Roger Molinas es arqueólogo y licenciado en Historia. Militó en ICV y es persona activa en movimientos antirracistas y antifascistas. Se define como federalista. Ha escrito un libro sobre patrimonio cultural (Patrimonici) y es conocido en las redes sociales a través de su blog Reflexions d’un arqueòleg glamurós (https://glamboy69.wordpress.com/.)
[Estación de Móra la Nova (andén en dirección a Barcelona) en 1967 (imagen incluida en Immigració. Les onades immigratòries en la Catalunya contemporània, Barcelona, Fundació Lluís Carulla, 2007)]
Un artículo suyo lleva como título: “Desmontando el mito de los ‘colonos franquistas’”. ¿Quiénes son estos “colonos franquistas”? ¿La denominación sigue vigente?
Es una denominación peyorativa que utiliza un sector del nacionalismo catalán más identitario para referirse a las personas migradas de clase obrera del resto de la península.
¿Cómo surge esta denominación? ¿Quiénes son los creadores de esta noción político-histórica?
Bueno, es difícil saber el momento exacto en que surge. Ya había mitos xenófobos contra los trabajadores murcianos en los años 20 y 30.
¿Por qué habla de mito? ¿Por creencia falsa extendida y creída por algunos sectores ciudadanos?
Porque es absolutamente falso que los movimientos migratorios durante el franquismo estuvieran planeados por el estado franquista (al contrario, trató de impedirlos) con la finalidad de diluir la lengua o la cultura catalana.
Afirma usted que solo una parte del nacionalismo catalán, seguramente minoritaria, lleva tiempo haciéndose eco de esta leyenda infundada. ¿Cuánto de minoritaria es esta minoría nacionalista a la que hace referencia?
Esta teoría pseudohistórica ha sido recogida por el “Manifest Koiné”, entre los firmantes del cual habían distinguidos líderes de los principales partidos nacionalistas catalanes, como por ejemplo Laura Borràs, ex-Consellera de Cultura y cabeza de lista de JxC al Congreso.
Le cito: “Esta teoría ha encontrado cierto apoyo en el entorno político del actual Presidente de la Generalitat, Quim Torra, quien ya se había expresado en términos similares en varios artículos publicados antes de ejercer su actual cargo.” ¿Y qué decía, en qué términos se expresaba el Presiden Torrra en estos artículos a los que alude? El entorno político al que alude, ¿sería la formación Junts x Catalunya y el gran jefe Puigdemont?
Desde luego que en los artículos de Torra, escritos con anterioridad a ser elegido President, se recogen ideas supremacistas y xenófobas contra las personas migradas y proletarias castellanoparlantes.
De Puigdemont es difícil saber qué piensa con exactitud, ya que su trayectoria intelectual es nula.
¿Ve usted en todo esto un signo claro, o un indicio menos claro, de hispanofobia?
Bueno, sí, claro. Hay señales preocupantes dentro del nacionalismo catalán de radicalización hacia un fundamentalismo cultural, donde impera la idea de que el mestizaje, la interculturalidad, son nocivas para la cultura catalana y que el plurilingüismo perjudica a la lengua catalana.
¿Cuáles han sido las principales olas inmigratorias peninsulares a Cataluña? ¿Cuáles han sido las razones de esas migraciones?
Bueno, limitándonos al siglo XX, la primera es en los años 20 ligada a la demanda de mano de obra en la construcción para las obras del metro y la exposición universal. En los años 40 y 50 hay inmigración peninsular ligada a gente que huye de la represión política en su pueblo, así como a la demanda de trabajo industrial. El gran boom migratorio será en los años 60/70s del campo a los núcleos urbanos, fruto de la industrialización y el desarrollismo, el auge del turismo y la construcción, así como la mecanización de los trabajos agrícolas fruto de la generalización del tractor.
¿Se puede decir, desde alguna perspectiva, que Cataluña ha salido perjudicada o dañada por esta llegada de ciudadanos-trabajadores de otras comunidades españolas?
No, en absoluto. La llegada de fuerza de trabajo ha permitido un gran desarrollo económico y urbanístico y ha abierto la cultura catalana a mucha más gente y la ha enriquecido con el mestizaje y la interculturalidad.
Copio una de sus citas: “Acuérdate, catalán, que recibes imposiciones de gente foránea y que incluso algún hermano tuyo sufre hambre porque un extranjero ocupa su lugar. ¡Catalán! Este sitio a ti te pertenece.” ¿De quién es este texto? Si sustituimos catalán por español, francés o griego, salvo error por mi parte, parece una proclama de Vox, del Frente Nacional o de Amanecer Dorado.
Es una revista de extrema derecha independentista de los años 30, cuando una parte minoritaria del nacionalismo catalán ya se sentía fascinada por el fascismo italiano.
La cosa, por lo que usted cuenta, viene de lejos. Por ejemplo, en esta viñeta de El Be Negre no parece que se tenga en mucha consideración a los trabajadores “murcianos” y creo que El Be Negre no era un seminario de orientación derechista o conservadora.
Sí, estamos hablando de una época, anterior a la IIGM, en que el racismo y la xenofobia eran algo socialmente muy aceptados.
En ocasiones se ha hablado de murcianos, en otras de charnegos, en otras de andaluces vagos o perezosos… ¿De dónde surgen estas denominaciones y calificativos? ¿Sólo las usan los colectivos o fuerzas nacionalistas de orientación más conservadora o son términos extendidos entre la población?
De donde salen no lo sé, pero desde luego las utiliza la derecha nacionalista.
Descansemos un momento si le parece.
De acuerdo.
Fuente: El Viejo Topo, mayo de 2020.