Cuando observamos los registros y la historia de dos instituciones mundiales, ligadas al mundo de las finanzas: el Fondo Monetario internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM), resulta a todas luces evidente que las mencionadas instituciones internacionales han sido pioneras y activistas principales en la consolidación de lo que se denomina neoliberalismo.
Esto no es coincidencia, existen razones y hechos armónicos para llegar a esta conclusión respecto a la filosofía económica llamada neoliberalismo (1). El estudio histórico de la economía política muestra que el Banco Mundial y el FMI se encuentran al acecho de los países. Y en con esa conducta rapaz, en su momento, cuando un país o región está en crisis se presentan estas instituciones como una especie de salvador, proporcionando “facilidades” financieras para resolver los trances económicos de estos países. Las políticas neoliberales obligan a los Estados a arruinar aún más sus frágiles economías bajo las directrices de estos fondos que actúan como verdaderos corsarios. Términos como ajuste fiscal, disminución del papel del Estado, privatización del sector sanitario, educativo y de pensiones son parte de las exigencias si los países recurrentes de apoyo financiero desean acceder a esos fondos ofrecidos.
Es suficiente con hojear un poco la historia para encontrar, que las víctimas de este proceso son, mayoritariamente, países en desarrollo, de Asia, África y América Latina pero… paradojalmente, en los últimos años, esos recortes y exigencias de organismo como el FMI también han afectado a países más desarrollados como Grecia, Portugal y gran parte de esa Europa oriental, que anhela sumarse a la llamada Unión Europea. Cada uno de ellos ha sido violentado en sus políticas de bienestar social, generando enormes brechas en su población, en los más diversos ámbitos.
Un ejemplo reciente del chantaje financiero y exigencias desmesuradas contra nuestros países lo está viviendo Argentina, que tras el fracaso de la administración del derechista y ultraliberal económico Mauricio Macri, se encuentra hipotecado, sobre todo porque en el último año de gobierno, Macri solicitó un empréstito de 70.000 millones de dólares al FMI, cuyos fondos no sirvieron para desarrollar absolutamente nada en el país, volatizándose y en otros casos sirviendo para pagar favores políticos, corrupción y enriqueciendo aún más a los grupos económicos nacionales y externos. ha dejado a la argentina hipotecada. Su endeudamiento es tan grande que se ha tenido que entregar a las políticas dictadas por este Fondo, tejiendo un cinturón de estrechez contra la sociedad argentina, constreñida a renegociar, siempre en pésimas condiciones. Argentina, no sólo es una víctima de la nefasta escuela del neoliberalismo, sino también una de las víctimas más arrepentida del FMI.
Ningún otro país se ligó tanto a las políticas del FMI y ningún país ha sido testigo de tanta devastación de su economía de la mano de estas políticas neoliberales como lo ha sido Argentina. Por ello aprender de Argentina es fundamental, ya que hoy, el peligro contra los países no sólo se presenta por el lado financiero y esta realidad de organismos usureros e instituciones destinadas a estrangular económicamente al mundo para luego expoliarlos sino cumples sus exigencias leoninas. Hoy, a la par de este verdadero Virus que es el neoliberalismo aparece el Covid-19 que se convierte en esta crisis pandémica como una nueva oportunidad para que el FMI y el Banco Mundial muestren sus verdaderos rostros.
El 2 de marzo se publicó una infografía en el sitio web del FMI, que mostraba su papel en la lucha contra la crisis del coronavirus en el sentido de proporcionar fondos para la lucha de este flagelo pero… curiosamente, estas partidas no tienen como norte a Venezuela, por ejemplo, mostrando con ello, la verdadera cara del FMI. Un organismo al servicio y el chantaje de Washington, que ejerce su influencia en materia de quien sí y a quien no se le permite el acceso a dinero fresco. El día 4 de marzo se publicó otro reporte. Todo esto muestra que el FMI a los países de pocos ingresos y los nuevos mercados, que actualmente se han visto afectados por el coronavirus, planean otorgarle créditos financieros hasta de 10 mil millones de dólares. Este informe se publicó de inmediato por las agencias de noticias de todo el mundo como una muestra “del lado bueno del FMI” frente a la pandemia, sin ahondar en cómo se hipoteca el futuro de cientos de millones de seres humanos.
Este lunes 23 de marzo, se realizó una videoconferencia por el G20 a través de sus Ministros de Hacienda y gobernadores de bancos centrales. Participaron, además, España, Jordania, Singapur y Suiza y organizaciones internacionales, como la Organización Mundial de la Salud (OMS), así como otras agencias de Naciones Unidas, y el Fondo Monetario Internacional (FMI). Rusia, quien había sido suspendida de este grupo fue igualmente invitada. En la videoconferencia, la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva declaró que “Los costos humanos de la pandemia del coronavirus ya son inmensurables y es preciso que todos los países trabajen en colaboración para proteger a la gente y limitar el daño económico. Este es el momento de actuar con solidaridad, un tema central en la reunión que mantuvieron hoy los ministros de Hacienda y gobernadores de bancos centrales del G-20” (2)
En esta teleconferencia la directora gerente del FMI dio a conocer tres ideas fundamentales: La primera, es que las perspectivas de crecimiento económico mundial son negativas y se espera una recesión tan aguda como la del año 2008 o peor “El impacto económico es y será grave, pero cuanto antes se logre frenar el virus, más rápida y vigorosa será la recuperación” sostuvo la alta funcionaria internacional, agradeciendo las medidas fiscales extraordinarias que se han tomado y que se requerirán. En segundo lugar la señora Georgieva señala que las economías avanzadas se encuentran en mejor pie para afrontar la crisis. Pero, agregó, los países de “mercados emergentes y bajos ingresos” se verán afectados, ya sea por la creciente fuga de capitales (90.000 millones de dólares al día de hoy), la baja actividad económica interna y sobre todo, dice el FMI “Nos preocupa especialmente la situación de los países de bajo ingreso agobiados por la deuda, una cuestión sobre la que estamos trabajando en estrecha colaboración con el Banco Mundial” ¿qué significa ello? Indudablemente no será una moratoria, sino que aprovechando la crisis se exigirá privatizar los pocos servicios públicos que van quedando y se otorgarán créditos leoninos.
