Nicolás Maduro y Mohamed Irfan Ali han alcanzado un acuerdo en el que manifiestan que no utilizarán la fuerza en ninguna circunstancia
- ¿Cual es la historia de Esequibo?
- Venezuela reconoce el nuevo país reservándose expresamente sus derechos de soberanía sobre la Guayana Esequiba, al oeste de río Esequibo.
- Importantes reservas petroleras en la zona descubiertas en 2015
- Latinoamérica epicentro de una “nueva” geopolítica petrolera
En las conversaciones celebradas en la isla de San Vicente y Granadinas el 14 de Diciembre, han participado además de ambos líderes, el primer ministro sanvicentino y presidente de Celac, Ralph Gonsalves, y el jefe de Gobierno de Dominica y actual presidente de Caricom, Roosevelt Skerrit. Entre los puntos más destacados del acuerdo cabe resaltar los siguientes:
- Cualquier controversia entre los dos Estados se resolverá de conformidad con el derecho internacional, incluido el Acuerdo de Ginebra del 17 de febrero de 1966.
- El compromiso con la búsqueda de la buena vecindad, la convivencia pacífica y la unidad de América Latina y el Caribe.
- Tomaron nota de la afirmación de Guyana de que está comprometida con el proceso y los procedimientos de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) para la resolución de la controversia fronteriza. Tomaron nota de la afirmación de Venezuela de su falta de consentimiento y falta de reconocimiento de la CIJ y su jurisdicción en la controversia fronteriza.
- Ambos Estados se abstendrán, ya sea de palabra o de hecho, de intensificar cualquier conflicto o desacuerdo derivado de cualquier controversia entre ellos.
- Establecer inmediatamente una comisión conjunta de los Ministros de Relaciones Exteriores y técnicos de los dos Estados para tratar los asuntos mutuamente acordados.
Ambos Estados acordaron reunirse de nuevo en Brasil, en los próximos tres meses, o en otro momento acordado, para considerar cualquier asunto con implicaciones para el territorio en disputa, incluida la mencionada actualización de la comisión mixta.
La importancia de hallar una solución justa y pacífica a la controversia territorial sobre la Guyana Esequiba y consolidar un área de amistad y cooperación sin la presencia de potencias hegemónicas, también explica la asistencia a Kingstown de los primeros ministros de Granada, Dickon Mitchell; Santa Lucía, Philip Joseph Pierre; Barbados, Mia Amor Mottley; Bahamas, Philip Edward Davis, y Trinidad y Tobago, Keith Rowley. A la relación de observadores se unieron representantes de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y los cancilleres de Brasil, Mauro Vieira, y Colombia, Álvaro Leyva.
Como dejó claro el Gobierno venezolano, y ratificaron Gonsalves y Skerrit, la reunión se concibió para hallar una solución dialogada, equitativa para las partes, con beneficios prácticos y apegada al Acuerdo de Ginebra (1966) y la legalidad internacional, además de ser afín al principio de América Latina y el Caribe como zona de paz.
Las conversaciones en directo entre Venezuela y Guyana tienen lugar días después del respaldo del pueblo venezolano al referendo consultivo sobre el Esequibo.
¿Cuál es la historia de Esequibo?
La Guayana Esequiba, también conocida como territorio del Esequibo, es una región comprendida entre el oeste del río Esequibo hasta el hito en la cima del monte Roraima. El nombre del río Esequibo se deriva del apellido de Juan de Esquivel, lugarteniente de Diego Colón durante el tercer viaje a América en 1498
Tiene una extensión de 159 542 km² que la República Cooperativa de Guyana administra como propio, pero cuya soberanía es reclamada por la República Bolivariana de Venezuela basándose en el Acuerdo de Ginebra de 17 de febrero de 1966.
Venezuela reclama el territorio y en sus mapas, el área suele aparecer rayada oblicuamente o con la leyenda «zona en reclamación». El conflicto proviene de los enfrentamientos entre el Imperio Español y los ingleses, holandeses y suecos. Tanto Venezuela como Guyana lo consideran territorio propio. Durante los siglos XIX y XX han sido constantes los desencuentros diplomáticos si bien prácticamente nunca ha habido enfrentamientos armados.
Venezuela incluye el territorio dentro de sus dominios desde su primera constitución de 1811, cuya última reforma fue dada en 1999, declarando en el artículo 10 que: «El territorio y demás espacios geográficos de la República son los que correspondían a la Capitanía General de Venezuela antes de la transformación política iniciada el 19 de abril de 1810, con las modificaciones resultantes de los tratados y laudos arbitrales no viciados de nulidad»
Tras haberse apelado al gobierno de Estados Unidos, este propuso un arbitraje entre las partes en conflicto. En 1899 se conformó en París un tribunal cuya decisión formal se conoce como el Laudo Arbitral de París. El fallo concluyó con la cesión del territorio al oeste del río Esequibo a Reino Unido.
Sin embargo, siendo que Venezuela no estuvo representada directamente, ya que los dos representantes de Venezuela fueron nombrados por los Estados Unidos, no representando al Estado venezolano, este declaró la nulidad de la sentencia, actitud que mantuvo décadas después, alegando además importantes vicios que invalidan la decisión arbitral.
El 12 de noviembre de 1962, el ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela, Marcos Falcón Briceño, hizo una exposición en la Comisión de Política Especial de la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU), para denunciar el Laudo Arbitral alegando componenda y vicios de nulidad justificativos de un despojo. La reclamación de Venezuela por tanto es muy anterior a la llegada del chavismo y se remonta al siglo XIX.
