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Accattone

Fuentes: Razones de ser

Accattone es un modismo italiano de los barrios bajos lumpenizados y se le dice a quien no le salen bien las cosas, además de flojo, sin ideología, mencionado en la novela Muchachos de la calle de Pier Paolo Passolini, ensayista, poeta, director de cine y un izquierdista defensor de lo que ahora se conoce como […]

Accattone es un modismo italiano de los barrios bajos lumpenizados y se le dice a quien no le salen bien las cosas, además de flojo, sin ideología, mencionado en la novela Muchachos de la calle de Pier Paolo Passolini, ensayista, poeta, director de cine y un izquierdista defensor de lo que ahora se conoce como la LGBT, quien describe los barrios populares, la prostitución y temas que en esos años 60s apenas empezaban a tocarse en Europa.

Han pasado 35 años desde la noche en la Passolini, fue brutalmente asesinado, el cadáver quedó convertido en un irreconocible amasijo de carne, sangre y huesos quebrados, eso sucedió en una solitaria playa de Ostia, en las cercanías de Roma. Desde entonces, los hechos, poco conocidos han sido: un juicio brumoso, una sombra de conspiración delictivo-política, un condenado de corto alcance, una sospecha de ocultismo…

Cuando Giuseppe Pelosi (a) La Rana, un prostituto de las calles, entonces de 17 años, es el único condenado por el homicidio, dijo en una entrevista televisiva en 2005 que los autores del crimen habían sido tres personas de quienes ignoraba la identidad, Italia supo que era el momento de afrontar un fantasma de su pasado próximo. El Ministro de Justicia de Italia, Angelino Alfano, escribió al fiscal jefe de Roma señalándole que una parte de los italianos desearía saber quién mató al cineasta, tras lo que se reabrió el caso del realizador de películas como Mamma Roma y El Evangelio según San Mateo. De momento, extraoficialmente. Porque la Justicia, igual que en cualquier país, demora la decisión de reabrir el caso, pero los medios no.

A lo largo de los años han sido muchos los intelectuales y amigos de Passolini, como la desaparecida escritora Oriana Fallaci-famosa por haber estado presente en la Noche de Tlatelolco, del 2 de octubre de 1968, en donde fueron asesinados por el ejercito mexicano, cerca de 300 estudiantes- y la investigadora Carla Benedetti, que han pedido la reapertura del caso.

Giuseppe Lo Biando y Sandra Rizza acaban de publicar en Italia un polémico libro en el que desechan la teoría del asesinato casual y homosexual, para plantear otra en la que intervienen la mafia y la corrupción política italiana. El libro se titula Profondo nero (Negro profundo). En este libro de investigación sus autores plantean la sospecha de que el poeta, escritor y cineasta fue asesinado por profesionales del crimen y por cuestiones políticas. Al parecer, Passolini, y su proyecto cinematográfico llamado Petróleo, había descubierto datos irrefutables sobre el extraño accidente de aviación en 1962 en el que murió Enrico Mattei, presidente de la compañía estatal italiana de petróleo Eni, y el asesinato en 1970, a manos de la mafia, del periodista Mauro De Mauro, quien a su vez investigaba la muerte de Mattei.

Los autores de Profondo nero creen que Passolini iba a develar en su película Petróleo el nombre de quien había mandado asesinar a Mattei, y más tarde a De Mauro. Es decir, que Passolini iba a mostrar datos nuevos, reveladores e incontestables sobre la palpable y directa relación existente en Italia entre el poder político y la mafia. En el nuevo libro, los autores entrevistan al asesino oficial del poeta, y éste les confiesa que el encuentro con Passolini no fue casual, que se pactó una semana antes, y que lo mataron 5 personas dándole una brutal paliza llena de patadas, puñetazos y bastonazos. Es más, Pelossi asegura que dos de esas cinco personas eran los hermanos Franco y Giuseppe Borsellini, conocidísimos ultraderechistas y fascistas desaparecidos en los años 1990 por el sida. Hay tantos puntos oscuros en torno el «caso Passolini», que el pasado verano más de 700 intelectuales firmaron un manifiesto en el que exigían la reapertura del caso y nuevas investigaciones, partiendo, por ejemplo, del análisis concienzudo, y con las nuevas técnicas de investigación criminal existentes e nuestros días, de los ensangrentados restos de ropa que vestía Passolini la fatídica noche del 2 de noviembre de 1975, y que se conservan en el Museo Criminal de Roma. Por extraño que pueda parecernos, jamás se han realizado pruebas de ADN de los restos conservados, a pesar de que al parecer en ellos existen los suficientes restos de sangre como hacer numerosos análisis por completo reveladores.

