Un nuevo grupo de ocho miembros de la Organización Mundial de Comercio (OMC) se ha reunido en Ginebra desde principios de este mes para discutir cuestiones relativas a las negociaciones de la Ronda de Doha. Estaría integrado por el antiguo Grupo de los Seis (Estados Unidos, la Unión Europea, Brasil, India, Japón y Australia) más […]
Un nuevo grupo de ocho miembros de la Organización Mundial de Comercio (OMC) se ha reunido en Ginebra desde principios de este mes para discutir cuestiones relativas a las negociaciones de la Ronda de Doha. Estaría integrado por el antiguo Grupo de los Seis (Estados Unidos, la Unión Europea, Brasil, India, Japón y Australia) más Argentina y Canadá.
Según fuentes diplomáticas, el grupo tuvo una reunión el 6 de setiembre en la Misión de Estados Unidos, y se siguió reuniendo regularmente en los días subsiguientes. Diplomáticos de estos ocho países restaron importancia al significado político del grupo y aseguran que las reuniones apuntaron a discutir algunas cuestiones técnicas como contribución a que las conversaciones transcurran más fluidamente. Pero delegaciones de otros países están preocupadas por la falta de información y transparencia en torno al motivo por el cual se reunieron estos ocho miembros de la OMC, así como de sus objetivos y el papel que jugarán.
«Es difícil decir que se trata de un grupo más representativo que el antiguo Grupo de los Seis, ya que no hay países africanos o países en desarrollo pequeños en él, y los países desarrollados tienen una representación muy desproporcionada», comentó un experimentado diplomático de un país en desarrollo pequeño.
Además, en julio se acordó que se retomarían las conversaciones del proceso multilateral de una manera abierta, transparente y participativa, luego de los fracasados intentos del Grupo de los Cuatro y del Grupo de los Seis por lograr su propio acuerdo, mientras que la mayoría de los miembros de la OMC esperaba sin tener acceso a información alguna de lo que estaba ocurriendo en esos grupos restringidos. «Espero que esto no sea el comienzo de otro proceso exclusivo y sin transparencia. Eso sería una marcha atrás», sentenció.
Otro diplomático especuló que el nuevo grupo podría convertirse en un espacio en el que se resolvieran algunas de las negociaciones más significativas, restando así energía y diluyendo la importancia del proceso multilateral dentro de la OMC.
Las actuales negociaciones sobre agricultura tienen lugar bajo un formato de «sala verde», conocido como «Sala E» por el nombre de la pequeña sala del edificio de la OMC en Ginebra. Están invitadas unas treinta y cinco delegaciones, con lo cual la mayoría de los países en desarrollo no pueden participar directamente.
Sin embargo, los países miembros no invitados intentan obtener información de los representantes de sus grupos que asisten a la reunión y también procuran introducir sus aportes a las conversaciones de la Sala E a través de la formulación de posiciones comunes de sus grupos.
Todos los miembros están invitados a formar parte de reuniones «informales de participación abierta», en las cuales se comparte información y se pueden hacer declaraciones generales. Pero esas reuniones son menos frecuentes que las de los grupos pequeños, en las cuales tienen lugar las verdaderas negociaciones.
Varios diplomáticos involucrados en las reuniones de Sala E señalaron que hay una atmósfera de negociación en cierta forma «no muy seria», ya que se han discutido cuestiones principalmente técnicas pero no se han abordado temas más significativos. Apuntaron, además, que la reunión del lunes 10 terminó temprano, lo que indica falta de temas de discusión o falta de urgencia para discutirlos, si bien con frecuencia se ha señalado que se acaba el tiempo y las modalidades deben estar concluidas para fines de este mes.
También hay incertidumbre sobre el cronograma de las negociaciones del acceso a los mercados para los productos no agrícolas, que todavía está por comenzar. En julio se acordó que en setiembre se comenzaría con dos semanas de negociaciones sobre agricultura, de manera que quedara claro el panorama en cuanto al grado de avance en este sector y entonces podrían comenzar las conversaciones sobre el primero mencionado.
El presidente de las negociaciones de acceso a los mercados para los productos no agrícolas, el embajador de Canadá Don Stephenson, quien retornó a Ginebra recién el lunes 10, ha celebrado consultas con algunas delegaciones, pero todavía no ha notificado a los miembros de la OMC en cuanto al cronograma de negociaciones.
A más de quince días de que la OMC reanudara su trabajo luego del receso de agosto, hay pocas señales de avance en las negociaciones y cierta incertidumbre en cuanto al cronograma para el resto del mes. Mucho menos claro aún es el panorama de octubre.
Es difícil encontrar a alguien optimista en cuanto a que las modalidades sobre agricultura y acceso a los mercados para los productos no agrícolas puedan finalizar en las próximas tres a cinco semanas, como está previsto. (FIN)
Martin Khor es director de Third World Network