Mensajes filtrados demuestran que Diana Zalazar, la Fiscal General de Ecuador, usa su oficina para atacar a la izquierda — en alianza con los Estados Unidos.
Estamos publicando esta investigación en inglés, español y portugués, en colaboración con Intercept Brasil, un medio de periodismo de investigación sin fines de lucro, que previamente publicó una serie de historias revelando un escándalo, muy similar a este, en Brasil.
Tres balas a la cabeza pusieron fin a una campaña presidencial lanzando a un país y a elementos de Washington DC a una vorágine. Fernando Villavicencio, un carismático político ecuatoriano, había ido ascendiendo durante las elecciones de agosto de 2023, con la promesa de combatir la influencia corrupta de los grupos violentos del narcotráfico. A menos de dos semanas de las elecciones, al salir de un mitin electoral, el candidato se encaminaba a su carro entre una multitud de gente, cuando un asesino lo mató a tiros.
El descarado asesinato sacudió a Ecuador atrayendo la atención internacional hacia las elecciones de la nación sudamericana. Sin prueba alguna, los partidarios de Villavicencio inmediatamente culparon al izquierdista Rafael Correa, quien fungió como presidente desde el 2007 al 2017, y a su partido, por el asesinato del candidato.
A continuación, el gobierno de los Estados Unidos se involucró. Primero, el Departamento de Estado anunció una recompensa multimillonaria por información que condujera a quienes planearon el asesinato. Y después, el FBI envió a un equipo de agentes para investigar el asesinato.
Ahora, mensajes privados filtrados, supuestamente enviados por la Fiscal General ecuatoriana Diana Salazar, y revisados por Drop Site News y The Intercept Brasil, revelan por qué Estados Unidos invirtió tantos recursos en la investigación del asesinato del candidato: de acuerdo a los supuestos mensajes de Salazar, Villavicencio era informante del gobierno estadounidense. Y Salazar, quien aparentemente estaba en contacto cercano con el embajador estadounidense, ayudó a formar la narrativa pública de cómo el partido de izquierda era responsable del asesinato, una maniobra que evitó con éxito que los Correístas regresaran al poder, acelerando dramáticamente el vertiginoso descenso del estado ecuatoriano.
La sensible revelación es una de muchas que surgen de una serie de supuestos chats filtrados entre un ex asambleísta ecuatoriano y una cuenta que él alega pertenecía a Salazar.
Drop Site es el primer medio en inglés con acceso completo a los explosivos chats, que revelan la maquinaria interna de un ataque con fines políticos, en contra del principal partido político de izquierda — todo con el aval de Estados Unidos.
Algunos mensajes han sido reportados por los medios ecuatorianos, quienes en gran medida han trivializado la historia. La prensa extranjera ha ignorado las filtraciones, que ofrecen una mirada poco común e íntima de un ejemplo del modus operandi clandestino de la derecha, respaldada por los Estados Unidos. Este modus operandi, en la última década, ha engañado a medios de comunicación, promoviendo movimientos reaccionarios, reversando logros sociales, y causando estragos políticos en Brasil, Perú, Guatemala, Argentina, Bolivia, Venezuela, Honduras y más allá. A la vez, estos métodos han capturado la atención del expresidente Donald Trump de los Estados Unidos, quien intentó poner al Departamento de Justicia estadounidense en contra de sus adversarios políticos.
Los supuestos mensajes de Salazar ahora son sujeto de una investigación por colegas de Salazar, quien actualmente está enfrentando un juicio político por “incumplimiento de funciones” en la Asamblea Nacional, un proceso principalmente liderado por el partido izquierdista del país. En mayo de este año, un abogado basado en Florida, que representa a un hombre ecuatoriano implicado en una de las investigaciones de Salazar, escribió una carta al Comité Judicial de la Cámara de Representantes y al Departamento de Justicia, diciendo que los mensajes “violan diversas leyes federales” de los Estados Unidos. El abogado recomendó a los Estados Unidos poner a Salazar en “la lista negra” por revelar “información gravemente sensible y confidencial” acerca agencias policiacas estadounidenses.
