Ortodoxos y heterodoxosLa discusión sobre la crisis ha quedado sustituida por interpretaciones de la reactivación. Los ortodoxos (FIEL, CEMA) atribuyeron el derrumbe del 2001 al shock externo, al gasto público y a la insuficiencia de las reformas. Ahora explican la recuperación por la excelente coyuntura internacional, la conversión del déficit presupuestario en superávit y el […]
Ortodoxos y heterodoxos
La discusión sobre la crisis ha quedado sustituida por interpretaciones de la reactivación. Los ortodoxos (FIEL, CEMA) atribuyeron el derrumbe del 2001 al shock externo, al gasto público y a la insuficiencia de las reformas. Ahora explican la recuperación por la excelente coyuntura internacional, la conversión del déficit presupuestario en superávit y el legado de inversiones que dejó el neoliberalismo.
Pero olvidan que el excedente fiscal no ha sido nunca una condición de la reactivación y que el tipo de inversiones realizadas en los 90 define el perfil regresivo de la recuperación. La convertibilidad coronó la demolición de una vieja estructura industrial, sin generar alternativas más sustentables. Se ha probado que el aluvión neoliberal resulta devastador cuando golpea a una economía de frágil industrialización mediana.
Los heterodoxos (Plan Fénix) atribuyeron la crisis a la convertibilidad, el retiro del Estado y la financiarización. Por eso explican la reactivación por la devaluación, la multiplicación de políticas activas y el resurgimiento industrial.
Pero estos tres cambios provocaron una enorme transferencia de ingresos a favor de la clase capitalista. El secreto de la reactivación no radica en ningún milagro heterodoxo, sino en una cruda recuperación de la tasa de ganancia que solventaron los trabajadores. Este carácter regresivo de la devaluación y de la intervención estatal a favor de los industriales es rigurosamente enmascarado.
La discusión entre ortodoxos y heterodoxos se concentra en los instrumentos de la macroeconomía (tipo de cambio, financiamiento público), en la gestión ministerial (poca o mucha presencia) y en las reglamentaciones aduaneras e impositivas. El debate evita cualquier análisis de la economía capitalista como un proceso social controlado por las clases dominante. Por eso también se ignoran las contradicciones de este sistema.
Los términos ortodoxia y heterodoxia son a veces utilizados para caracterizar las medidas en pugna entre el bloque acreedores externos -privatizadas- y el alineamiento de exportadores-industriales. Lavagna buscó el equilibrio. Propició paquetes antiinflacionarios con subas de los encajes bancarios (ortodoxia) y penalizaciones de los carteles (heterodoxia) y negoció la deuda con pagos al FMI (ortodoxia) y quitas a los restantes bonistas (heterodoxia). Su sucesora Micelli parece acentuar la heterodoxia en ciertos planos (por ejemplo el control de precios) y la ortodoxia en las definiciones claves de la política económica (superávit fiscal).
Pero no hay que perder de vista el carácter antidistribucionista de la orientación prevaleciente. Las mixturas de monetarismo y keynesianismo que aplica el gobierno son tan variadas como la combinación de regulación y mercado en las medidas que adopta. Pero lo que no figura en la agenda gubernamental es la mejora del ingreso popular.
La redistribución no es una «deuda pendiente» que se resolverá con el paso del tiempo. Es una decisión política que requiere afectar los intereses de las clases dominantes. Como el gobierno defiende a este sector preserva el modelo regresivo.
El proyecto burgués
El discurso oficial convoca a reconstruir la burguesía nacional. Pero no intenta rehabilitar a los capitalistas de los años 50, ni resucitar un modelo de mercado interno, acumulación endógena y políticas financieras autónomas. Este proyecto quedó enterrado con las crisis que remodelaron la estructura industrial. El programa actual es afín al nuevo grupo de empresas asociadas con el capital extranjero, volcadas hacia la exportación y especializadas en bienes primarios o insumos industriales. Este sector constituye una burguesía local, pero ya no nacional
Kirchner busca reforzar a este segmento bajo el impacto de la crisis del 2001. De esta experiencia ha deducido la necesidad de contar con interlocutores más arraigados en el país y menos predispuestos a la fuga de capital.
Pero su proyecto choca con el alto grado de extranjerización que caracteriza a la economía. El control foráneo pasó del 50,5% (1993) al 80,2% (2003) del valor agregado de las principales 1000 compañías. Las compañías locales no solo han perdido peso frente a los grupos extranjeros norteamericanos y europeos, sino también ante las firmas latinoamericanas. Entre las mayores compañías de la región solo figuran dos argentinas, frente a 23 mexicanas y 20 brasileñas.
