Traducido del inglés para Rebelión por J. M.
John McAuliffe es la última víctima de la actual purga filo semita en el Laborismo. De acuerdo con el Jewish Chronicle, McAuliffe escribió que: «El Holocausto ha sido la herramienta política más útil del Gobierno sionista de Israel para establecer un chantaje financiero a Occidente, por medio del cual Israel recibe una cantidad ilimitada mientras dure su existencia». McAuliffe se limita a señalar los hechos. Todo el mundo sabe que «no hay negocio como el negocio de la shoah», tal como lo expresó el político israelí Abba Eban en la década de 1950. Pero negar la verdad y matar al mensajero es ahora el procedimiento corriente en el Partido Laborista de Corbyn.
Como verdadero izquierdista, McAuliffe torció un poco la verdad para encajarla bien en el «relato» del partido. McAuliffe dijo que «el Gobierno sionista de Israel es incompatible con el judaísmo y la historia judía». Esta es una declaración popular, pero es errónea. Los izquierdistas tienden a trazar una línea de demarcación imaginaria entre el «judío» y el «sionista». No existe tal línea. El sionismo es, de lejos, la ideología política judía más popular. Y el sionismo en su estado actual es compatible con el judaísmo y la cultura judía: la barbarie israelí es leve en comparación con algunos versículos genocidas del Antiguo Testamento y de las enseñanzas del Talmud . Y el agresivo lobby sionista es consecuente con el Libro de Ester .
Pero torcer la verdad acerca de la cultura judía no salvó a McAuliffe. Fue expulsado del partido de acuerdo con el compromiso de Corbyn y de McDonnell para «expulsar» a los que están haciendo «observaciones en las que haya odio a los judíos».
Durante años he sugerido que la izquierda es judía por poderes, pero el Partido Laborista de Corbyn excede el alcance de los poderes. Sin lugar a dudas el Partido Laborista de Corbyn es ahora un club sin carácter de gentiles sabeos. Las políticas del Partido Laborista ahora son compatibles con la cultura judía: totalmente intolerantes y ante todo interesadas por el sufrimiento imaginario de un solo pueblo. Estas personas no son la clase obrera, probablemente son el grupo étnico más privilegiad o de Gran Bretaña. El Partido Laborista de Corbyn es un «territorio sionista ocupado».
Yo debería estar contento con lo que está sucediendo. Demuestra mis tesis de que la izquierda no es amiga de Palestina, de los oprimidos o de los parados.
Nunca habría creído que Jeremy Corbyn se dedicaría a esta política tan enormemente traidora. No esperaba que Corbyn se convirtiera en un perro faldero sionista. Corbyn fue una gran esperanza para muchos de nosotros. Supongo que ha llegado la hora de aceptar que la izquierda es un concepto muerto, no tiene nada que ofrecer. La disidencia con el capitalismo global y con la barbarie siocon (1) debería adoptar una forma diferente .
Nota de la editora:
(1) «Siocon» es un neologismo inventado por Gilad Atzmon con las palabras «neocon» (los neoconsevadores yanquis, los halcones de la derecha republicana más retrógrada) y «sionista».
Fuente: http://www.gilad.co.uk/writings/2016/4/26/corbyns-labour-is-not-a-party-more-like-occupied-territory
Esta traducción se puede reproducir libremente a condición de respetar su integridad y mencionar al autor, a la traductora y Rebelión como fuente de la traducción.