Salazar y su abogada no respondieron a una solicitud para una entrevista ni a una lista detallada de preguntas acerca de esta investigación de Drop Site e Intercept Brasil. Ella nunca ha negado que los chats le pertenecen, pero Salazar ha dicho que toda esta trama ha sido un circo político, que intenta “contaminar” una de sus investigaciones más importantes. En marzo, cuando el asambleísta empezó a compartir los chats, Salazar dijo en X, previamente conocido como Twitter: “Me mantendré concentrada en lo importante, la desesperación no tiene límite. No desviarán nuestra atención.”
Desde su nombramiento en abril de 2019, Salazar se ha convertido en una de las aliadas más fuertes de Washington en Ecuador, con funcionarios estadounidenses defendiéndola como una guerrera contra la corrupción: el Departamento de Estado le otorgó un premio; y a fines de este año, será galardonada con otro premio del Centro Woodrow Wilson; y Samantha Power, la administradora de USAID, escribió un elogiante perfil de Salazar para la revista TIME. El apoyo de los Estados Unidos es esencial para alguien que no es de izquierda y con aspiraciones políticas. Con la excepción de la presidencia de Correa, las relaciones bilaterales con Ecuador han sido históricamente tan fuertes, que en el año 2000, Ecuador llegó a reemplazar su propia moneda por el dólar.
Salazar ha liderado una serie de procesos judiciales de alto perfil para erradicar, como ella misma ha afirmado, la corrupción en Ecuador, generando un fervor nacional de sentimientos anticorrupción y antipolíticos. Entre los blancos de sus investigaciones se encuentran los tres últimos expresidentes: Rafael Correa, Lenín Moreno, y Guillermo Lasso. (El juicio político, emprendido por sus opositores políticos, acusa a Salazar de retrasar casos, incluyendo los casos vinculados a los ex presidentes derechistas Lasso y Moreno.)
Ahora, los cientos de mensajes privados muestran que Salazar pudo haber revelado información sensible acerca de las investigaciones, asimismo dando credibilidad a las acusaciones de los correistas (aquellos leales al movimiento político de Correa) de que ella ha participado en un patrón de acciones con fines políticos, incluyendo la persecución agresiva de casos vinculando a políticos de izquierda y a la vez, demorando casos que vinculan a políticos de derecha pro-estadounidenses.
Los mensajes, intercambiados con Ronny Aleaga, un hombre de confianza, que anteriormente pertenecía al partido de Correa, ponen en duda la ética e imparcialidad de Salazar. La relación entre Aleaga y Salazar, aparentes rivales políticos, sigue siendo una fuente de misterio e intriga en Ecuador. Aleaga estuvo casado durante la relación, pero ahora está pasando por un amargo divorcio. Aleaga le comentó a Drop Site que su relación no era romántica, sino de íntima confianza. Independientemente de cual sea el caso, los mensajes, en donde el supuesto contacto de Salazar se registra como “Seño,” se leen como los de dos personas cercanas que intercambian información política, con la relación enredándose mientras el papel de Aleaga en las investigaciones de Salazar va fluctuando. En una entrevista, Aleaga afirmó que no sabía por qué Salazar estaba compartiendo información sensible.
“Tanto usted como yo, que lo cuento, me confundo,” le dijo Aleaga a Drop Site. “Si éramos adversarios políticos, ¿por qué había esa comunicación, o esa afinidad de la conversación? No lo sé.»
Aleaga le proporcionó a Drop Site conversaciones intercambiadas en una plataforma de mensajes privados y anónimos que él grabó y guardó. Drop Site y The Intercept Brasil también accedieron a otros chats confidenciales, provenientes de una investigación criminal separada. Revisamos más de 1,500 mensajes privados, que abarcan principalmente desde marzo de 2023 hasta marzo de este año.
Diana Salazar, la actual Fiscal General del Estado, 2017. Photo by RODRIGO BUENIA/AFP via Getty Images.
La publicación de estos mensajes se da en un momento decisivo en la historia ecuatoriana. No hace mucho, Ecuador era en muchos sentidos la envidia de Latinoamérica. Hoy en día, con el derrumbe de la economía, con el gasto social devastado, y la violencia política resultado de un crimen organizado empoderado, están acabando con la popularidad del actual presidente de derecha, un heredero de una multimillonaria fortuna bananera.