Posteriormente, Venezuela y el Reino Unido, con la presencia del gobierno colonial local de la Guayana Británica (próxima a obtener la independencia), firmaron el Acuerdo de Ginebra del 17 de febrero de 1966, donde se estipuló crear una comisión mixta para buscar un mecanismo para dar por terminado el conflicto. El 26 de mayo de ese mismo año, la Guayana Británica obtiene la independencia, llamándose a partir de entonces República Cooperativa de Guyana. Desde ese momento el Reino Unido traspasa al nuevo país la cuestión de la disputa territorial sobre la Guayana Esequiba, igualmente sujeto al Acuerdo de Ginebra.
Venezuela reconoce el nuevo país reservándose expresamente sus derechos de soberanía sobre la Guayana Esequiba, al oeste de río Esequibo
Luego de pasados cuatro años de la firma del acuerdo sin llegar a resultado alguno, se decide firmar en la capital de Trinidad y Tobago el Protocolo de Puerto España del 18 de junio de 1970, con el fin de suspender las discusiones por doce años, vencidos en 1982.
En ese momento Venezuela decide no renovar este tratado y continuar con el Acuerdo de Ginebra a través del secretario general de las Naciones Unidas. Desde entonces, la reclamación está sometida a intermediación de la Secretaría General de las Naciones Unidas bajo las condiciones del Acuerdo de Ginebra.
Importantes reservas petroleras en la zona descubiertas en 2015
La corporación petrolera Exxon Mobil, obtuvo en 2022 cerca de 414 mil millones de dólares, ingresos inéditos en su historia, que representan 44.8 % más que el año precedente y un incremento gigantesco si se compara con su crisis de 2020, cuando sus pérdidas llegaron a poner en jaque su valor bursátil.
De la mano de esa corporación estadunidense, Guyana podría convertirse en el país que produce más barriles de petróleo por habitante en el mundo, superando a Kuwait, en ese caso, al medir la riqueza per cápita de sus 800 mil habitantes, pasaría a ser un país rico, pues en 2021 su PIB se incrementó en 57.8% y en 2022 en 37.2 %.
No obstante, en ambos casos, la bonanza proviene principalmente de la explotación petrolera y gasifera que esa corporación y país han activado en la región Esequiba en controversia e incluso en aguas venezolanas.
Guyana ha concedido “licencias” de explotación a empresas como Chevron, Repsol,Tullow y la mencionada Exxon. Apenas el 25% de los beneficios se quedan en el país y se evidencia una irrisoria redistribución de ese ingreso, al punto que en 2019 su índice de desarrollo humano fue el más bajo de Sudamérica.
Por su parte, Venezuela aduce que este no es solo un asunto de soberanía nacional y energética sino una problemática que atañe a la geopolítica regional, toda vez que involucra de modo directo la pretensión de hacer prevalecer los intereses corporativos frente a la certificación histórica de un Estado. Según el presidente venezolano, Nicolas Maduro, “…más que Guyana, son la Exxon Mobil y el Comando Sur que pretenden tomarse el mar que le pertenece a Venezuela”, de ahí su llamado al dialogo al vecino país.
La Exxon Mobil, corporación emblemática de Estados Unidos, con los ojos puestos en unas reservas de unos 11.000 millones de barriles de petróleo, abundante gas y ecosistemas con alta proyección para la producción de energías limpias, ha asumido como suya la estrategia de judicialización que ha emprendido Guyana, entre las evidencias figura el pago de unos 15 millones de dólares para la defensa jurídica de Guyana.
Latinoamérica epicentro de una “nueva” geopolítica petrolera
Proyecciones empresariales especializadas hablan de una nueva geopolítica petrolera para 2028, en cuya cúspide figuran: Brasil (Presal), Guyana (Esequibo) y Argentina (Vaca Muerta) en ese orden, a la vez que vaticinan un relegamiento de México, Venezuela, Ecuador y Colombia, aduciendo la disminución de su producción, como también la gestión a través de empresas públicas comprometidas con la economía nacional y no con una transnacionalización apátrida en beneficio de las corporaciones. En todos los casos, el epicentro de esa prospectiva petrolera es latinoamerica y el Caribe.
Desde hace 140 años, la ahora llamada Exxon Mobil, se construye a través de un proceso de fusiones monopólicas, en cuyo caminar figura la Standard Oil Company (1870) creada por Rockefeller y asociados. La historia de esta corporación está estrechamente relacionada con la de su país sede, más aún, surge como una pieza del poder estadounidense. Steve Coll, autor de Private Empire: Exxon Mobil and the American Power (2013) enfatiza en que estas son dos piezas indivisibles de un todo: «Es un Estado empresarial dentro del Estado americano que tiene sus propias reglas de política exterior» y un proyecto de controlar los recursos energéticos a escala mundial.
Esa asociación es perceptible en distintos episodios estratégicos tales como las incursiones militares cometidas por Estados Unidos, en Iraq por ejemplo y de manera más amplia en Oriente medio. La ExxonMobil resultó ser el máximo proveedor del Pentágono (1999 – 2005).
También, en las proyecciones energéticas que el país norteamericano exhibe, esta corporación aparece incluso entre las más importantes para el manejo en curso y futuro de energías limpias, aún si su campo de especialidad es la explotación de combustibles fósiles. No obstante, aún en el contexto de las transiciones energéticas planteadas, se estima que la demanda de crudo tiene significativas proyecciones económicas futuras. La AIE estima que hacia 2028 la producción petrolera global se incrementará en unos 5.8 millones de barriles diarios y que una cuarta parte de la oferta será latinoamericana.
En resumen al existir poderosos intereses económicos consecuencia de la riqueza petrolífera y gasística del Esequibo, la presencia de los principales países afectados y especialmente Estados Unidos, hace suponer un largo recorrido a este conflicto ya más que centenario. Es de esperar que la diplomacia y el diálogo hagan su papel.