En este artículo el autor analiza la última encuesta publicada por Datafolha, que pronostica una victoria rotunda de Lula en primera vuelta en las elecciones presidenciales que se celebrarán en octubre de 2022.
Desde que Lula retornara a la vida política con plenos derechos ya se publicaran diferentes encuestas que lo situaban como favorito de cara a las elecciones presidenciales frente a Bolsonaro; no obstante, la encuesta de DataFolha, que es la primera que se hace de forma presencial, ofrece un resultado mayoritariamente favorable a Lula, que ganaría primera vuelta.
En la primera vuelta, Lula obtendría un 41%, frente al 23% de Bolsonaro. En segunda vuelta, Lula obtendría un 52%, mientras que Bolsonaro obtendría un 32%. Los demás candidatos en conjunto obtendrían el 47%, frente al 41% de Lula. El 9% votaría en blanco y solamente el 4% estaría indeciso. Asimismo, las posibilidades de que surja un candidato de la llamada “tercera vía” es nula, un hecho que hace que la polarización Lula/Bolsonaro tienda a proyectarse hasta la elecciones del año 2022.
Bolsonaro es quien recibe un mayor rechazo, el 54%; 18 puntos más que Lula. El apoyo que obtiene Bolsonaro se reduce a un escaso 24%.
En el nordeste de Brasil Lula tiene un apoyo del 56%, mientras que Bolsonaro es rechazo por un 62%. Lula es la primera opción de todos los candidatos entre el segmento de población con menor renta, incluidos los desempleados. Entre quienes recibieron el auxilio de emergencia, Bolsonaro tan solo obtiene el 22% de los apoyos.
El único grupo donde Bolsonaro tiene mas apoyo que Lula es el de los empresarios, con el 49%, mientras que Lula tan solo consigue un apoyo del 26%. Además, entre los evangélicos Lula tan solo supera por un punto a Bolsonaro: 34% frente a 33%, neutralizando la ventaja de que gozaba Bolsonaro. Por el contrario, Bolsonaro recibe un apoyo mayor entre los hombres que entre las mujeres. Por último, queda decir que Lula triunfa en todas las regiones de Brasil, incluida la región sur, la más conservadora del país.
Con una tendencia al alza en cuanto a apoyos, Lula superaría fácilmente los 6 puntos que la suma de los restantes candidatos (la suma de todos excepto Bolsonaro y el propio Lula), tiene hoy de ventaja sobre él: 47% a 41%; aún más en cuanto empiece la campaña electoral, pues durante la campaña Lula suele conseguir nuevos apoyos electorales. Lula tiende a triunfar en primera vuelta, según la encuesta ahora realizada con una proyección hacia las elecciones de octubre del 2022.
Los datos de esta encuesta son increíblemente similares a los del 2018, cuando Lula lideraba todas las encuestas, triunfando en primera vuelta. No se produjo ese resultado, como se sabe, porque el ex presidente estaba preso, impedido de concurrir a las elecciones, a causa de una condena sin pruebas, como el mismo poder judicial acaba de admitir.
La encuesta muestra que el empresariado, que tiene sus intereses atendidos por el gobierno Bolsonaro, sigue siendo el único bastión del actual presidente, que ha perdido la ventaja de que gozaba entre los evangélicos a favor de Lula.
Bolsonaro vive su peor momento desde el comienzo de su mandato debido a varias razones: el desgaste por la situación descontrolada de la pandemia, la comisión parlamentaria de investigación sobre las responsabilidades derivadas del genocidio provocado por la pandemia y la presencia activa de Lula en la vida política brasileña. Lula, por su parte, goza del mismo apoyo que ya tuvo en el pasado, con tendencia alcista y con perspectivas reales de volver a ser de nuevo el presidente de Brasil.