Nos dirigimos a usted en calidad de académicas en el campo de las ciencias sociales y de la salud y expertas en estudios de género. Escuchamos con extrema preocupación sus declaraciones en un video emitido el día 17 de febrero de 2025. En él, usted manifiesta que el ministerio “no implementará ninguna acción basada en ideología de género”.
Resulta necesario contextualizar que la noción de “ideología de género” es la invención de un discurso falso en torno a los derechos humanos que ha sido incentivada por colectivos anti derechos a nivel planetario (Corrêa, 2025). Esa invención de la “ideología de género” se encuentra en el epicentro de la difusión intencional de ideas falsas. Entre ellas está que existe un lobby internacional LGTBI que quiere destruir a la infancia, que las personas de la diversidad sexo-genérica fomentan la pedófila, que el objetivo de la educación sexual es homosexualizar a la niñez o inducir al cambio de sexo o que las personas diversas son contrarias a la familia, son degeneradas, enfermas y deben ser curadas o extirpadas. Todas estas nociones animan hoy a grupos extremistas a difundir discursos de odio que estimulan la crueldad y la violencia contra las personas y familias en las que se expresa la diversidad sexo-genérica. Todo con el fin de inducir al pánico moral infundado en torno a la infancia y ganar adeptos a partir de la tergiversación deliberada de conceptos.
Es importante que usted conozca la realidad y el impacto de declaraciones como las suyas. 3064 personas LGBTI han sido asesinadas entre enero 2014 y junio 2023 en América Latina y el Caribe, de ellas 175 en Ecuador. La tasa de suicidios en población trans es más alta debido a la discriminación, los prejuicios y la falta de oportunidades educativas y laborales. La depresión que este rechazo provoca pone a esta comunidad en riesgo de suicidio y abuso de sustancias lesivas para la salud (Veras Gomes, H. et al, 2022). En lugar de penalizar a esta población, estudios serios en América Latina sugieren llevar a cabo políticas públicas que garanticen una mejor calidad de vida para las diversidades sexo-genéricas.
También nos sorprende su alusión a la “ideología de género”. Resulta fundamental indicar que el género es una categoría para el análisis de las desigualdades sociales, que permiten comprender las exclusiones y discriminaciones enfrentadas por las personas cotidianamente debido a su género. El género no es una doctrina que estipule lo que las personas deben ser o hacer, sino que busca explicar cómo se configuran las identidades y relaciones existentes y cómo dichas configuraciones están atravesadas por normas e imposiciones que han sido desafiadas por quienes quedaban en los márgenes de la sociedad.
Existe una alta evidencia científica que indica que las mujeres y personas de las diversidades sexo-genéricas son quienes enfrentan en los espacios educativos mayores niveles de violencia y discriminación. La Red Interuniversitaria de Investigación Feminista ha realizado un estudio basado en datos cuantitativos y cualitativo que indican que 4 de cada 10 estudiantes mujeres y 5 de cada 10 estudiantes de diversidades sexo-genéricas han vivido algún tipo de violencia sexual en instituciones de educación superior (Larrea, et al. 2023). Hemos realizado también investigaciones exploratorias que muestran esta misma prevalencia durante el bachillerato. Los resultados cualitativos revelan que esta violencia es un continuum en las experiencias educativas (Guarderas, et al. 2023). Finalmente hemos indagado de manera profunda sobre los efectos psicosociales de estas violencias en el ámbito educativo evidenciando mayores niveles de ansiedad, depresión, ausentismo y presentismo (Reyes, et al, 2024).
Entendemos que sus declaraciones se relacionan con la reciente sentencia de la Corte Constitucional (CC) que obliga al Estado a proteger el derecho a la educación de una niña transgénero cuya familia demandó a un colegio por discriminación, por no respetar su identidad, exponiéndola a acoso. La denuncia, interpuesta en 2017, se ha resulto ahora a pesar de que esta niña y su familia tuvieron que abandonar el país por la vulneración a la que fue sometida. La acción de protección de la Corte Constitucional implica, para su cartera, el diseño de «un protocolo de acompañamiento a niñas, niños y adolescentes, de conformidad con la guía de orientaciones técnicas para prevenir y combatir la discriminación por diversidad sexual e identidad de género en el sistema educativo nacional».
Nos preocupa su afirmación de que no va a permitir el “adoctrinamiento de la infancia”, pues no consideramos que la CC haya indicado nada al respecto. Lo que establece es la garantía de derechos para las infancias y adolescencias en todas sus diversidades. Utilizar estas afirmaciones nos hace considerar que por el contrario el Ministerio está evidenciando un compromiso ideológico con aquellos que discriminan, violentan y excluyen a las mujeres y diversidades sexo-genéricas.
Le invitamos a asumir su responsabilidad en este sentido y a no reproducir concepciones falsas sobre los que implica la garantía de derechos dentro del sistema educativo, pues esas nociones gestan el estigma, la discriminación y la violencia.
RED Interuniversitaria de Investigación Feminista
ADHIEREN
Movimiento de Mujeres de Sectores Populares, Luna Creciente
Colectivo Entretejidas
Lizi Ernst, Coalición Nacional de Mujeres del Ecuador
Cecilia Jaramillo
Cheryl Martens, Instituto de Estudios Avanzados en Desigualdades (IEAD).
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