Pero los grandes grupos locales -Techint, Bago, Impsa, Molinos, Bulgheroni- no son insignificantes y están embarcados en un intenso programa de reconversión. Buscan compensar con negocios en el exterior la pérdida de mercados que provocó la pauperización local.
Este sector capitalista es fanático de la flexibilización laboral, hostil a los aumentos de salarios y enemigo de las conquistas sociales. No es afín a la redistribución y es una ilusión suponer que podría ser integrado a un proyecto popular. Quiénes sólo conciben el porvenir del país en términos de futuro burgués evitan registrar este dato y prefieren elucubrar opciones de capitalismo imaginario.
Vitalidad del movimiento social
El curso de la economía está condicionado por el creciente impacto de las demandas sociales. Los trabajadores organizados perciben que existe un amplio espacio para lograr conquistas y mayores salarios. Han recuperado visibilidad y protagonismo. Su intervención refuta el mito de la pasividad de los asalariados frente a los sujetos sociales que dominaron el escenario de la rebelión del 2001 (desocupados, ahorristas).
Se está demostrando que el alto desempleo no impone un obstáculo infranqueable a la lucha salarial. En un marco de recuperación de las tradiciones combativas resulta posible la confluencia de los excluidos con los incluidos. Una nueva generación que no carga con las frustraciones de los 90 encabeza la resistencia social.
El resurgimiento de esta lucha desconcierta al gobierno, irrita a la derecha y desespera a los capitalistas. Todos esperaban la desaparición de cualquier vestigio del 2001 y por eso observan con fastidio la continuidad de la protesta. En lugar de discutir la validez de los reclamos, Kirchner objeta su oportunidad y las formas de la petición. Propicia, campañas mediáticas para inducir el aislamiento, la división y el debilitamiento de la lucha social. Pero esta acción persiste y es el factor clave del nuevo período, porque condiciona todos los proyectos de la clase dominante. No es sencillo estabilizar un modelo regresivo en un contexto de movilización.
La etapa cambió, pero la combatividad persiste. La ocupación callejera permanente ha sido reemplazada por secuencias de protestas. Las huelgas y las manifestaciones sustituyen a los piquetes y a las cacerolas. Se refuerza la sindicalización, subsiste el movimiento organizado de los desocupados y se multiplican distintas formas de acción barrial y juvenil. La reacción inmediata frente a la injusticia se mantiene como un rasgo dominante, en un clima de repudio al neoliberalismo y al imperialismo norteamericano.
Los protagonistas de la resistencia son los sujetos potencialmente capacitados para desenvolver un programa económico popular. La aplicación de un conjunto de medidas impositivas y financieras permitiría inaugurar un proceso real de redistribución del ingreso. Pero este proyecto requiere construir nuevas alternativas políticas.
Cada economista puede definir qué lugar ocupará en este escenario. Una opción es ubicarse en el campo de los dominadores y utilizar los conocimientos acumulados para facilitar los negocios y la buena vida de los privilegiados. La otra posibilidad es colocarse en el terreno de la mayoría popular. En este ámbito la realización profesional y el desarrollo intelectual se ensamblan con el compromiso político y el aprendizaje militante. Este sendero ofrece una inédita posibilidad de elaboración teórica y experimentación práctica. La oportunidad para actuar en este terreno existe y hay que aprovecharla.
