¿Has sentido alguna vez que hay cosas sobre las que quieres saber lo que alguien piensa, que serían importantes para las vidas de mucha gente, y sobre las que sin embargo no tienes forma de obtener respuesta? No puedes llamar a esa persona y preguntarle, no tiene un teléfono al alcance del público. No puedes […]
¿Has sentido alguna vez que hay cosas sobre las que quieres saber lo que alguien piensa, que serían importantes para las vidas de mucha gente, y sobre las que sin embargo no tienes forma de obtener respuesta? No puedes llamar a esa persona y preguntarle, no tiene un teléfono al alcance del público. No puedes apelar a su amistad, no te conoce. No puedes enviarle un correo electrónico, no tiene una dirección accesible de correo. En el caso de algunas personas, por supuesto, ese aislamiento del público es razonable. Toma a Hugo Chávez, por ejemplo. Sería ridículamente inmanejable que tuviera un teléfono o una dirección de correo públicas. Pero, ¿qué pasa si tienes preguntas y no sólo no puedes obtener respuestas directas sino que tampoco puedes obtener respuesta por medio de intermediarios, porque esos caminos son laberintos que no conducen a ninguna parte? En la mayoría de los casos, el pragmatismo debería prevalecer sobre una insistencia fútil. A otra cosa.
Pero, ¿qué pasa si la persona cuyas opiniones quieres conocer es no sólo increíblemente abierto en su actitud y tiene reputación de ser extraordinariamente sagaz sino que también forma parte de un proceso que busca apoyos de todas partes? ¿Y qué pasa si crees -aunque puedas estar equivocado- que tus preguntas encajan perfectamente con la visión de esa persona, en este caso con Chávez o con otras personas que participan en la Revolución Bolivariana, y que son preguntas claves para obtener tu completo apoyo y el de otros? En ese caso, ¿por qué no lanzar tus preguntas al ciberespacio y esperar que haya suerte? Como mínimo, eso debería ser mejor que lanzar una botella al océano con un mensaje, incluso aunque la corriente que la llevara fuera rápida.
Hugo Chávez dice que quiere construir el socialismo del siglo XXI. Critica las relaciones de mercado. Echa pestes del capitalismo. Sus enfoques innovadores sobre la toma de decisiones económicas y la participación política, y el hecho de dar prioridad a una educación y sanidad radicalizadas así como a otros servicios sociales, también suscitan grandes esperanzas. Pero, más allá de las proclamas y de las políticas a corto plazo, ¿adónde se dirige la Revolución Bolivariana? ¿Cuáles son sus principales objetivos institucionales y cuál es el horizonte para llevarlos a cabo? Ésas son cuestiones sobre las que querría respuestas por parte de cualquiera que pueda tenerlas.
Hugo Chávez se autodefine como agresivamente anticapitalista. ¿Pero qué significa eso? En relación a la economía, ¿rechaza la Revolución Bolivariana la propiedad privada de los medios de producción? ¿Rechaza el mercado? ¿Rechaza la remuneración capitalista que incluye obtener beneficios derivados de la propiedad, ingresos según la capacidad de negociación o incluso según el rendimiento? De forma similar, ¿rechaza la Revolución Bolivariana la típica división capitalista del trabajo según la cual aproximadamente el 20% de la fuerza de trabajo monopoliza todos los puestos de decisión mientras el 80% restante efectúa tan sólo labores aburridas, repetitivas y subordinadas?
Dado que Chávez está en contra de ciertas instituciones capitalistas concretas, ¿tiene una idea de cómo reemplazarlas en un sistema económico mejor? Dicho de otra forma, si la Revolución Bolivariana quiere el socialismo del siglo XXI, me pregunto qué significa eso. Por ejemplo, ¿qué es lo que Chávez rechaza del socialismo del siglo XX? ¿ La planificación central tal como la vimos en la Unión Soviética? ¿El mercado tal como funcionaba en Yugoslavia? ¿O la típica división socialista del trabajo establecida en Rusia, Yugoslavia y China que era básicamente la misma que en el capitalismo? ¿Son las normas de remuneración que implantaron aquellos socialismos, que si bien eliminaron el beneficio por la propiedad mantuvieron la remuneración según el poder y el rendimiento?