Mientras la narcoviolencia expone el desmoronamiento político del país, dos figuras intentan definir el momento: el actual presidente Daniel Noboa, quien ha optado por un enfoque militarizado de mano dura, respaldado por los Estados Unidos para combatir el crimen organizado, y Salazar, quien continúa alterando el orden político con investigaciones que, según ella, intentan eliminar la corrupción y el tráfico de drogas.
Inevitablemente, el cambio tan dramático de la suerte nacional ecuatoriana tiene múltiples causas. Pero el destino de Ecuador sigue un patrón particular, que en años recientes ha venido a perturbar a muchos países de la región, muchas veces con el apoyo secreto del gobierno de los Estados Unidos, y beneficiando a las empresas estadounidenses y a sus aliados locales de derecha.
Estas son las supuestas revelaciones de gran alcance que vienen de los chats filtrados:
- Salazar pudo haber demorado una investigación acerca de empresarios vinculados al expresidente de derecha, Guillermo Lasso, para perjudicar a candidatos de izquierda durante las elecciones anticipadas de 2023.
- Salazar admitió que el gobierno estadounidense no quería que el partido Movimiento Revolución Ciudadana (RC) de Correa, ganara en las elecciones de 2023. “Quieren la cabeza de RC,” escribió “Seño.”
- Salazar le advirtió a Aleaga acerca de una inminente investigación sobre su presunta corrupción y lo alentó a huir de Ecuador antes de su orden de arresto.
- Salazar afirmó que Fernando Villavicencio, el candidato presidencial que fue asesinado, era informante del gobierno de los Estados Unidos, antes de alentar a Aleaga a que se convirtiera en testigo colaborador de la fiscalía estadounidense.
- De acuerdo a los mensajes, Salazar supo que un grupo criminal había sido responsable del asesinato de Villavicencio. A pesar de saber esto, la oficina de Salazar manejó la teoría de que el asesinato había sido orquestado por Rafael Correa y sus aliados, permitiendo así que circularan acusaciones en contra de Correa, y potencialmente jugando un papel decisivo en las elecciones de 2023.
- Salazar alegó que el FBI borró información confidencial del teléfono de Villavicencio, durante la investigación del asesinato por parte de la agencia estadounidense, antes de entregar el contenido a la oficina de Salazar, a lo que “Seño” se refirió como “fraude procesal.”
- Salazar podría estar utilizando su cargo para castigar a un destacado ex juez, quien actuó en contra de intereses policiales del gobierno estadounidense.
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“Voy a Procesar Después de Elecciones”
Aleaga ha dicho públicamente que entre 2021 y principios de 2024, él y Salazar sostuvieron una relación “secreta.” A lo largo de este periodo, él dice, intercambió mensajes con Salazar a través de una aplicación llamada Confide, que elimina los mensajes poco después de ser leídos. Mientras Aleaga recibía mensajes, él utilizó otro teléfono para grabar video de los chats entrantes. Un análisis forense, ordenado por Aleaga y revisado por Drop Site, confirma que los mensajes provenían del celular personal de Aleaga.
Antes de la segunda ronda de las elecciones, del 15 de octubre de 2023, Salazar asistió a una cena en la residencia del embajador de los Estados Unidos. Más tarde, “Seño” envió mensajes a Ronny Aleaga con detalles.
Ella reveló en los mensajes a Aleaga, que habían tres oficinas separadas del FBI a cargo del caso Villavicencio: Nueva York, Houston y Miami.
10/9/2023 7:00:44 AM
Seño: Esto es heavy. Hay 3 oficinas de fbi investigando el tema. 3 oficinas federales. División Miami, NY y Houston.
[Translation: This is heavy. There are 3 FBI offices investigating the matter. 3 federal offices. Miami division, NY, and Houston.]
Ella añadió en un texto que a los Estados Unidos les preocupaba que los Correístas estuvieran subiendo en las encuestas, y que pudieran regresar al poder.
Minutos después, “Seño” afirmó que Villavicencio había sido informante del gobierno de los Estados Unidos. En los chats, “Seño” menciona que siete sospechosos, acusados de haber participado en el asesinato de Villavicencio, los mismos que fueron asesinados días antes en prisión, iban a ser enviados a Nueva York por haber asesinado“a un informante del gobierno” estadounidense.
