La embajadora de Estados Unidos en Ecuador, Heather Hodges, ratificó que el personal norteamericano que labora en la occidental base aérea de Manta dejará las instalaciones en septiembre próximo, tras concluir un convenio que se firmó en 1999. La diplomática estadounidense comentó a la prensa que el gobierno estadounidense no ha definido a qué país […]
La embajadora de Estados Unidos en Ecuador, Heather Hodges, ratificó que el personal norteamericano que labora en la occidental base aérea de Manta dejará las instalaciones en septiembre próximo, tras concluir un convenio que se firmó en 1999.
La diplomática estadounidense comentó a la prensa que el gobierno estadounidense no ha definido a qué país se trasladarán esas operaciones militares antidrogas.
Hodges dijo que está confirmado para septiembre próximo el retiro de personal y logística de la base de Manta, y agregó que Estados Unidos está dispuesto a mejorar las relaciones con Ecuador y aumentar la cooperación bilateral en un marco de respeto mutuo.
Según Hodges, es importante ampliar los temas de interés más allá de la lucha contra el narcotráfico.
Destacó también la necesidad de fortalecer proyectos en torno a las microempresas en beneficio de los ecuatorianos.
Estados Unidos opera la base de Manta, en la costa norte del país, desde 1999, cuando firmó un convenio con el gobierno de Ecuador por diez años, que finaliza el próximo 12 de noviembre, y que el presidente socialista Rafael Correa decidió no renovar.
Los ministerios de Seguridad Interna y Externa, Defensa y Relaciones Exteriores de Ecuador trabajan con una comisión técnica estadounidense para acelerar la salida de los militares norteamericanos de la base.
Se trata de conseguir un traspaso adecuado para que Ecuador asuma plenamente los temas de seguridad, técnicos y operativos de la base de Manta.
El Ministerio de Defensa ha dicho que la comisión conjunta establecerá cómo y cuáles equipos se quedan y cuáles se van del aeropuerto de Manta, donde hasta el momento funciona el Puesto Avanzado de Operaciones (FOL, por sus siglas en inglés) del ejército norteamericano.
El gobierno ecuatoriano confía en que el control de la Base de Manta, donde operan militares estadounidenses desde 1999 para el control del narcotráfico, pueda pasar a manos ecuatorianas el próximo mes de septiembre.