Hacia finales de octubre 2023, luego de más de 6 semanas de huelga, los trabajadores de General Motors de EEUU, representados por su sindicato “United Auto Workers” (UAW) lograron firmar un acuerdo similar al que anteriormente habían alcanzado los trabajadores de la Ford y Stellantis (aumento salarial 25% más asignaciones por costo de vida).
El triunfo sindical frente a los llamados 3 grandes de Detroit (Ford, General Motors y Stellantis), motivó diversos análisis, entre ellos, nos resulta relevante destacar el realizado por David Leonhardt “The Autoworkers Victories” New York Times 31/10/23, allí el autor nos señala que una explicación plausible es retomar el pensamiento del economista Richard Lester (Universidad de Princeton). Lester dice que, en las negociaciones entre trabajadores y el capital, es central lo que define como “el rango de indeterminación”. ¿Qué significa? Los trabajadores suelen ganar salarios distintos, determinándose los mismos en algún punto del rango de indeterminación. Básicamente los trabajadores desconocen cuál es el valor de su contribución en el proceso de producción, situación que históricamente se viene desarrollando con la instauración del capitalismo.
Ahora lo que demuestra el conflicto automotriz de EEUU como tantos otros en la historia, es que hay una sola forma que la disputa entre capital-trabajador sea más pareja. Y solo es posible ello cuando la disputa no es individual sino colectiva, cuando el sindicato dice presente.
Lester nos diría que los sindicatos corren del costado inferior al salario del rango de indeterminación, a mayor organización sindical, como si fuera un velocímetro la aguja (el salario) va aumentando.
Es el sindicato, el que posibilita establecer salarios que superen la mera subsistencia. Para el neoliberalismo por ello los sindicatos fueron, son y serán su enemigo central. Por ello la idea es demonizarlo, perseguirlo, acosarlo. Sin mayor creatividad insisten elección a elección electoral con las mismas consignas “flexibilización laboral” con empleos precarios, como la búsqueda del debilitamiento sindical.
En su programa Milei nos habla de eliminar indemnizaciones, como de articular mecanismos que coartan la actividad sindical. Ninguna novedad.
Según Guillermo Oglietti en “Copiar y pegar: El plan económico de Milei” (29/10/23) el 90% de las propuestas en materia laboral son una copia de los ya fracasados de Martínez de Hoz, Cavallo y el macrismo. ¿Pero por qué insiste? Porque Milei es un fiel discípulo del neoliberalismo y sus mentores ideológicos.
En “Camino del libertario” (2023) Milei nos dice “Leer a Von Mises es tan fuerte que leí todas las obras”. Von Mises (1881-1973) es uno de los fundadores de la Escuela austriaca de economía y con respecto al sindicalismo en “Liberalismo la traición clásica” nos dice “Si la relación entre empresariado y trabajador se desarrolla al margen de toda reglamentación legislativa y de medidas coactivas de los sindicatos, el salario que el empresario paga por cada tipo de trabajo, corresponde exactamente al incremento del valor, el salario no puede ser más alto porque de otro modo las cuentas no cierran…”
En el mismo texto Milei nos dice “Cuando comencé a leer a Von Hayek quede deslumbrado y luego comencé a meterme con las obras de Rothbard” Empecemos con Von Hayek (1899-1992) continuador del pensamiento de Von Mises en el pensamiento económico. En “Los sindicatos y La ocupación obrera” señala “Los sindicatos han logrado mucho menos de lo que generalmente se piensa por medio de sus políticas de salarios y agravando estas circunstancias, sus actividades en la materia han resultado muy perjudiciales en lo económico y excesivamente peligrosas en lo político”
Con clara intención deslegitimadora soslaya a los sindicatos en su lucha por el salario, como advierte cuando se introducen en la disputa política. En “¿Sindicatos para qué? “Estoy convencido de que ese poder de los monopolios sindicales es el principal disuasor de las inversiones privadas”. Pretender señalar a los sindicatos y su accionar como uno de los determinantes de la no inversión no tiene ningún sustento empírico.
Sin embargo Von Hayek insiste contra los sindicatos en “Inflación o pleno empleo” afirma “La inflación, consecuencia de la rigidez a la baja de los salarios”. Con absoluta crudeza señala que si los salarios serian flexibles a la baja podría combatirse a la inflación… Ahora la inflación es culpa de los sindicatos.
Sigamos con Rothbard (1926-1995) según Milei su fuente de inspiración. Rothbard en la “Ética de la libertad” profetiza que para evitar a los sindicalistas que llama boicoteadores “deben considerarse legales, en una sociedad libre, ciertos recursos de los empleadores, tales como listas negras”, “despedir legalmente a sus empleados si organizan sindicatos, pudiendo hacer circular entre los restantes empresarios listas negras con sus nombres…” Clarísimo, marcar, identificar a los trabajadores sindicalizados, haciendo imposible conseguir empleo.
Frente a este pensamiento que también exhibió en el debate del 12/11/23 resulta imperioso construir un categórico triunfo el 19/11/23 y junto a miles de trabajadores y sindicatos decir “Hasta acá llegaste Milei”
Fuente: https://agenciapacourondo.com.ar/opinion/milei-contra-los-trabajadores-y-sus-sindicatos