10/9/2023 7:04:52 AM
Seño: Es más a los detenidos los iban a llevar a NY porque mataron a un informante del gobierno usa
[Translation: Moreover, the detainees were to be sent to NY because they killed an informant of the U.S. government.]
Durante esa misma conversación, “Seño” compartió con Aleaga detalles del testimonio de un supuesto testigo, quien se especulaba estaba al tanto de la planificación, detrás de bambalinas, del asesinato de Villavicencio. Los abogados representando a la familia de Villavicencio no respondieron a preguntas detalladas para este artículo. Según “Seño,” “efectivamente fueron los líderes de Los Lobos” quienes ordenaron el asesinato de Villavicencio, planeado con un mes de anticipación. Los Lobos son uno de los grupos criminales más grandes de Ecuador, supuestamente aliados con el poderoso Cártel Jalisco Nueva Generación de México, y son conocidos por tráfico de drogas, la minería ilegal, y otros actos criminales.
En los mensajes, ella aclara que dos líderes de medio rango de Los Lobos, Carlos Edwin Angulo Lara, alias El Invisible, y Darío Gabriel Suárez Bedón, alias El Chino Onda, estuvieron detrás del asesinato de Villavicencio. Angulo Lara acaba de ser condenado a 34 años en prisión por su papel en el asesinato. Suárez Bedón, aunque ha sido implicado en el caso, no ha sido formalmente vinculado al proceso, y actualmente está en prisión por el asesinato de un abogado ecuatoriano de alto perfil.
La noticia de que Los Lobos estaban detrás del asesinato, y no el partido de Correa, pudo haber jugado un papel decisivo en las elecciones, sin embargo, públicamente, Salazar permitió que se mantuviera su filtración anterior que implicaba a Correa.
10/9/2023 6:53:15 AM
Seño: Que esto planificaron un mes atrás, que era un político de alto valor y que como habían tratado de hacer esto en junio y no pudieron ni querían fácilmente. Por eso ingresa el invisible, originalmente el que estaba encargado de hacer todo era el Chino algo, quien mandó a matar a Harrison Salcedo.
10/9/2023 7:14:37 AM
Seño: Efectivamente fueron los líderes de los lobos
10/9/2023 7:15:09 AM
Seño: Cuando ya quedaron muy en evidencia les hicieron salir a desmentir. Pero ese Chino y el Invisible son de los lobos
10/9/2023 7:16:01 AM
Seño: Ellos hicieron llamada con todos, los 30 que participaron para darles instrucciones y les explicaron la necesidad de desaparecerlo’
Desde prisión, El Invisible se hizo cargo de la trama de El Chino, quien previamente había ordenado el asesinato de Harrison Salcedo, ex-abogado del ex-vicepresidente Jorge Glas y de miembros de la banda de Los Choneros, los principales rivales de Los Lobos. Además, “Seño” dice que El Chino y El Invisible hicieron llamadas y dieron las instrucciones a los demás.
10/9/2023 7:16:46 AM
Seño: Ellos dieron la orden desde la carcel
A pesar de tener esta información semanas antes de las elecciones, Salazar nunca contradijo públicamente la filtración de su oficina implicando a Correa. Éste no es el único caso de aquella época, en la cual Salazar habría manejado acusaciones de forma tan lenta.
En diversos mensajes enviados a Aleaga, “Seño” reveló su sesgo anti-correista en lo relacionado a uno de los casos más importantes en el cual Salazar había trabajado, que implicaba al entonces presidente derechista Guillermo Lasso. Los chats filtrados revelan que ella explícitamente demoró el caso por razones políticas. Un texto del 29 de septiembre muestra a la supuesta cuenta de Salazar mencionando que solamente avanzaría el caso después de la segunda vuelta de las elecciones del 2023, para evitar así favorecer al partido Movimiento Revolución Ciudadana (RC) en las elecciones generales. En esas elecciones, el derechista Noboa derrotó a Luisa González de RC con un márgen de sólo 3.66 por ciento.
9/29/2023 12:58:14 PM
Seño: Tráfico de influencias, de hecho voy a procesar después de elecciones, antes no para no ayudarles a Uds, GL [then-president Guilermo Lasso] ya sabe que me lo cargaré a su cuñado.