En tercer lugar, se pregunta el FMI ¿qué podemos hacer para proporcionar respaldo a nuestros países miembros? Y ante esa pregunta plantean alternativas tales como: incrementar masivamente el financiamiento de emergencia (se han recibido solicitudes de 80 países) y coordinar este apoyo con otros organismos como es el Banco Mundial. Hablan de reposición del llamado Fondo Fiduciario para alivio y contención de catástrofes. Según la directora general del FMI están en condiciones de desplegar la totalidad de su capacidad prestable 8us$1 billón de dólares) “Estamos preparados para desplegar la totalidad de nuestra capacidad prestable, de USD 1 billón” sostuvo alborozada la directora gerente del FMI.
Lo que esperan los países en desarrollo, es que el salvavidas lanzado por el FMI no sea de plomo y que no sea un instrumento que ayude a hundir más a nuestros países. Se espera, igualmente, que no se discrimine como se está haciendo con Venezuela y la República Islámica de Irán, gracias a las presiones y chantajes de la administración Trump (3). Efectivamente, el FMI rechazó hace unos días, el conceder un crédito de 5.000 millones al gobierno de la nación sudamericana, para ayudar a contener el coronavirus, argumentando que “no hay claridad” sobre el reconocimiento a su gobierno. Mostrando con ello la clara dirección del poder tras las sombras. Un discurso de solidaridad hipócrita cuando se compara con la cruda realidad, como lo sostuvo la cancillería rusa a través de su portavoz María Zajárova “La población de Venezuela solicitó ayuda cuando obviamente la necesitaba al igual que muchos otros países (…esta decisión) es una hipocresía tan típica”
La experiencia histórica de los países afectados por las políticas del FMI nos conduce a la conclusión (en base a la experiencia empírica) que el número de víctimas del neoliberalismo será cientos de veces mayor que el de las víctimas del Covid-19. Aunque los países de América Latina –al igual que los demás países del mundo– se han visto contagiados por este virus, tengamos presente, que con autocuidado, respeto, empatía, cuidado, solidaridad social y velando por la salud individual y colectiva podemos vencer a este enemigo temible que es el Covid-19. Tomará tiempo pero triunfaremos. Y en ese tránsito, debemos precaver, que bajo la sombra del coronavirus, no nos impongan otros fracasos económicos y políticos en los países latinoamericanos. Para superar esta crisis es suficiente con mirar la historia y obtener experiencia de esta.
Notas:
(1) También denominado nuevo liberalismo o liberalismo tecnocrático, el neoliberalismo es una corriente ligada al mundo político y económico surgido en el siglo XX que apuesta por un mundo desregulado para la sociedad con escasísima intervención del estado y que apuesta, en el plano teórico por lo que llama eufemísticamente “libre mercado” como regulador de las tensiones sociales. Es una idea de consenso establecer que el neoliberalismo, entendido como filosofía económica nace, formalmente, en la década del 30 del siglo XX gracias al trabajo de un grupo académico europeo, que buscaba una vía alternativa entre el liberalismo clásico, (señalado como responsable de la gran debacle económica que vivía el mundo en ese entonces) y las doctrinas de planificación centralizada como las que estaba experimentado la naciente unión Soviética, que signaba la necesidad de suprimir el llamado mercado. En un interesante trabajo explicativo sobre el neoliberalismo. Se afirma que el término neoliberalismo tiene un renacimiento en los años 80 del siglo XX (pues tuvo una caída en su utilización en la década de los sesenta) de la mano de las profundas reformas económicas llevadas a cabo por la dictadura cívico-militar chilena de Augusto Pinochet y los llamados Chicago Boys. Fuente: https://www.caracteristicas.co/neoliberalismo/#ixzz6HitAjmZw.
(3) Irán anunció el pasado 12 de marzo que había solicitado asistencia financiera inmediata al Fondo Monetario Internacional (la primera desde el año 1962) para luchar contra el Covid-19. La directora ejecutiva del Fondo, Kristina Georgieva, El Ministro de Asuntos Exteriores de irán, Mohammad Yavad Zarif escribió en su Twitter que “los países afectados por la pandemia recibirían apoyo a través del llamado Instrumento de Financiación Rápida. Nuestro banco central pidió acceso a ese IFR del FMI, y llamaos al consejo de gobernadores a responder a esta petición de manera responsable». La dificultad principal radica en que los préstamos otorgados por el FMI deben ser aprobados por el consejo de administración de la institución, donde la voluntad de Washington se impone y si consideramos la política de máxima presión ejercida por Trump contra irán, el resultado de esa petición puede resultar fallida.