Primero, se descubrió que, la noche del crimen, Passolini estaba citado con un extorsionador que había robado los rollos de ‘Saló, los 120 días de Sodoma’. Segundo, aparece un nuevo testimonio, la grabación de un pescador de Ostia recogida por Sergio Citti (cineasta y colaborador de Passolini), que asegura conocer los nombres de dos personas relacionadas al homicidio del 2 de noviembre 1975. Las declaraciones de este pescador se han entregado a los responsables de la justicia italiana para ‘animarles’ a reabrir la investigación. Tercero, el senador italiano Marcello Dell’Utri , quien en el 2004 había sido acusado de «ser garante de intereses mafiosos» y por lo tanto condenado a pasar 9 años en la cárcel cosa que evitó momentáneamente (actualmente se celebra en Turín el proceso de apelación), debido a ser muy cercano políticamente a Silvio Berlusconi, con quien fundó en 1991, Forza Italia, un movimiento de derecha, este político un siciliano de 68 años que trabajaba como presidente de Publitalia ’80 (la compañía de publicidad de Silvio Berlusconi), ha revelado el hallazgo del capitulo perdido de la ultima novela de Passolini relacionada con el petróleo, un texto inédito, mecanografiado, de Passolini, que según se dice fue robado de la casa del cineasta antes de ser asesinado, según el senador del gobernante Partido Pueblo de la Libertad (PDL), fue presentado durante la XXI Exposición del Libro Antiguo de la ciudad italiana de Milán, que se celebró del 12 al 14 de marzo. Dicho texto habla de la empresa paraestatal petrolera ENI.

Aunque parezca el guión de una película de Francis Ford Coppola y su clásica saga de El Padrino, la trama de la muerte de Passolini entronca ahora con la lucha de poder entre Enrico Mattei (presidente de Eni) y Eugenio Cefis, su sucesor (presidente de Montedison), dos empresas que controlaban el sector petroquímico italiano. Passolini, antes de morir, estaba investigando el papel que tuvo Cefis en la historia política italiana para su libro ‘Petróleo’, publicado incompleto en 1992. Según Passolini, muchas fuentes relacionaban a Cefis con tramas internacionales y mafiosas y con el atentado que terminó con la vida de Mattei en 1967. Por su parte el Senador Dell’Utri ya antes se había hecho famoso por sus afinidades fascistas, «Mussolini perdió la guerra porque era demasiado bueno. No era para nada un dictador despiadado y sanguinario como podía ser Stalin. Leyendo sus diarios, día tras días durante cinco años, del 35 al 39, es decir, en la vigilia de la decisión de entrar en un conflicto mundial ya iniciado, le puedo asegurar que encuentro a Mussolini un hombre extraordinario y de gran cultura. Un gran escritor, a la altura de Montanelli, cuyos diarios parecen las crónicas de un enviado especial, con frases breves y adjetivaciones eficaces como raramente he leído», sostiene Dell Utri en la entrevista que ha concedido a una web televisiva. «No fue culpa de Mussolini si el fascismo se convirtió en un régimen horrendo. Hay testimonios escritos del Duce en los que critica a sus hombres que han traicionado el fascismo, construyendo uno a su medida basado en el chantaje y la violencia.

Su fascismo (el de Mussolini) era de naturaleza socialista». Este Senador italiano inmediatamente se puso como un sospechoso más de la muerte del controvertido cineasta y activista italiano. Las partes de ‘Petróleo’ -obra que Passolini no llegó a terminar- fueron publicadas en 1992, 17 años después de su asesinato, por la editorial Einaudi, pero sin las 27 páginas dedicadas a la muerte de Mattei, fallecido en 1962 en un accidente aéreo que en 2005, la Justicia italiana estableció que fue provocado; en la novela inconclusa se narra la historia de Carlo, un ingeniero de la burguesía de Turín que trabaja en Eni y que tiene una doble personalidad, angelical y diabólica–metáfora de la Italia falsa y mentirosa que describía el autor–,pero todo lo político gira alrededor de Enrico Mattei, quien había sido el pilar de la industria petrolera paraestatal italiana y la estaba lanzando a un proyecto geoestratégico de alianza con la naciente China Comunista.

Enrico Mattei, empezó a los veinte años de gestión de carrera en una pequeña empresa en la que entró como obrero, luego se trasladó a Milán, donde inicialmente fue un agente de ventas de productos químicos y pinturas Meyer. Treinta años, comenzó un negocio en el sector químico, en el que tuvo un cierto éxito, llegando a ser el proveedor de las Fuerzas Armadas. En 1936 se casó con la bailarina austriaca Margaret Paulas. Fue en los círculos amigos que han dado vida a la corriente demócrata de izquierda. Se unió al Partido Popular Italiano y, posteriormente, se mantuvo comunicación con la zona demócrata del Vaticano. Durante la Segunda Guerra Mundial participó en la Resistencia Anti-fascista como partidario, entre los «blancos» (los relativos a la política católica), que muestra sólo un buen líder y un buen diplomático. Por su formación inicial dio una proyección de un buen administrador de armas, suministros, alimentos, medicinas, útiles y otros artículos, también logró tejer una red de información, en donde participaron varios sacerdotes, por el cual se obtiene la información «fresca» sobre los movimientos del enemigo. Non appena la sua attività cominciò a destare attenzione, assunse il nome di battaglia di «Marconi» e quando le cominciarono ad interessarsi più da vicino alla sua persona, perquisendogli la casa di Matelica, Mattei tornò a Milano dove – dopo un periodo di quiete – si mise a capo di una formazione operante nell’

Pavese. -Tan pronto como su logística comenzó a despertar la atención de los fascistas y nazis, tomó el nombre de guerra de «Marconi» y cuando la SS comenzó a relacionarse más con su persona, registraron la bodega central de abastecimientos, pero huyó protegido por sus redes, Mattei regresó a Milán, donde – tras un período de tranquilidad. En 1944, se convirtió en el administrador de Alitalia y presidente de la convergencia izquierda católica. Mientras tanto, obtuvo un diploma en Contaduria y se unió con su hermano en Ciencias Políticas en la Universidad Católica. Inmediatamente después de la guerra Mattei fue encargado por el Estado Italiano para desmantelar el Agip, ente petrolero creado en 1926 por el régimen fascista, ‘General Italiana Petroleum Company (Agip), pero en lugar de seguir las instrucciones del Gobierno, reorganizó la compañía que fue refundada en 1953 como ENI, y rediseñó su logo como el perro famoso de Julio Cesar, pero ahora de 6 patas que significaban las 6 divisiones de la empresa, la Liquigas, que se encargaba de la logística de abastecer gas natural a las industrias italianas, de hecho Milán desarrolló su gran industria debido a los bajos costos del energético; luego abrió la División de Petroquímica, para abastecer de fertilizantes baratos al campo y la producción de alimentos, para la auto-suficiencia alimentaria; las otras divisiones fueron Nuovo Pignone, Romsa, Snam, Anic, dedicadas a apoyar por ejemplo a nuevas industrias como las llantas Pirelli,a la industria automotriz, Fiat, Bugatti, Ferrari, Alfa Romeo, Lamborghi, Maserati, a la industria siderúrgica, a la industria nuclear, SoMiREN (Società Minerali Radioattivi Energia Nucleare), por ejemplo Italia estaba consiguiendo tecnología de Inglaterra y uranio enriquecido de la URSS, en fin AGIP-ENI vino a ser fundamental para el desarrollo industrial de Italia.

Mattei dio un nuevo impulso a la perforación petrolera en el valle del Po, comenzó a construir una red de tuberías para la explotación de metano, y la abrió a la energía nuclear. B

ajo su presidencia ENI inició negocios importantes y concesiones de petróleo en el Oriente Medio y un importante acuerdo comercial con la Unión Soviética y China, las iniciativas que ayudaron a romper el oligopolio cartelizado de las ‘ Siete Hermanas ‘, que entonces dominaban la industria mundial del petróleo y que veían con malos ojos el nacionalismo energético de Mattei, mas aun cuando se une en una coinversión con la petrolera estatal de Kadafi, Syrté de Libia. Mattei también introdujo el principio de que los propios países iban a recibir el 75% de los beneficios de la explotación de los depósitos de gas y petróleo, hoy ENI y su asociación con la libia Syrte y la francesa ELF están consideradas como la 6ª corporación multinacional de petróleo, al final Mattei triunfó sobre las Siete Hermanas.

Aunque Mattei no participa activamente en la política, estaba cerca de la izquierda demócrata y fue parlamentario de 1948 a 1953. Murió en un misterioso accidente aéreo en 1962. A raíz de nuevas pruebas, en 2005 se estableció que el incidente fue intencional en la naturaleza. Mattei por su trabajo en 1961 fue galardonado con el doctorado honoris causa en ingeniería por la Facultad de Ingeniería (ahora Universidad Politécnica), Universidad de Bari fue recibido también otros títulos honoríficos, la Cruz de Caballero de la obra y la Estrella de Bronce Medalla del Ejército de Estados Unidos (05 de mayo 1945) y la ciudadanía honoraria de la ciudad de Cortemaggiore.

Era el 27 de octubre de 1962. Y para un anónimo campesino de Pavia, cerca de Milán, era un día como cualquier otro. De repente escuchó el característico rugir de un avión. Elevó la vista y lo vio. Entonces la nave estalló. Y cayó en llamas en un campo sembrado, a pocos metros de un arroyo. Hizo un pozo de donde sólo sobresalía la cola. En su interior había un cadáver. Nadie supo en un primer momento que el muerto era Enrico Mattei, el influyente presidente del Ente Nacional de Hidrocarburos (ENI).

El campesino contó su versión a las autoridades. Con su relato afirmaba la incómoda posibilidad de un atentado y descartaba la hipótesis de un accidente. Fue silenciado con dádivas. Hoy, casi 35 años después, el fiscal de Pavia, Vincenzo Calia, asegura que pronto se conocerá la verdad sobre la misteriosa muerte de Mattei. Calia reabrió el caso el 22 de mayo de 1995 y ordenó exhumar los restos de Mattei.

Veinte años antes, la Justicia había cerrado la causa por falta de elementos capaces de demostrar, después de 12 años de investigaciones, la existencia de responsabilidades de terceros en el desastre. Mattei sufrió un atentado. La trágica desaparición del padre de la industria petrolera italiana fue llevada al cine por Francesco Rossi, en el memorable filme El caso Mattei, interpretado por Gian María Volonté.

Ante la versión de un atentado contra la vida de Mattei, se mencionó a la mafia siciliana. No hubo pruebas. También se señaló a las siete hermanas, las grandes compañías petroleras estadounidenses, que miraban con poca gracia el empuje de Mattei en el desarrollo de iniciativas de interés nacional en hidrocarburos. Las sospechas alcanzaron también a la Organisation armée secrète u Organización del Ejército Secreto (OAS), creada por colonos franceses en Argelia.

Según escribió el diario de Turín La Stampa, los peritos designados por Calia confirmaron la hipótesis de que Mattei sufrió un atentado, se cree que esto fue obra de los fascistas pues hallaron rastros de material explosivo en fragmentos metálicos extraídos de sus restos. Si bien en ambientes de la fiscalía de Pavia aclararon que el análisis pericial aún no está listo, puntualizaron que lo publicado por el diario contiene fragmentos de verdad investigativa. Y si la pericia confirma la tesis del atentado, es probable que la fiscalía dé a conocer los nombres de los presuntos instigadores. De todas formas, la fiscalía desmintió que las últimas investigaciones tengan relación con las declaraciones del mafioso arrepentido Tommaso Buscetta. En noviembre de 1994, Buscetta declaró que la tragedia no se debió a un accidente sino a un atentado cometido por la mafia siciliana para hacer un favor a una familia estadounidense de la Cosa Nostra. Los familiares de Mattei siempre estuvieron convencidos de que éste fue asesinado. Según Angelo Mattei un sobrino, su tío murió cuando estaba a punto de entrevistarse con el presidente John Kennedy para firmar un acuerdo con las petroleras, que habría puesto fin a las guerra de las siete hermanas. Para el periodista italiano Giorgio Pisanó, las noticias sobre la nueva pericia del caso Mattei no son una novedad. Pisanó fue uno de los primeros periodistas en llegar al lugar del accidente del avión de Mattei.

¿Fue Pasolini una víctima de las sombras más oscuras del ejercicio del poder en Italia de los fascistas de la OAS, del P2 de Berlusconi? ¿Lo asesinó la mafia siciliana? ¿Murió el cineasta para acallar sus descubrimientos sobre la muerte de Mattei? ¿Fue víctima brutal el poeta de una conspiración a cuatro bandas: mafia, poder político, poder energético, geopolítica pro árabe con Irán, Irak y Libia para que no se indagara más sobre el caso Mattei? O todo se reduce a lo que nos han contado desde hace años, es decir, a una historia terrible y vulgar de violencia sexual entre maricones en las solitarias cercanías de un playa invernal? ¿O tendrá algo que ver Mario Ferrari Aggradi, Fiscal General para el caso Mattei con el actual Secretario de Economía de Felipe Calderón, Bruno Ferrari? Todo en este asunto se revela de un color negro profundo, con implicaciones con los fascistas, con la CIA, el P2 de Berlusconi y el cartel mas peligroso del mundo, el petrolero de las extintas 7 hermanas, hoy una autentica petrocracia houstoniania y bushiana-straussiana.

El autor es economista, académico y periodista
Fuente: http://www.razonesdeser.com/vernota.asp?d=9&m=8&a=2010&notaid=73384