Lasso fue elegido en 2021. Dos años más tarde, miembros de su círculo íntimo (incluyendo su cuñado, un empresario de alto perfil) fueron acusados de encabezar un plan de corrupción, y de tener vínculos con grupos albaneses de crimen organizado. La Asamblea Nacional inició el proceso oficial de juicio político, pero con el fin de evitarlo, Lasso declaró una “muerte cruzada,” una medida constitucional que disolvió la Asamblea Nacional y desencadenó elecciones generales.
Los mensajes filtrados sugieren que la embajada de los Estados Unidos compartía la visión anti-correista acerca de la situación política en Ecuador. La embajada, según textos un día antes, estaba preocupada por el desempeño del partido RC en las encuestas y de su posible victoria en las elecciones.
9/28/2023 9:07:58 PM
Seño: Quieren la cabeza de RC
9/28/2023 9:22:32 PM
Seño: Dicen que uds están subiendo
Días después, “Seño” reiteró la postura de la embajada de los Estados Unidos con respecto a las elecciones.
10/9/2023 7:01:15 AM
Seño: Ellos saben que si uds ganan todo queda ahí.
¿Quién le teme a Rafael Correa?
En 2007, cuando Rafael Correa asumió la presidencia, los Estados Unidos advirtió de que se uniría a temibles personajes de la izquierda como Fidel Castro, Hugo Chávez y Evo Morales, llevando al país hacia una dictadura comunista.
En el 2006, la entonces embajadora, Linda Jewell, envió un comunicado al Secretario de Estado de los Estados Unidos, posteriormente publicado por WikiLeaks, advirtiendo que “ninguno de los principales contendientes afectaría tan significativamente los intereses [del gobierno de los Estados Unidos] como Rafael Correa.”
«Sería de esperarse que Correa busque ansiosamente unirse al grupo de Chávez-Morales-Kirchner, los líderes nacionalistas-populistas sudamericanos,” dijo la embajadora.
Correa estrechó sus vínculos con Cuba, Bolivia y Venezuela, criticando el dominio estadounidense en la región, particularmente la presión del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial para reducir impuestos, regulaciones, y servicios públicos. En cambio, Correa duplicó el gasto social y redujo sustancialmente la desigualdad, a la vez que recortó el déficit nacional y redujo la influencia del FMI. También se deshizo de una base militar estadounidense en Ecuador.
A pesar de la crisis financiera mundial de 2008 y del colapso de los precios del petróleo en 2014, Ecuador continuó creciendo económicamente superando en forma significativa el de décadas anteriores, y fue clasificado como uno de los países más seguros de Latinoamérica. Correa dejó el cargo en 2017, socavando la crítica estadounidense de que se había convertido en un dictador, y respaldó a Lenín Moreno, quien ganó las elecciones con facilidad gracias a su campaña correísta.
Mientras se habla de Donald Trump como un político no intervencionista, el equipo al que contrató para manejar su política latinoamericana tenía estrechos vínculos con fuerzas de derecha atrincheradas en Miami, quienes habían estado trabajando con republicanos desde la época de Reagan, para derrocar a gobiernos socialdemócratas y sustituirlos con personajes fuertes de derecha, más moldeables a los intereses estadounidenses y corporativos. En Brasil, Bolivia y Honduras, movimientos de derecha respaldados por los Estados Unidos, participaron en fraudes electorales y/o en persecuciones de adversarios políticos, como en el caso de Luiz Inácio Lula da Silva en Brasil. Los Estados Unidos también respaldaron abiertamente complots de cambio de régimen, incluido un exitoso golpe de estado en 2019 en Bolivia, y un intento fallido en Venezuela.
En Ecuador, el acercamiento a la derecha se produjo con un sorprendente giro de Moreno, quien, una vez en el poder, repudió el movimiento que lo había llevado al poder, aliándose con los Estados Unidos y la derecha ecuatoriana. Se recortó el gasto social y se distribuyó el poder entre una facción oligarca vinculada al narcotráfico. La violencia y la inestabilidad aumentaron en tándem con el crimen organizado. El gobierno de los Estados Unidos aumentó su apoyo a Ecuador, proporcionando financiación, recursos, y capacitación de seguridad.
