Las y los compañeros de Intervención y Coyuntura, Revista de Teoría y Crítica Política, prepararon un dossier titulado Engels y la sensibilidad política, con textos significativos sobre este gran pensador. Como siempre, muy atinados. Este año se conmemora el bicentenario de su natalicio quien junto a Karl Marx emprendiendo no una gran tarea, sino la Tarea: la transformación del mundo, tanto en la teoría como la práctica. Por supuesto, si aún no es una realidad, por lo menos está en el horizonte utópico. Esta transformación empieza por la sensibilidad ante las injusticias.
Uno de los primeros textos es Utopía y ciencia. Cien años después de Giuseppe Prestipino, la ciencia fue una preocupación central de nuestro pensador. Otra de sus inquietudes fue la relación “ser humano-naturaleza”. Con la rotura de metabolismo entre la naturaleza y los seres humanos enunciado en El Capital, se nos adviene uno de los grandes problemas: la crisis civilizatoria. Las herramientas teóricas brindadas por Engels nos invitan a reflexionar sobre la transformación de “la sociedad…superando el punto de vista capitalista”. En el texto de Prestipino se resalta que, “una utopía es el concepto de ruptura histórica que también interviene en la dinámica de la fuerza productiva, y es cierto que sólo el socialismo científico puede implicar de manera realista y efectiva una tal utopía revivida”. Como todos sabemos, el socialismo no goza de buena prensa por las experiencias históricas trilladas.
Luciano Gruppi escribió El origen de Estado según F. Engels (1820-1895). Otro de los temas capitales en Engels fue el Estado y su relación con la familia. Ahora nos vendría bien releer El origen de la familia, la propiedad privada y el Estado, cuando consideramos a la familia como la conocemos hoy: patriarcal y heteronormativa lo hacemos ahistóricamente como si siempre fue así y no el resultado de un largo proceso histórico. Con respecto al Estado, nos dice Gruppi, “se convierte en una necesidad basada en un cierto grado de desarrollo económico, que está necesariamente ligado a la división de la sociedad en clases….entonces el Estado es el resultado de un proceso por el cual la clase económica más fuerte, es decir, la que tiene los medios de producción decisivos en esa sociedad determinada, afirma todo su poder sobre toda la sociedad”, estas líneas son concluyentes para comprender los conflictos sociales en los que un solo grupo (de poder económico pero no únicamente) quieren imponer su criterio al resto, prioritariamente con respecto a los modos de producción y sus relaciones sociales.
El dossier completo se puede consultar en tinyurl.com/yyumn8r9 Podríamos estar o no de acuerdo con este gran pensador, pero sin duda junto a su amigo inseparable Marx, sentaron las bases de la praxis revolucionaria para la transformación de la sociedad.
Abdiel Rodríguez Reyes, Profesor de Filosofía en la Universidad de Panamá