Un Tribunal Federal ordenó la suspensión de la licencia ambiental preliminar hidroeléctrica de Belo Monte. El juez a cargo concedió la orden judicial porque consideró un «peligro de daño irreparable» al proyecto. La decisión es una respuesta a la presentación judicial del Ministerio Público Federal (MPF), que expuso las irregularidades del proyecto. El juez, Antonio […]
Un Tribunal Federal ordenó la suspensión de la licencia ambiental preliminar hidroeléctrica de Belo Monte. El juez a cargo concedió la orden judicial porque consideró un «peligro de daño irreparable» al proyecto.
La decisión es una respuesta a la presentación judicial del Ministerio Público Federal (MPF), que expuso las irregularidades del proyecto.
El juez, Antonio Carlos de Almeida Campelo, se centró en la falta de reglamentación del artículo 176 de la Constitución Federal, que exige una nueva ley para la utilización del potencial hidroeléctrico en tierras indígenas.
Además de cancelar la licencia anterior, el magistrado estuvo de acuerdo con las otras medidas requeridas por el MPF. Como que el Instituto Brasileño de Medio Ambiente (IBAMA) se abstenga de adjudicar una nueva licencia de construcción y que el Banco Nacional de Desarrollo de Brasil (BNDES) sea notificado de la medida junto a distintas empresas.
Estas agencias y las empresas pueden responder a delitos medioambientales si toman cualquier acción en relación con la usina antes de los estudios ordenados por la Justicia.
La próxima semana se debe juzgar otra acción contra la empresa constructora Campelo, que cuestiona una licencia ambiental para la realización de una nueva usina eléctrica.
Fuente original: http://www.agenciapulsar.org/nota.php?id=17060