La actriz cubana Yordanka Ariosa obtuvo la Concha de Plata a la mejor actriz en el Festival de Cine de San Sebastián por su trabajo en la película «El rey de La Habana» (1). Y sorprende que apenas haya sido entrevistada en los medios españoles. «Corazón Corazón», suplemento del diario ABC, le hacía su única […]
La actriz cubana Yordanka Ariosa obtuvo la Concha de Plata a la mejor actriz en el Festival de Cine de San Sebastián por su trabajo en la película «El rey de La Habana» (1). Y sorprende que apenas haya sido entrevistada en los medios españoles.
«Corazón Corazón», suplemento del diario ABC, le hacía su única entrevista, un verdadero acto de acoso político (2): «¿Sabiendo que la película no es del agrado del régimen (cubano), ¿no va a tener problemas a la vuelta?», o «¿No le gustaría marcharse de Cuba? Quizá tenga más oportunidades fuera…», eran algunas de las preguntas. Las respuestas de la actriz nos hacen entender por qué su perfil interesó tan poco a la prensa española. Yordanka, primero, ponía en duda que «la película no resulte del agrado de las autoridades cubanas». Y aclaraba, además, que «como a cualquier actriz (…) del mundo, (le) gustaría hacer proyectos dentro y fuera de mi país».
Pero ¿qué debió haber dicho la actriz cubana para atraer el interés de los medios? Que el rodaje en Cuba fue «prohibido» (3), que el film está «censurado» en la Isla o que «la película no le ha gustado nada al Gobierno cubano» (4). Es decir, lo que ha repetido, una y otra vez, el director de la película, el mallorquín Agustí Villaronga.
Estas acusaciones eran desmentidas por Roberto Smith, director del ICAIC (el Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos) (5). En un artículo -ignorado por la prensa española- narraba cómo él personalmente explicó a Villaronga que la participación del ICAIC «no era posible (…) en un plazo tan corto y coincidiendo con el desarrollo de otros proyectos», algo que -remarca- «es un derecho de cualquier (casa) productora del mundo» (6).
Smith desmentía, además, la «censura» o «veto» de la película en Cuba. Villaronga había declarado que veía «difícil que (aquella llegara) a las pantallas de Cuba, (a pesar de que) la productora quiere intentar ir al Festival de La Habana» (7). Dicha productora ejecutiva, María Luis Matienzo, añadía una amenaza directa al citado Festival: «si no la dejan proyectar ‘El rey de La Habana’ -leemos en «El Diario Vasco»- hará un documental sobre ello», porque «les guste o no la pienso llevar» (8). Pero ¿es cierto que el prestigioso Festival del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana ha «vetado» esta película (9)? El director del ICAIC lo desmentía categóricamente: «el filme ni siquiera ha sido inscrito en el Festival, (…) (ni ha sido) ofrecido para su exhibición en el país» (10). La propia actriz cubana Yordanka Ariosa confirmaba que «la productora española no ha mandado la película a la convocatoria del festival» (11). Es decir: que «El rey de La Habana» está vetada y censurada en un Festival al que no se ha presentado. Curioso.
Ciertos medios convertían el film en un alegato contra el Gobierno cubano. «Una película que muestra con valentía ciertas vergüenzas del régimen castrista», leemos en el diario «El Mundo» (12). Un «filme (que) hirió (…) las sensibilidades de izquierda que todavía defienden los logros del agonizante régimen castrista», nos dicen los diarios del Grupo Vocento (13). Una lectura politizada en la que colaboraba activamente el propio director (14): su película -aseguraba- descubre «lo que pasa en las zonas más marginales de Cuba», que «no son la que se han visto normalmente» (15). Ya. Entonces ¿qué ha hecho el cine cubano -producido por el ICAIC- en los últimos 25 años, sino ser un descarnado retrato social del país, incluyendo su marginalidad (16)? ¿Ha tenido que venir de Europa este cineasta para «dar voz a los sin voz», como asegura en sus entrevistas, o «a poner `negro sobre blanco´ lo que pasa en las zonas más marginales de Cuba» (17)? Entonces ¿qué hicieron «Barrio Cuba» (18), «Páginas del diario de Mauricio» (19), «Fresa y Chocolate» (20), «Lista de espera» (21), o las más recientes «Conducta» (22) y «Vestido de novia» (23)? ¿No será que sus directores, sencillamente, no inventaron «censuras» o «vetos» para promocionarlas?
Algunos medios aprovechaban, además, para hacer pasar realidades límite de la Cuba de hace 20 años, por un supuesto retrato de la Cuba de hoy: «Sexo y miseria en Cuba conmocionan el festival de San Sebastián» (24), «Agustí Villaronga muestra la Cuba más sórdida y oculta» (25), «Villaronga viaja a la sordidez de Cuba» (26) o «Villaronga se adentra en la tragedia cubana» (27) son algunos titulares.
En el Festival de San Sebastián se estrenaron otras películas, también con duros retratos sociales. «Moire», un film de Georgia, trata, por ejemplo, el «drama en torno a una familia desestructurada» (28). ¿Creen que los medios que han hecho -excepcionalmente- mención de ella han citado, en algún momento, al gobierno o al «régimen» de Georgia? ¿Qué creen Vds.?
Notas
(1) http://www.granma.cu/cultura/
(2) http://www.vocento.com/
(3) http://www.elmundo.es/cultura/
(4) http://www.elcultural.com/
(5) http://www.cubacine.cult.cu/
(6) http://www.cubainformacion.tv/
(7) http://ultimahora.es/noticias/
(8) http://www.diariovasco.com/
(9) http://www.habanafilmfestival.
(10) http://www.vivelohoy.com/
(11) http://www.14ymedio.com/
(12) http://www.elmundo.es/cultura/
(13) http://www.laverdad.es/murcia/
(14) http://www.rtve.es/radio/
(15) http://www.lavanguardia.com/
(16) http://cubacine.cult.cu/
(17) http://www.efe.com/efe/espana/
(18) http://www.cubainformacion.tv/
(19) http://www.ecured.cu/P%C3%
(20) http://www.ecured.cu/index.
(21) http://www.ecured.cu/index.
(22) http://www.cubainformacion.tv/
(23) http://www.cubainformacion.tv/
(24) http://www.martinoticias.com/
(25) http://ocio.diariodemallorca.
(26) http://www.laverdad.es/murcia/
(27) http://valenciaplaza.com/
(28) http://m.noticiasdegipuzkoa.