Para la nueva presidente de la Academia de Cine española, Ángeles González-Sinde, la piratería de películas por Internet o el descenso de taquilla no es lo más preocupante, sino la falta de variedad de productos y el cierre de cines en el centro de las ciudades. «Nos hemos desacostumbrado a ver cine diferente al de […]
Para la nueva presidente de la Academia de Cine española, Ángeles González-Sinde, la piratería de películas por Internet o el descenso de taquilla no es lo más preocupante, sino la falta de variedad de productos y el cierre de cines en el centro de las ciudades.
«Nos hemos desacostumbrado a ver cine diferente al de las grandes producciones de Hollywood», dijo González-Sinde en una entrevista esta semana con Reuters.
La guionista y directora opina que la costumbre de ir al cine ha cambiado y cambiará aún más, que las películas se ven en casa, en DVD, y que conoce a mucha gente que se descarga películas en Internet.
«Internet te permite repescar películas que se te han escapado – porque apenas duran en cartelera – o, por ejemplo, los clásicos que ya están descatalogados», afirmó, sobre el fenómeno de las descargas en la Red en el que al parecer España está a la cabeza de Europa, según sus datos.
«La cuestión es ver cómo la gente del cine nos podemos beneficiar económicamente de eso. Porque ahora estamos siendo proveedores de contenido, pero gratis», añadió, aclarando que ahora todo el beneficio es para las operadoras de ADSL y las empresas de tecnología.
González-Sinde, de 41 años, sustituyó en diciembre a la actriz Mercedes Sampietro al frente de la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas de España (AACCE) tras ganar una votación.
Para la ganadora de un Goya por mejor dirección novel por «La suerte dormida» y por el guión de «La buena estrella», uno de los principales problemas de la pérdida de recaudación y espectadores del cine es la distribución.
«El cine europeo y el cine español ha dejado de llegar a muchas ciudades de España», dijo, apuntando que en el último año se han cerrado 200 cines en el centro de las ciudades y se han abierto multicines en las afueras que programan en su mayoría películas de evasión.
Sin embargo, González-Sinde no es pesimista sobre la salud del cine español, y defiende que si no se ve más no es porque sea malo, sino porque no llega al público.
«No me creo que a la gente le encanten las series españolas y no le guste el cine español, que no es tan diferente, generalmente son los mismos actores, y muchas veces los mismos guionistas», señaló.
Como ejemplo puso éxitos de público como las obras de Alex de la Iglesia «El día de la bestia» o «La Comunidad», las obras de «Torrente» o la comedia «El otro lado de la cama».
«Empecemos por lo menos por llevar el cine donde no llega», dijo con la esperanza de que la nueva Ley del Cine que se está ultimando suponga un espaldarazo notable para la industria cinematográfica española y europea.
Pero estos días, González-Sinde se encuentra enfrascada en la vorágine de los premios Goya de la Academia, que se entregan el domingo 28 de enero, y en la posterior mudanza a la nueva sede en la calle madrileña de Zurbano, un edificio remozado y cedido por el Ministerio de Cultura para dar más categoría a la AACCE.
LOS PREMIOS GOYA Y ALMODOVAR
Entre los presentes en la gala de los Goya de este año ellos cabe esperar la presencia del disidente Pedro Almodóvar, cuya obra «Volver» opta a 14 premios, entre ellos el de mejor película, mejor director y mejor actriz para Penélope Cruz.
La nueva presidenta de la Academia confesó su predilección por películas como «Volver», que tratan cuestiones que gustan a las mujeres, frente a las de acción como «Alatriste», la otra gran favorita de la ceremonia, con 15 candidaturas.
«‘Volver’ es una película que está llena de mujeres, mientras que ‘Alatriste’ creo que sale una, y la otra va disfrazada de hombre», dijo.