Igualmente, sean cuales sean las formas en que Chávez está en desacuerdo con el «socialismo del siglo XX», ¿qué propone establecer en Venezuela en su lugar? ¿Qué busca la Revolución Bolivariana para la economía? ¿Cree que los trabajadores y consumidores deberían influir en las decisiones económicas en proporción a cuánto les afectan, es decir, cree en la auto-gestión? ¿Cree que los consejos de consumidores y trabajadores, en lugar de los gestores o de los consejos de administración, deberían ser la base de la toma de decisiones económicas en cada empresa? ¿Cree que debería haber un proceso descentralizado y participativo de planificación por parte de estos consejos de trabajadores y consumidores, incluyendo una negociación cooperativa de la asignación de recursos, en vez de una asignación de recursos dirigida desde arriba o por la competencia del mercado? ¿Cree que los trabajadores deberían ser remunerados por cuánto y cuán duro trabajan, o por hacer trabajos más onerosos, más que por la propiedad, el poder o incluso el valor de su trabajo? Si estas características no forman parte de los objetivos de la Revolución Bolivariana, entonces ¿cuáles se prefieren para el futuro de Venezuela y por qué?
Chávez ha sido muy explícito sobre la democracia no sólo en la esfera política sino sobre que la gente sea literalmente capaz de intervenir en su propia vida social y política. ¿Rechaza la Revolución Bolivariana, además de la economía capitalista, los alienantes enfoques de las tareas de gobierno típicamente jerarquizadas de hoy día en el mundo? ¿Busca la Revolución Bolivariana algo fundamentalmente diferente en el área política con sus asambleas de base y, si es así, cuáles son los valores y características que prefiere? De la misma forma, ¿hay alguna exploración, por el momento, de nuevos enfoques en cuanto al cumplimiento y aplicación de las leyes? ¿ Tiene la Revolución Bolivariana una agenda revolucionaria sobre cuestiones de género y de raza? ¿Está buscando sólo mejores políticas de género y raza o hay también cambios fundamentales previstos en instituciones relacionadas en estos temas? ¿Tiene la Revolución Bolivariana ideas sobre cuáles podrían ser esos cambios y, si no, tiene algún método para llegar a ellos?
También me gustaría saber más de los medios de comunicación bolivarianos. Los principales medios de comunicación de masas venezolanos son controlados por una minoría de la población y no reflejan en ningún modo las necesidades o deseos del pueblo venezolano. De hecho, en la medida de que son capaces, intentan obstruir los cambios positivos. Me pregunto cuál es la visión de Chávez de cómo deberían estar organizados los medios en un futuro mejor. Y me pregunto cuáles son sus planes para los medios en Venezuela. Parece, visto desde lejos, que el enfoque bolivariano hacia la educación, sanidad, medios y otras áreas ha sido construir un conjunto de estructuras paralelas a las existentes actualmente (por ejemplo, la Universidad Bolivariana, las clínicas sanitarias, la emisora de TV) con la idea de que estas nuevas instituciones sustituyan con el tiempo a las viejas. ¿Es ése el plan? ¿Existe preocupación sobre el hecho de que el terreno de juego en que se disputa esta competición entre lo viejo y lo nuevo sea el del mercado que, por supuesto, no favorece la solidaridad, ni la sociabilidad, etc.?
Como todos sabemos, Estados Unidos se vale constantemente de su riqueza para doblegar las relaciones internacionales en formas abrumadoramente dirigidas a preservar y aumentar el poder y riqueza de las elites estadounidenses, sea cual sea el sufrimiento que eso impone a los demás. Venezuela también parece estar utilizando sus recursos en el terreno internacional iniciando diversas pautas de intercambio comercial, préstamos, etc. Me pregunto qué guía esos actos. Cuando Venezuela intercambia petróleo y demás productos con otros países, ¿intenta Chávez utilizar los precios de mercado o tiene una actitud diferente sobre qué debería determinar las tasas de intercambio y, si es así, como parece que lo es, cuál es esa actitud? ¿Ha pensado Chávez explícitamente en utilizar los recursos venezolanos para ayudar a organizar proyectos y movimientos activistas en el mundo que busquen cambios deseables hacia la justicia, la equidad, etc.? ¿Podría Chávez imaginar que Citgo [empresa distribuidora de gasolina en EE.UU., de propiedad venezolana. N. Del T.] se convirtiera en un caballo de Troya a favor del control por parte de los trabajadores y de un sistema de producción con orientación social en EE.UU.? ¿Podría Chávez imaginar donar directamente fondos a algunos movimientos, o quizá hacerlo mediante pagos por derechos de autor u otros acuerdos con Venezuela?
Y, finalmente, para entender la evolución en el tiempo de la Revolución Bolivariana, me pregunto cuáles consideran Chávez y otros activistas venezolanos que serán los más importantes y ejemplares logros de Venezuela en los próximos 5 o 10 años. Y me pregunto también cómo encajan los puntos de vista de Chávez, y del resto de funcionarios del gobierno bolivariano, líderes sindicales y activistas de base, con los de la población en general. ¿Está el pueblo en sintonía con los cambios o simplemente los observa? ¿Está dispuesto a tomar iniciativas o sigue la corriente sin impulsar sus propias iniciativas?