El gobierno venezolano acaba de conformar un potencial arsenal para combatir la violencia que azota al país: lejos de reprimir, sancionar o prohibir, acude a más prevención, educación, cultura, deporte y trabajo comunal. Esas son las armas que engrosan hoy la batalla contra la inseguridad, tema que lidera las preocupaciones de los venezolanos, de acuerdo […]
El gobierno venezolano acaba de conformar un potencial arsenal para combatir la violencia que azota al país: lejos de reprimir, sancionar o prohibir, acude a más prevención, educación, cultura, deporte y trabajo comunal.
Esas son las armas que engrosan hoy la batalla contra la inseguridad, tema que lidera las preocupaciones de los venezolanos, de acuerdo con la mayoría de las encuestas.
El asunto tomó mayor relevancia cuando ayer el presidente Hugo Chávez presentó la Gran Misión A Toda Vida Venezuela, un programa bien estructurado que involucra a instituciones y ciudadanos en el enfrentamiento planificado, contundente y progresivo de la delincuencia y la violencia.
Seis líneas temáticas apuntan a disminuir paulatinamente esos flagelos, hijos pródigos de la implementación de políticas neoliberales en las décadas del 80 y 90, que sembraron exclusión, pobreza, consumismo y fracturas estructurales, según han reiterado las autoridades.
Esos vértices están vinculados con la prevención integral y la convivencia solidaria, el fortalecimiento de los órganos de seguridad ciudadana y del sistema judicial y penal, junto a la creación de mecanismos alternativos de solución de conflictos.
Igualmente van dirigidos a la modernización del sistema penitenciario, la atención integral a víctimas de la violencia y la creación y socialización del conocimiento para la convivencia y la seguridad.
El programa se calza con un grupo de medidas para hacerlo viable, entre ellas, la aprobación de un plan de trabajo para el control de armas y municiones y el desarme, así como la inutilización de las armas de fuego depositadas en las salas de evidencia.
Además, se dotó a la Compañía Anónima Venezolana de Industrias Militares de un sistema que permite el marcaje individualizado de municiones para identificar su posesión.
Asimismo, fue validado el programa de formación de ambientes para la Misión Ribas Joven, dirigido a estimular la inclusión de los jóvenes venezolanos en los ámbitos deportivos, socioproductivos y musicales.
En el área deportiva, por ejemplo, es propósito del gobierno restaurar 790 espacios para ejercitar a más de 79 mil niños y jóvenes en distintas disciplinas.
El Jefe de Estado aprobó también la creación de escuelas juveniles de capacitación audiovisual, en artes gráficas y en música en los 79 municipios donde se registran los mayores índices de criminalidad y densidad poblacional.
Dio luz verde a la fundación de 39 núcleos del Sistema de Orquestas Juveniles e Infantiles en esas zonas, y al fortalecimiento de otros 40 existentes.
A estas medidas se sumó la aprobación del Plan Nacional de Vigilancia y Patrullaje y el despliegue del servicio de la policía comunal.
Para la implementación de estas y otras medidas, el Ejecutivo sancionó un total de cinco mil 915 millones de bolívares (algo más de mil 375 millones de dólares).
El ministro de Relaciones Interiores y Justicia, Tareck El Aissami, aseguró que el programa constituye un salto cualitativo que salda una deuda histórica, un tema que nunca antes «fue tratado con tanta profundidad como lo hace hoy Chávez», sentenció.
El contenido, subrayó, nos diferencia de las propuestas reaccionarias, que son represivas; la misión es profundamente humanista e identifica y trabaja sobre factores estructurales promotores de delitos.
A juicio del mandatario este es un programa integral que no garantiza la solución del problema, pero que tendrá un impacto directo en la disminución de los índices de criminalidad y violencia en la sociedad venezolana.
La Gran Misión perfila hoy como un paso sólido y estructurado que, como sentenció Chávez, exige «lograr la mayor suma de voluntades para alcanzar el éxito», incluidas las de los sectores opositores que enarbolan el tema de la inseguridad para atacar al gobierno, pero sin aportar otras soluciones.
Fuente: http://www.prensa-latina.cu/index.php?option=com_content&task=view&id=518939&Itemid=1