Moreno se deshizo de muchas de las reformas progresistas implementadas por Correa. Los correístas se separaron de Moreno y organizaron a RC, un nuevo partido político socialdemócrata. Desde entonces, miembros de RC han acusado al gobierno ecuatoriano, bajo las presidencias de Moreno, su sucesor Lasso, y ahora el actual presidente Daniel Noboa, de llevar a cabo ataques políticos para impedir que RC regrese democráticamente al poder.
El caso más agresivo de una supuesta persecución con fines políticos, fue el ataque al mismo Correa en el 2020, acusándolo de aceptar sobornos. Correa obtuvo asilo en Bélgica, pero fue condenado en Ecuador con pruebas irrisoriamente escasas. Fue sentenciado in absentia de “influencia psíquica” sobre otros funcionarios públicos, y condenado a ocho años de prisión.
Esto nos lleva a Diana Salazar y el enfoque principal de esta investigación. Salazar es una mujer afroecuatoriana de Ibarra, una pequeña capital provincial cerca de la frontera con Colombia. Comenzó su carrera en la Fiscalía General del Estado en 2001 y ascendió hasta llegar a ser la Fiscal General del Estado en 2019, momento en el cual Moreno estaba reformando el poder judicial para purgar a elementos pro-Correa. Salazar ha ganado fama por sus investigaciones audaces y amplias para supuestamente erradicar la corrupción y redes de narcotráfico en el país.
Sin embargo, ambos han florecido, a medida que el bandazo derechista del país ha perdido el equilibrio. A partir de la presidencia de Moreno, la violencia únicamente ha empeorado con el aumento del apoyo de seguridad de los Estados Unidos, la cual alimenta la guerra contra las drogas de Ecuador, siguiendo un patrón bien establecido en otros países latinoamericanos. En enero, bandas de narcotraficantes atrajeron la atención mundial cuando llevaron a cabo una fuga de prisión y ocuparon una estación de televisión mientras se transmitía en vivo. Luego, el gobierno de Noboa sorprendió a la comunidad internacional cuando oficiales invadieron la embajada mexicana en abril para sacar a Jorge Glas, el vicepresidente de Correa, a quien México había ofrecido asilo político. En los últimos años, la delincuencia se ha disparado y la economía se ha derrumbado, un resultado predecible, pero sorprendentemente rápido, de la política de austeridad que ha agotado la capacidad del estado ecuatoriano.
A lo largo de este período tumultuoso, Salazar ha mantenido un cargo importante, con gran poder para atacar — o perpetuar — los problemas de la nación. “Ella es una pieza de los grupos de derecha en el país,” dijo Carla Morena Álvarez Velasco, docente-investigadora del Instituto de Altos Estudios Nacionales (IAEN) y especialista en temas de seguridad. «Y es una pieza clave, también, del gobierno norteamericano en este país».
En los últimos años, persecuciones cuestionables en contra de políticos de izquierda se han convertido en un patrón en toda Latinoamérica, basadas en un manual de estrategias creado y respaldado por el gobierno EE.UU. En Perú y en Argentina — entre otros — un patrón de persecuciones respaldadas por los Estados Unidos, pusieron en la mira a políticos de izquierda mientras preparaban el camino para un cambio de régimen. Las revelaciones de Salazar también reflejan uno de los ejemplos más atroces de mala conducta fiscal respaldada por los Estados Unidos en la región: reportajes explosivos publicados por The Intercept Brasil en 2019, basados en otra filtración de mensajes, revelaron graves violaciones éticas por parte de un juez y fiscales brasileños, quienes, coludidos entre sí, perpetraron ataques políticos contra Lula da Silva, para impedir su regreso a la presidencia en 2018. El juez, Sergio Moro, aclamado por los Estados Unidos como un campeón anticorrupción, ha caído en desgracia después de que la Suprema Corte usó evidencia de su parcialidad para desestimar la sentencia que condenó a Lula a prisión.
De acuerdo a los mensajes revisados por Drop Site y The Intercept Brasil, la práctica de iniciar persecuciones con fines políticos, respaldado por los Estados Unidos, ha llegado a Ecuador.
