Una veintena de artistas nacionales e internaciones, de diversos géneros musicales, se dieron cita en La Carlota para alcanzar, al unísono con el público presente, consignas tales como: «Paren las guerras», «No más bases militares imperialistas» e «Integración latinoamericana».
Con el objetivo de integrar más a los pueblos latinoamericanos y sensibilizarlos a favor de la paz, este sábado 31 de octubre, se celebró un concierto gratuito denominado «Canto por el pueblo», en la Base Aérea Generalísimo Francisco de Miranda (La Carlota); iniciativa del Gobierno Bolivariano, a través de sus instituciones.
Esta actividad también es parte de la conmemoración del 67 aniversario del natalicio del luchador del pueblo, poeta y cantautor venezolano, Alí Primera, promotor incansable de la canción necesaria como vehículo de alcance de libertad de ideas.
Música llanera, tambor, salsa, hip hop, rock e interpretaciones de Alí Primera, quien fue el homenajeado; entre otros géneros, fue la muestra artística dispuesta para miles de personas que llenaron los espacios de La Carlota.
Un set de música llanera, inaugurado por Cristina Maica, una apureña que obtuvo en Colombia el título de «Embajadora artística de la integración colombo-venezolano», puso a bailar y zapatear a los asistentes al concierto. A la bella expresión del folklore nacional, se unieron Cristóbal Jiménez y Reina Lucero, que entre coplas y versos acompañados del impecable sonido del arpa, cuatro y maracas, dignificaron el sentir venezolano. Inmediatamente se presentó Vidal Colmenares y La Siembra del Cantor, que con igual vigor que Alí Primera, interpretaron sus canciones.
Luego de la expresión regia del joropo venezolano, le tocó el turno de montarse en tarima a Manuel Guerra y su banda, poniendo rápidamente a bailar, emparejados o sin pareja a miles de personas con su contagiosa interpretación de salsa.
El arraigo integracionista que comienza a tomar auge en Latinoamérica se hizo sentir con la presentación del grupo Madera, que con más de 30 años de carrera musical, subieron a la tarima a dar, como en cada presentación, lo mejor de sí. Realizaron un homenaje a los santos, especialmente a Elegua; también invitaron a los asistentes a «limpiarse el alma para alcanzar la buena vibra».
Y sin tiempo para descansar, el pegajoso ritmo salsero de la Dimensión Latina, volvió a conformar parejas para bailar durante 30 minutos, paseándose por temas conmemorativos a sus 37 años de carrera artística. Con 30 discos, la Dimensión Latina se ha consagrado como una de las agrupaciones salseras de mayor renombre en la música caribeña y el espectáculo.
Al grito repetido de «Calle 13», «Calle 13», el público recibió a René Pérez Joglar, conocido como «Residente» integrante de esta agrupación de hip hop urbano y alternativo de Puerto Rico, quien se paseo por el amplio repertorio cargado de letras protestas con críticas al sistema imperialista de EEUU.
Para cerrar el show, nada mejor que dos expresiones de la integración latinoamericana hicieron extender las energías de los asistentes a la cita, Orishas por Cuba y Molotov por México, expresaron a través de sus letras que la unión entre los pueblos libres de América es hoy, más que nunca, una realidad.
Al respecto, los integrantes de Molotov, expresaron en rueda de prensa que este tipo de eventos debe repetirse en los países latinoamericanos con la finalidad de incrementar el sentir de nuestras culturas, y dignificarlas sobre el daño que produce el consumismo de masas. Al mismo tiempo, agradecieron la fidelidad del público venezolano por la cálida recibida.
Los mexicanos aprovecharon la oportunidad de halagar a la belleza de la mujer venezolana, reconocer el esfuerzo que encamina el Presidente Chávez a favor de la integración y lucha por la paz mundial y prometer nuevas visitas al territorio nacional.