Traducido del inglés para Rebelión por J. M.
Orwell lo vio venir…
Es desconcertante presenciar la velocidad y la ferocidad con la que Gran Bretaña se está deteriorando hasta convertirse en una pesadilla orwelliana.
The Evening Standard informó ayer de que «un trabajador del concejo londinense fue suspendido luego de haber sido atrapado alegando que los sionistas ‘colaboraron’ con los nazis».
Aparentemente Stan Keable fue removido de sus obligaciones como funcionario de aplicación ambiental para el Consejo de Hammersmith & Fulham después de decir: «Los nazis eran antisemitas. El problema que tengo es que el gobierno sionista de la época colaboró con ellos. Aceptaron las ideas de que los judíos no son aceptables aquí».
Keable hizo los comentarios, compartidos en un clip en Twitter, en una manifestación pro-Corbyn fuera del Parlamento. Supongo que en Gran Bretaña 2018 puedes perder tu trabajo simplemente por expresar una opinión.
Parece que algunos judíos británicos están perturbados por partes de su historia. Intentan suprimir cualquier discurso sobre el Acuerdo Haavará. El exalcalde de Londres Ken Livingstone fue suspendido del Partido Laborista por mencionar esa colaboración entre Hitler y el sionismo. E inquietantemente, en la discusión del Partido Laborista sobre el caso de Livingstone, el secretario general del partido, Iain McNicol, «dejó en claro en una carta al exalcalde que el caso en su contra no se trataba de hechos históricos, sino de si su conducta era gravemente perjudicial «para el partido…» *
El Acuerdo de Transferencia (Haavara) entre el régimen nazi y la dirección sionista palestina es un hecho histórico aceptado. En su excelente libro Solución final, el historiador judío británico David Cesarani examina el acuerdo y cita las voces sionistas alemanas que aprobaron el régimen nazi e incluso dieron la bienvenida a las Leyes raciales de Núremberg porque presionaron por la segregación. Pero la verdad probatoria no es una defensa en Gran Bretaña en 2018. Creo que este desprecio por la verdad es solo otro síntoma de nuestra eliminación del ethos ateniense.
El diputado conservador por Chelsea & Fulham, Greg Hands, dijo: «Estoy sorprendido de que alguien que expresa opiniones de odio pueda tener un trabajo de reunirse con inquilinos en situación de vulnerabilidad. El líder del consejo debería iniciar una investigación sobre si hay otros de su clase en el consejo».
No puedo ver una gota de odio en el comentario de Keable. Pero me gustaría aconsejar al diputado conservador y otros tories ignorantes que, mientras que el Acuerdo de Haavara se firmó como un intento de salvar a los judíos alemanes, el Gobierno conservador aquí en Gran Bretaña hizo poco por los judíos alemanes y otros refugiados judíos.
Mike Katz, del Jewish Labor Movement, dijo: «Tratar de torcer la historia de los nazis para que encaje en una narrativa antisionista es ofensivo». Puede ser ofensivo, pero el Acuerdo de Haavara y la colaboración entre organizaciones sionistas y funcionarios nazis de 1933 hasta el final de la guerra son parte de la historia judía y el terrorismo político no borrará esa historia.
Cuando el Stándard lo contactó, Keable dijo: «Lo siento por cualquier ofensa que pueda haber causado. Pero el régimen nazi y la Federación Sionista de Alemania colaboraron, a través del acuerdo de Haavara, en la emigración de unos 60.000 judíos a Palestina entre 1933 y 1939». Dijo que no insinuó que los judíos colaboraban con los nazis.
Si quieren quemarlo, ¡quieres leerlo!
Fuente: http://www.gilad.co.uk/writings/2018/5/3/living-in-an-orwellian-dystopia
Esta traducción se puede reproducir libremente a condición de respetar su integridad y mencionar al autor, a la traductora y Rebelión como fuente dela traducción.