Recomiendo:
0

FF.AA. en el contexto de un proyecto nacional

Fuentes: Rebelión

Cuánto tiempo podría sobrevivir una nación sin alimentos y los productores que las generan ¿una semana, dos? Qué le sucedería a la nación si desaparecieran los médicos durante dos semanas, no hay lugar a duda que devendría una grave crisis de salud pública. Si por arte de magia se esfumaran las FF.AA durante una semana […]

Cuánto tiempo podría sobrevivir una nación sin alimentos y los productores que las generan ¿una semana, dos? Qué le sucedería a la nación si desaparecieran los médicos durante dos semanas, no hay lugar a duda que devendría una grave crisis de salud pública. Si por arte de magia se esfumaran las FF.AA durante una semana qué ocurriría con la nación, consideramos que los ciudadanos podrían arreglárselas sin FF.AA durante una semana, de la misma manera que si lo mismo ocurriera con la iglesia. Pero si se esfuma la policía durante una semana, la cosa sería más complicada.

Con esto no estamos insinuando que no son necesarias FF.AA, lo son y mucho más en este mundo convulsionado e inestable. Pero si es necesario recordarles que no son columna vertebral de esta nación y ninguna fuerza armada lo es en ningún lado, incluso si esa nación estuviera en guerra, ya que como sucede por ejemplo en Siria, no hay ejército que pueda sostenerse sin el apoyo de su pueblo, y en ese tipo de guerras largas y complejas toda la nación prácticamente se levanta en armas, y todos sus ciudadanos se convierten en soldados porque es necesario reponer a los cientos que mueren.

Las fuerzas armadas en un estado moderno son elemento constitutivo del Poder Nacional y junto a los factores económicos, políticos, sociales y científico – tecnológicos se busca mantener y alcanzar los grandes fines e intereses nacionales. De ninguna manera deben considerarse reserva moral ni columna vertebral, son importantes en la medida que cumplen su rol constitucional dentro de un proyecto nacional. No son autónomas ni existen para sí mismas. Lamentablemente a lo largo de la historia republicana la evolución del Estado nacional ha sido muy discontinuo gracias a la imposición de poderes fácticos y traiciones de todo tipo que han colocado permanentes emboscadas precisamente al desarrollo de ese Estado Nacional.

Al parecer, los miembros de las FF.AA desconocen detalles importantes de nuestra historia militar, y si reciben historia en sus aulas seguramente la están recibiendo de manera fragmentada. Los dos grandes hitos de la creación del ejército ecuatoriano son la guerra de independencia que fue una guerra anti-imperialista llevada a cabo no por un ejército estrictamente profesional, sino popular, o se olvidan que el Gran Mariscal Antonio José de Sucre se forjó en el mismo campo de batalla, y el otro hito fue la Revolución Liberal, que fue eso, una revolución social y política liderada por otro guerrero no profesional e igualmente internacionalista y anti-imperialista como fue Eloy Alfaro que lideró un ejército popular, la montonera. En Ecuador y en otras partes los grandes hitos militares la forjaron los pueblos alzados en armas, por lo que si alguna columna vertebral existe en una nación, es el pueblo todo.

Fue la democracia griega la que inventó la idea de que un Estado debe estar regido por una constitución y un gobierno elegido por su pueblo, y los griegos creían que esta realidad político-social e institucional, hacía de los soldados un instrumento superior en el combate, porque sencillamente defendían la voluntad mayoritaria de su pueblo, esta noción se materializaba en la palabra libertad. Tras el concepto abstracto de libertad, para los griegos había el principio moral de que son mejores soldados los que luchan por su propia salvación y la de sus familias, y no por aristócratas o sacerdotes. El pueblo griego de esa época era un pueblo en armas.

Con las distancias históricas del caso, las comparaciones no son equivalencias, al igual que sucedió en 1995, al pueblo ecuatoriano en 1942 no se le permitió luchar hasta el fin, cuando estaba completamente dispuesto a hacerlo y esto no fue consecuencia únicamente de una dirigencia política caracterizada por su actitud antipatriótica, sino también por la ausencia de líderes militares dispuestos a perseverar de todas las formas en la defensa de la integridad territorial. Cuánto hubiese cambiado el resultado estratégico de la guerra del Cenepa si en ese momento se contaba con otro tipo de liderazgo político y militar. La historia tiene muchos ejemplos de pueblos que fueron capaces de epopeyas bélicas cuando estuvieron bien conducidos. El éxito militar en el Cenepa fue importante, pero frustrante ya que finalmente se consagró el Protocolo de Río de Janeiro.

Los afanes politiqueros y desestabilizadores de determinados militares en servicio pasivo le están haciendo mucho daño a la institución y lo que están consiguiendo es separarla de su pueblo, atentando seriamente a la defensa nacional ya que como lo señalaba Clausewitz, la defensa requiere de la trilogía gobierno-pueblo-ejército. También es necesario señalar que el gobierno de la Revolución Ciudadana no ha sabido llevar a cabo una Revolución en Asuntos Militares (RAM), entendiendo este concepto de manera amplia y tal como se la conoce en la respectiva teoría especializada. A ello ha contribuido la designación de ministros/as de defensa que poco conocen de esa materia. En este aspecto se ha perdido una gran oportunidad, y la historia ha sido intocada en el sentido de que hasta el momento Eloy Alfaro ha sido el único en llevar a cabo una Revolución en Asunto Militares en el caso ecuatoriano.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.