“Diana Salazar ha sido la punta de lanza de la más brutal persecución y la principal autora de la judicialización de la política en Ecuador,” dijo Andrés Arauz, el secretario ejecutivo de Revolución Ciudadana, el partido izquierdista de Correa en Ecuador. “La persecución política contra el ex presidente Rafael Correa, para impedir su presencia y participación en la vida política del Ecuador, ha sido particularmente cruenta y le ha hecho un gran daño al progresismo, a la democracia y al Estado de Derecho en nuestro país.”
“La Fiscal Salazar, desde su designación irregular y hasta los últimos allanamientos politizados, ha sido un claro instrumento del proyecto político y geopolítico de “descorreización” y de lucha contra el progresismo en Ecuador,” Arauz añadió.
Informantes, Acusaciones y el FBI: El asesinato de Villavicencio
El asesinato de Fernando Villavencio tuvo un gran impacto en el resultado de las elecciones de 2023. Debido a que Villavicencio había sido muy crítico del correísmo y del partido RC, sus opositores políticos — incluyendo el candidato que sustituyó a Villavicencio — comenzaron a alimentar el rumor de que Correa había orquestado el asesinato. Con éste rumor, Luisa González, la candidata de RC que parecía que iba a triunfar, comenzó a caer en las encuestas. Esto ayudó a que Daniel Noboa, el heredero de una fortuna bananera, de 35 años, ganara las elecciones para la presidencia.
Nunca hubo pruebas de que los perpetradores del asesinato de Villavicencio tuvieran vínculos con RC. La viuda y la hermana de Villavicencio, inicialmente dijeron que el estado era parcialmente responsable y culparon al gobierno de Lasso por no brindarle suficiente protección a Villavicencio, a pesar de las múltiples amenazas contra su vida que había recibido. Además de los siete sospechosos, que posteriormente fueron asesinados en prisión, un sospechoso herido, que fue detenido en el lugar de los hechos, murió poco después bajo custodia policial y en circunstancias misteriosas.
Aproximadamente una semana antes de la segunda ronda de las elecciones presidenciales del 20 de octubre, la viuda de Villavicencio, y el reemplazo de Villavicencio, dijeron haber recibido una filtración de la oficina de Salazar, acerca del testimonio de un supuesto “testigo protegido,” que culpaba a Correa y a “su gobierno” por el asesinato de Villavicencio. (Correa había estado fuera del gobierno desde 2017). Salazar nunca contradijo públicamente esta supuesta filtración de su oficina, a pesar de haber negado en el pasado, la veracidad de otros rumores acerca del caso.
La acusación sacudió las elecciones y provocó que la izquierda cayera en las encuestas. La cuestión de la responsabilidad llegaría a dominar la conversación en torno a las elecciones, y la implicación de que el partido de Correa había estado involucrado, ayudó a hundirlos en las urnas a mediados de octubre. “Seño” afirmó que ella y el embajador de los Estados Unidos en Ecuador, Michael Fitzpatrick, tuvieron conversaciones cándidas y privadas acerca de la elección y el asesinato de Villavicencio. El Departamento de Estado de los Estados Unidos no respondió a preguntas detalladas para esta investigación.
Durante mucho tiempo hubieron rumores de que Villavicencio, un ex-periodista que luego fue elegido para la Asamblea Nacional, era un informante del gobierno estadounidense. En una entrevista en el 2016, Villavicencio hizo bromas sarcásticas acerca de sus vínculos con la CIA y el FBI. También fue acusado en Ecuador de usar información confidencial para maniobras políticas en contra de adversarios.
El testimonio del “testigo” de los mensajes de octubre, fue leído parcialmente y en voz alta, en una audiencia el 27 de febrero de este año, y coincide con lo que “Seño” le había enviado a Aleaga meses atrás. En su testimonio, el testigo dijo que El Chino Onda, el líder de medio rango de la pandilla Los Lobos, había estado a cargo del complot.Un plan anterior para matar a Villavicencio había sido abandonado por considerarse demasiado difícil de ejecutar y los involucrados no estaban dispuestos a continuar.Después de esto, El Invisible, otro líder encarcelado de medio rango de la pandilla de Los Lobos, asumió el liderazgo del plan, con su propio equipo de sicarios colombianos. Cuando oficiales le preguntaron al testigo acerca de los motivos del asesinato, él declaró que se hizo por temor a que Villavicencio endureciera las penas en caso de ganar las elecciones.
