la operación terrorista incluyó la difusión de un video grabado por un oficial subalterno que hace tres años fue separado de la institución por traición a la patria y rebelión, el cual huyó del país y recibió protección en Miami, Estados Unidos. Los sujetos capturados han confesado haber sido contratados en los estados Zulia, Lara y Yaracuy, por activistas de la extrema derecha venezolana en conexión con gobiernos extranjeros.
La FANB recordó, asimismo, que la sola elección de la Asamblea Constituyente permitió que volviera la armonía y paz a la sociedad venezolana luego de un período de violencia focalizada, por orquestación de factores internos y externos que buscan una intervención extranjera en venezuela. Y finaliza: «El ataque terrorista de hoy no es más que un show propagandístico, una entelequia, un paso desesperado que forma parte de los planes desestabilizadores y la conjura continuada que se viene gestando, para intentar evitar que se consolide el renacimiento de nuestra República».
Nora Korn: Analista del Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico