Fue el asambleísta constituyente con más alta votación a nivel nacional y el conductor de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC). El 23 de junio del 2008, en medio de un abierto y claro distanciamiento con el presidente Rafael Correa, dio un paso al costado, renunció.
Economista, crítico de la dolarización y ex ministro de Energía del actual régimen, Alberto Acosta defiende el contenido de los textos constitucionales aprobados en el cantón manabita de Montecristi, se refiere a tres proyectos legislativos claves que se tramitan en la Asamblea y a la conformación de los comités de defensa de la revolución ciudadana, entre otros temas que han marcado la presente semana.
¿Por qué hay que preocuparse de la Ley de Aguas?
Porque el agua es vida y es un derecho humano fundamental. Creo que la ley tiene que reflejar estos planteamientos fundamentales y no puede abrir la puerta para que sean expropiados con mañoserías legales jurídicas que pueden poner en peligro la Constitución y la vida misma.
¿Ha faltado mayor socialización?
Ha habido algún debate con esta ley, ha habido centenas de reuniones, pero lamentablemente en la Secretaria Nacional del Agua (Senagua) no ha habido la suficiente apertura para escuchar los planteamientos, por eso la ley todavía tiene algunos aspectos preocupantes.
¿Como cuáles?
Uno. No hay criterios claros para la participación de la ciudadanía. Dos. Se establece un criterio por el cual la minería está por encima del turismo, de la actividades recreacionales y culturales. Ese es un grave error. Tres. No se dice nada en la ley sobre la contaminación y se abre la puerta a la explotación económica de las aguas subterráneas. ¿Será ese un camino para su privatización?, me pregunto.
¿Qué es lo rescatable?
La propuesta lo que rescata es la autoridad única del agua, el control por parte del Estado, abre la puerta a la revisión de algunas concesiones, pero no de todas como debería ser. Creo que falta pulir esa ley y ratificar en ella un criterio fundamental: el agua es vida y no puede ser privatizada, el agua es un derecho humano.
Otra ley clave es la de Comunicación, ¿qué debe garantizar este cuerpo normativo?
En primer lugar la libertad de expresión para toda la ciudadanía, no sólo para los comunicadores. Luego tenemos que garantizar mecanismos de inclusión en los medios para todos los ciudadanos. Hay que acabar con todas las estructuras oligopólicas de los medios de comunicación e impedir que los grandes grupos económicos, como son los bancos, tengan medios de comunicación.
Y sobre la Ley de Educación Superior, ¿hay peligros de que se vulnere la autonomía como advierte el Conesup?
Creería que no. La Ley en términos generales es bastante buena, la apoyo. Hay puntos que hay que corregir, pero en general es una buena ley. Si hay sustos es porque hay grupos que van a perder su control, la posibilidad de hacer negocios con la educación superior y otros grupos políticos que van a perder su feudo.
¿Hay que preocuparse porque estas leyes y otras nueve no se aprueben hasta el 14 de octubre próximo?
Me temo que van a tener que postergar un poco el tiempo, yo no me opongo si eso nos garantiza leyes de calidad con una amplia participación ciudadana. Si nos demoramos un poco en el plazo no es tan grave. Los apuros llevan a lo que vivimos al finalizar la Asamblea Constituyente. El último mes fue de apuros, de atropellos, perdimos calidad en el producto final, que tiene algunos errores.
…Errores como los textos adulterados que denunció León Roldós y recientemente Fernando Balda a través de un video.
León Roldós denunciaba por su frustración y amargura, y lo de Fernando Balda es un acto de un calumniador profesional que ni siquiera se queda en el país para dar la cara.
A propósito, la Constitución está por cumplir un año, ¿qué evaluación deja su implementación?
Creo que se ha avanzado en algunos aspectos, pero todavía no se cumple con lo fundamental que es una mayor participación ciudadana. Hay algunas leyes en donde se ha infringido la Constitución abiertamente como la Ley de Minería, de Soberanía Alimentaria. El grave problema de la Constitución no está en el gobierno ni en los asambleístas, está en nosotros, en la ciudadanía, que no nos hemos apropiado de la Constitución que es nuestra, es una caja de herramientas de la ciudadanía y eso todavía no lo hemos entendido.
¿Cómo lograr una real participación ciudadana cuando hay un régimen que impone su criterio y ataca a quienes piensan diferente?
No importa que el gobierno diga o no diga, nosotros tenemos que seguir para adelante. La participación no va a ser nunca el regalo de un gobernante ni la dádiva de un partido político. La participación tenemos que conquistarla con la lucha y si es preciso la lucha en las calles.
¿Un intento para encausar esa participación pueden ser los Comités de Defensa de la Revolución (CDR’s) que propone el gobierno?
Creo que ese es un error si se plantea desde el Estado. Si eso es simplemente una forma de organizar el movimiento PAIS, pues adelante. Lo que sería grave es que se quiera formar comités con recursos públicos o si se utilizan para entregar beneficios como los bonos de desarrollo, salud o educación marginando a la gente que no está alineada ideológicamente con este movimiento.
…Se puede hablar de una verdadera revolución, ayer el propio Fabricio Correa, hermano del presidente, ha dicho que la revolución está de tumbo en tumbo y que más bien es el sexto velasquismo.
El que nunca debió haber estado en este proceso es este señor Fabricio Correa. Yo puedo tener mis diferencias con el presidente Rafael Correa, pero debo anotar que él sí se juega realmente la vida en este proceso. El otro señor (Fabricio Correa) se juega sus negocios, lo único que le duele o lo que siente es su bolsillo, que es su órgano más sensible.
¿Cree usted entonces que el presidente no se ha desviado de los principios programáticos?
En algunos puntos se mantiene coherencia. En política exterior aplaudo lo que se está haciendo de forma decidida. En el manejo de la actividad productiva lamento que se esté priorizando la atención a los grupos más poderosos del agro, la banca, ahora del turismo a los cuales se les libera del pago del IVA que solo beneficia a los grandes grupos oligopólicos. Yo creo que lo que le falta al gobierno es mucho más coherencia.
¿Alberto Acosta está dentro o fuera del movimiento PAIS?
Estoy dentro de la ciudadanía, dentro del Ecuador.
En otro tema, hace diez años empezó a regir el dólar como moneda oficial en el Ecuador. ¿Qué resultados ha dejado este modelo económico?
La dolarización fue uno de los mayores errores que se pudo haber cometido. Ahora estamos atrapados en esa trampa y tenemos que recurrir a ciertos mecanismos que generan algunas dificultades como son las medidas arancelarias, las barreras cambiarias que son medidas con las que encarecemos las importaciones.
¿La dolarización tiene futuro en el país?
Eso va a depender de cómo evolucione la economía ecuatoriana, mientras en el país no haya la conciencia de la necesidad de salir de esa trampa cambiaria vamos a tener que seguir en la dolarización, y eso lo sostendremos mientras haya suficientes recursos externos, de lo contrario saldremos a patadas de la dolarización.
¿La política económica del gobierno apunta a sostener la dolarización?
Creo que el gobierno no tiene como objetivo sostener la dolarización y eso está bien. El objetivo este rato es sostener la mayor cantidad posible de empleo, el aparato productivo. El objetivo no puede ser sostener la dolarización sino la calidad de vida de los habitantes, la dolarización es solo una herramienta, un medio, pero no el fin último.