Notas: 1) Los capítulos «Salarios deprimidos y Desempleo y empobrecimiento» desarrollan ideas expuestas en Katz Claudio. «Dos proyectos de redistribución». EDI-Publicación de los Economistas de Izquierda, n 1, abril 2005, Buenos Aires. «Como hacer el shock redistributivo». Revista Nuevo Rumbo, n 2, septiembre de 2002. -Los datos adicionales provienen de Clarín: 8-10-05, 19-8-05. Complementos en: Clarín: 12-12-05, 3-10-05, 8-12-05, 11-11-05, 21-5-05, 23-4-05. Página 12: 18-9-05,19-2-05. Complementos en Página 12: 9-10-05, 10-10-05, 2-6-05, 23-10-05. 2) Los capítulos «Superávit e impuestos» y «El drama provisional» desarrollan ideas expuestas en los documentos colectivos del EDI, «Documento dos Economistas de Esquerda. Argentina: un programa de recuperacao popular da economía. Revista da Sociedade Brasileira de Economia Política, n 14, junho 2004, Sao Paulo y «Propuestas socialistas para superar la crisis, Herramienta, n 20, Herramienta, Buenos Aires, Argentina, invierno 2002. -Los datos han sido extraídos de: Clarín: 27-4-05, 12-2-05, 30-4-05. Complementos en: Clarín: 28-1-05, 5-1-05, 6-11-05,13-11-05, 15-2-05, 3-1-05, 9-10-05. Página 12: 25-6-05. Complementos en Página 12: 21-11-04, 4-8-05, 2-5-05, 6-11-04. También: La Nación: 24-10-04, 24-5-05. 3) Los capítulos «La cancelación con el FMI», «Dos grupos en conflicto» y «Legitimidad y maniobras» desarrollan ideas expuestas en Katz Claudio. -«La deuda después del default». Periferias, año 9, n 12, primer semestre de 2005, «Quién gana con el canje». El Correo de Económicas, n 2, año 1, semestre de 2005 y «Los efectos de pagarle al FMI». Argenpress, 21-12-05 4) Los capítulos «Contratos y atribuciones» y «Los dilemas energéticos» desarrollan ideas expuestas en Katz Claudio. «Quebrantos públicos, negocios privados», Questión, año 3, número 30, diciembre 2004, Caracas, Venezuela. -Los datos han sido extraídos de: Clarín: 6-4-05, 6-10-05, 1-10-05. Complementos en: Clarín, 22-06-05, 15-5-05, 17-5-05,17-3-05. Página 12: 15-9-05. Complementos en: 3-11-05, 20-9-05,13-5-05,30-4-05,16-3-052-3-05,3-4-05,5-10-04,16-5-05, 10-11-05. La Nación: 21-4-05 -El capítulo «Reconstitución de las finanzas» desarrolla ideas expuestas en Katz Claudio. «Una expropiación explícita». Medidas económicas: ganadores y perdedores. Realidad Económica n 186, marzo 2002. Buenos Aires, «Salvar a los acreedores». Suplemento Cash, Página 12, 18-8- 2002, «Hay que estatizar la banca». Página 12, 28-4- 2002, «Confiscaciones sin anestesia». Suplemento Cash. Página 12, 24-02. -Complementos en: Clarín: 24-10-04, 30-10-04, 5-7-05, 8-7-05,28-11-04. Página 12: 30-10-04, 8-12-05. 13-11-04. 5) El capítulo «La inflación del modelo» desarrolla ideas expuestas en: Katz Claudio. «La inflación del modelo». Realidad Económica n 213, julio-agosto 2005, Buenos Aires. «La inflación y los salarios». Nuestra Lucha, n 20, 28-4-2005, Neuquén. «Carestía y pobreza». Nuestra Lucha, n 13, 27-4- 2004, Neuquén. -Los datos adicionales han sido extraídos de: Clarín: 11-12-05. Página 12: 8-12-05, 2-12-05, 4-12-05. La Nación: 4-12-05, 30-11-05. 6) Los «capítulos: «Crecimiento segmentado y baja inversión y la prioridad exportadora» desarrollan ideas expuestas en Katz Claudio «Otra variante del modelo». Coyuntura y Desarrollo.. FIDE, n. 289, octubre 2003, Buenos Aires. «El modelo sigue en pie». Propuesta n 652, 2 -10-2003, Buenos Aires, «Ellos o nosotros. La necesidad de discutir un programa de salida popular». Revista Theomai, invierno 2002, Quilmes. -Los datos adicionales han sido extraídos de: Clarín: 18-3-05, 10-7-05. Complementos en Clarín: 5-9-05, 19-9-05, 6-10-05. La Nación: 18-9-05, 2-10-05. Página 12: 10-7-05, 20-10-05 7) Los capítulos «Ruptura y continuidades», «Ortodoxia y heterodoxia» y «Proyecto burgués» desarrollan ideas expuestas en Katz Claudio. «Crisis económica: interpretaciones y propuestas’. Viento Sur, n 58, septiembre 2001, Madrid, «Capitalismo imaginario, negocios reales». Enfoques Críticos, año 1, n 1, noviembre-diciembre 2005, Buenos Aires, ‘El misterio argentino’. Marx vive. Dominación, crisis y resistencias en el nuevo orden mundial, Universidad Nacional de Colombia, Bogotá, «Burguesías imaginarias y existentes». EDI-Publicación de los Economistas de Izquierda, número 1, abril 2005, Buenos Aires. -Los datos adicionales han sido extraídos de La Nación: 11-9-05, Clarín: 7-11-05, Complementos en: Página 12: 5-8-05, 2-8-05, 7-8-05, 20-12-05, 27-11-05 8) El capítulo «Vitalidad del movimiento social» desarrolla ideas expuestas en: Katz Claudio. «¿Un gobierno en disputa?». Enfoques Alternativos, n 25, año 3, agosto 2004, Buenos Aires. «El sendero de los de abajo». Enfoques Alternativos, n 22, año 2, marzo 2004, Buenos Aires. «Como domina la clase dominante». Enfoques Alternativos, año 2, octubre-noviembre 2003, Buenos Aires.
