Las cookies son pequeños fragmentos de información que se almacenan en nuestros equipos cuando visitamos una página. En teoría nos ayudan a tener una navegación más ágil cuando volvemos a visitar la misma página de nuevo, disminuyendo entre otras cosas el tiempo de carga. Pues bien el uso indebido de este tipo de elementos Disney […]
Las cookies son pequeños fragmentos de información que se almacenan en nuestros equipos cuando visitamos una página. En teoría nos ayudan a tener una navegación más ágil cuando volvemos a visitar la misma página de nuevo, disminuyendo entre otras cosas el tiempo de carga. Pues bien el uso indebido de este tipo de elementos Disney y Warner Bross han sido demandados por vulnerar la privacidad en la navegación de sus webs.
La demanda incluye a más empresas, ya que se ha demandado a todas aquellas que utilizan un tipo especial de cookies, desarrolladas por Clearspring Technologies, en flash que no son detectadas por el navegador cuando el usuario decide limpiar las cookies. La base de todo esto tiene como fin la publicidad online, puesto que estas cookies permiten recoger información de los hábitos de navegación de los usuarios.
Toda esta información sería utilizada con fines publicitarios, para ofrecer al usuario en todo momento publicidad que le interese a través de widgets insertados en las páginas web. Esta tecnología era utilizada también por la empresa Quantcast que ya se enfrento hace algo más de un mes a una demanda similar.
Al final lo que se está realizando es una invasión en la privacidad de los usuarios, puesto que se está recopilando información sin su consentimiento con fines comerciales por parte de una empresa cuya página visitamos en una ocasión y que nos instaló su cookie, que funciona como un programa espía más que facilitar la navegación.