“Seamos la pesadilla de quienes pretenden arrebatarnos los sueños”
Ernesto Che Guevara
“El verdadero motivo de este paseo en bicicleta que organizamos en Ostia el 15 de junio fue sin duda recaudar fondos para comprar dispositivos médicos y medicamentos antitumorales para niños ingresados en el Hospital Pediátrico Universitario William Soler de La Habana. Sin embargo, mi deseo, y el de todos los participantes de la ANAIC Círculo Julio Antonio Mella de Ostia, fue poder involucrar otras realidades locales alrededor de nuestro proyecto y crear una gran solidaridad. Y logramos nuestro objetivo gracias a esta unión con las asociaciones del territorio, formada por numerosas personas que tal vez no participaron en la pedalada, pero vinieron a traer sus contribuciones. Imagínate, Ida, ¡en determinados momentos se formó una cola en el punto de recogida!”.
Quien me cuenta todo esto es Roberto Fraschetti, secretario del Círculo ANAIC Julio Antonio Mella de Ostia, quien con los compañeros del grupo pusieron todo su empeño en difundir este evento en las redes sociales, elaborando folletos, colocando carteles en bares y otros puntos de paso muy transitados en Ostia.
Y una vez más la unión por una causa noble fue importante: ¡este grupo de gente buena recaudó 1500 euros!
Ni siquiera hace falta que Roberto me diga el motivo de su implicación con el Hospital William Soler de La Habana: el año pasado acompañamos a otros compañeros a entregar medicinas y vimos con nuestros propios ojos los pequeños héroes que luchan por sus vidas.
Quisiera subrayar que, a pesar de la situación de crisis que vive Cuba, provocada principalmente por el bloqueo (un genocidio que la asfixia desde hace más de 60 años), el clima hospitalario que respiramos ese día (y también se respira hoy) es de fuerza y voluntad para vencer la enfermedad. Todo esto gracias sobre todo a las médicas que dirigen este departamento, empezando por la Dra. Alena Fontaine Valdés, directora del hospital, luego la Dra. Caridad Verdecia Cañizares, directora del servicio de Oncocirugía y la Dra. Talia Marrero Amores, oncóloga pediatra.
Siempre saben infundir energía y vigor, especialmente a aquellos padres perdidos y desgarrados cuando ven a sus pequeños amenazados por la enfermedad.
Retomando el evento de Ostia, para atraer la atención y la curiosidad de los ciclistas aficionados se invitó a una participante excepcional: la legendaria bicicleta Heroica del Che Guevara, que recorrió 4.200 kilómetros a través de Sudamérica en 1950.
Este velocípedo especial, que monta en su cuadro un motor italiano Garelli, es parte de una colección muy grande de bicicletas de propiedad de Giancarlo Bucci, un artista de Alba Adriatica. La bici del Che Guevara es una pieza de época muy rara, que posee documentos originales y fotografías del «Che», que se exhibieron en La Habana en la ocasión de la primera edición de “Eroica Cuba”, celebrada el pasado 10 de febrero. Para acompañar la bicicleta antigua en la isla caribeña, un nutrido grupo de ciclistas y aficionados llegados de toda Italia acudieron al llamamiento de Giancarlo Brocci, un médico de Siena, que en 1997 inventó la primera edición de «Eroica», un evento deportivo internacional reservado para bicicletas antiguas.
Roberto Fraschetti continúa: “Fueron 11 kilómetros de solidaridad para cruzar el Mar Mediterráneo y el Océano Atlántico. Un paseo en bicicleta, en dos etapas, entre el mar y el pinar, apto para todas las edades, hasta llegar a 8.709 kilómetros de distancia, donde nos necesitan. Una pedalada heroica para los pequeños héroes de La Habana que necesitan dispositivos médicos y medicamentos. Devolvemos la solidaridad de Cuba hacia Italia en el sector de la salud (ahora en la región Calabria, en Lombardía durante la epidemia de COVID-19). Y además Cuba siempre ha enviado médicos a todo el mundo. De hecho, Cuba está a la vanguardia en muchas ramas de la medicina, pero carece de materiales básicos, debido al bloqueo, como vendajes, gastroprotectores, vitaminas y jeringuillas, bienes fundamentales, especialmente para los niños que padecen de tumor. En un mundo justo no se debería enfatizar la importancia de ser solidarios unos con los otros, pero lamentablemente este mundo no lo es y recibir estos gestos de solidaridad, incluso desde fuera de Roma, nos parece verdaderamente una epifanía».
Y sobre este tema quiero recordar a Fidel Castro, con un fragmento del discurso pronunciado en Buenos Aires en 2003: “Pienso —porque soy optimista— que este mundo puede salvarse, a pesar de los errores cometidos, a pesar de los poderíos inmensos y unilaterales que se han creado, porque creo en la preminencia de las ideas sobre la fuerza (…) Nuestro país es capaz de enviar a los médicos necesarios a los rincones más oscuros del mundo. Médicos y no bombas, médicos y no armas inteligentes.»
Junto al ANAIC Círculo Julio Antonio Mella de Ostia colaboró en la organización el Municipio de Roma X, FIAB Roma Ostia in Bici, Pro Loco Ostia Mare de Roma, Associazione Gruppo Donatori Volontari Amici Ospedale G.B. Grassi, Associazione Nazionale Carabinieri Sez. Ostia Lido, Associazione Culturale Severiana e Federbalneari Roma.
“Nos conmovió con qué generosidad han respondido farmacias como la del Dr. Oddo Polverino, pero también empresas líderes en innovación en el sector biotecnológico como Erbagil. Incluso el presidente del municipio X, el doctor Mario Falconi, el concejal Antonio Caliendo y la doctora Ángela Mastrantonio, nos echaron una mano con la sensibilidad que los caracteriza.»
Entre los participantes en la colecta solidaria estuvo Giuseppe Di Lorenzo, presidente de la Associazione Gruppo Donatori Volontari Amici Ospedale G.B. Grassi, que en una entrevista en Canale 10, una cadena de televisión local afirmó: «fue importante para nosotros colaborar, sobre todo porque se trata de niños con tumor en La Habana, donde se necesita de todo, y nosotros les tendemos una mano, esperando sacarles una sonrisa, pero sobre todo mucha salud.»
Y para concluir robo una frase del dueño de la bicicleta Heroica, Ernesto Che Guevara, que me parece describir exactamente lo que pasó en Ostia:
“La solidaridad no es un acto de caridad, sino una ayuda mutua entre fuerzas útiles y necesarias para la supervivencia de la humanidad.»
Ida Garberi, responsable de la página italiana de Prensa Latina
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