Bibliografía: – Alfredo Eric Calcagno y Eric Calcagno (2003) Argentina. Derrumbe neoliberal y proyecto nacional. Le Monde Diplomatique, Buenos Aires, 2003. – Arceo, Enrique; «El ALCA, acuerdos, confrontaciones y proyectos de sociedad» en Revista Realidad Económica n° 200, Buenos Aires, noviembre-diciembre 2003. – Aronskind, Ricardo (2001) ¿Más cerca o más lejos del desarrollo? Transformaciones económicas en los 90, Buenos Aires, Libros del Rojas-UBA. – Artana, Daniel; Dorn, James (compilers) (2003), Crisis financieras internacionales ¿qué rol le corresponde al gobierno? FIEL and CATO Institute,The Cato Institute. – Basualdo, Eduardo (2003) «Las reformas estructurales y el Plan de Convertibilidad durante la década de los noventa. El auge y la crisis de la valorización financiera» en Realidad Económica Nº 200, noviembre – diciembre de 2003, Buenos Aires. – Beinstein Jorge (2004) ‘Estados Unidos en el centro de la crisis mundial’, Enfoques Alternativos nº 27, Buenos Aires, noviembre 2004. – Bermúdez, Ismael (2004) «Mercosur en la crisis internacional» en Boron, Atilio, comp; Gambina, Julio C, comp; Minsburg, Naúm, comp. Tiempos violentos: neoliberalismo, globalización y desigualdad en América Latina Buenos Aires: CLACSO, 2004. – Bour Juan Luis (2002). ‘Reforma, contrarreforma y desempleo en la Argentina’ Contribuciones, No. 4, diciembre 2002, Argentina – Ferrer, Aldo (2004) Recuperación y crecimiento: tiempos e instrumentos de la política económica argentina — En: Comercio exterior – vol.54, no.5 (mayo 2004). – Hopenhayn Benjamín; VANOLI, Alejandro. La globalización financiera: génesis, auge, crisis y reformas. Buenos Aires: Fondo de Cultura Económica de Argentina, 2002. – Jorge Gaggero; Juan Carlos Gómez Sabaini (2003): Argentina. Cuestiones Macrofiscales y Políticas Tributarias. Buenos Aires: CIEPP/Fundación OSDE. – Julio Sevares (2002) Riesgo y regulación en el mercado financiero internacional en Julio Gambina (Compilador) La globalización económico-financiera su impacto en América Latina. – Lo Vuolo, Rubén M. (2003): Estrategia económica para la Argentina. Propuestas. Ciepp / Fundación OSDE / Siglo Veintiuno Editores Argentina. – Lozano, Claudio (2004) ‘Situación salarial, política oficial y distribución del ingreso’, Buenos Aires, Instituto de Estudios y Formación (CTA). – Lucita Eduardo. Una recuperación malsana. Argenpress, noviembre 2005. – Schorr, Martín; Industria y Nación. Poder económico, neoliberalismo y alternativas de reindustrialización en la Argentina contemporánea, Edharsa, Buenos Aires, 2004. – Schvarzer, Jorge; Finkelstein, Hernán (2004) El dinamismo exportador de Brasil: un ejemplo para la Argentina que presenta, también, un problema Universidad de Buenos Aires. Facultad de Ciencias Económicas. Centro de Estudios de la Situación y Perspectivas de la Argentina Buenos Aires: CESPA. – Stglitz, Joseph. 2003. Globalization and its Discontents. Norton, W.W. & Company, Inc. – Stiglitz, Joseph E. Los felices 90: la semilla de la destrucción. Buenos Aires: Taurus, 2003. – Teijeiro, Mario (2005). El FMI como acreedor privilegiado, Centro Argentino de Ingenieros, Buenos Aires, abril de 2005, Disponible en: http://www.cep.org.ar. – Valle, Hector; Marcó del Pont, Mercedes (2004) ‘ Crisis y Reforma Económica ‘- Noticias del País real, Ed. Claves para todos.