“Seño” le dijo a Aleaga que estaba muy consternada por lo que los Estados Unidos pudieran enterarse en la examinación del teléfono de Villavicencio. Esto también fue soportado por otros acontecimientos. En noviembre, miembros de la familia de Villavicencio declararon públicamente que entregaron el teléfono de Villavicencio directamente al FBI, debido a la falta de confianza en las instituciones ecuatorianas, para llevar a cabo la investigación. Posteriormente, el FBI entregó a los funcionarios ecuatorianos un dispositivo, supuestamente con los contenidos del teléfono.
Las conversaciones entre Aleaga y “Seño” de noviembre, sugieren que Salazar podría haber recibido el contenido del teléfono en un volcado de datos del FBI, pero que sospechaba que el FBI había borrado información. “Fraude procesal,” escribió.
11/14/2023 9:48:37 PM
Seño: En justamente lo que dije a fiscales y fbi aquí
11/14/2023 9:48:54 PM
Seño: Que por más información relevante esa será prueba cuestionada
11/14/2023 9:54:30 PM
Seño: EntregRon un volcado. Igusl ya la tengo
11/14/2023 9:54:31 PM
Seño: Una copia de la nube
11/14/2023 9:54:33 PM
Seño: No el equipo
11/14/2023 9:54:34 PM
Seño: Y ahí pudieron borrar
11/14/2023 9:54:36 PM
Seño: Fraude procesal
El comité legislativo que investigó el asesinato de Villavicencio emitió un informe con sus conclusiones a mediados de junio. En él encontraron que Lasso y la Policía Nacional pudieron haber cometido infracciones penales y administrativas al no proteger a Villavicencio. El comité señala que Lasso no cumplió con sus deberes constitucionales y que el asesinato de Villavicencio podría haberse evitado. El informe determinó además que la entidad penitenciaria había cometido “graves omisiones” en su trabajo, dejando que los acusados del asesinato de Villavicencio fueran asesinados en prisión.
Durante una audiencia en junio, la fiscalía reprodujo un vídeo pregrabado, del mismo testigo protegido, al quien su testimonio habia sido filtrado antes de la elección, declarando que había un precio de 200.000 dólares por la cabeza de Villavicencio y que “el gobierno de Correa” había ordenado el asesinato. Sin embargo, el testigo había salido meses antes en un video publicado en TikTok, diciendo que lo habían presionado para incriminar a Correa.
La viuda de Villavicencio ha comenzado a dudar de la solidez de la investigación de Salazar, señalando contradicciones entre el testimonio del testigo protegido y las propias declaraciones de Salazar. La viuda de Villavicencio dijo que Salazar había afirmado que el contrato para matar a Villavicencio valía un millón de dólares, y que asimismo incluía otro asesinato: el de la propia Salazar. La viuda de Villavicencio también afirmó en junio de tener conocimiento de entrevistas grabadas del FBI con los siete sospechosos asesinados, quienes supuestamente serían sacados del país como parte de un acuerdo. Esto coincide con el mensaje de “Seño” a Aleaga, en el que dice que los detenidos iban a ser llevados a Nueva York por haber matado a un informante estadounidense.
A mediados de julio, cinco personas fueron sentenciadas por el asesinato de Villavicencio, todos vinculados a la banda de Los Lobos y sin nexos conocidos con RC. A un año del asesinato de Villavicencio, su familia sigue disgustada con Salazar, demandando una persecución más agresiva.
Aleaga, el asambleísta, a principios de este año, fue implicado formalmente en una investigación anticorrupción de alto perfil, llamado el Caso Metástasis, en el cual funcionarios públicos y miembros del poder judicial han sido acusados de aceptar sobornos de un narcotraficante, a cambio de decisiones favorables. Pero antes de la acusación formal en contra de Aleaga, “Seño” le advirtió de su inminente arresto, aconsejándole huir del país para evitar el arresto.
«A ver. Le pido, váyase del país. Póngase a buen recaudo, es la única manera, ya después ve que hacer,” le escribió a Aleaga, insinuando que le ayudaría a organizar su defensa: «Debemos armar estrategia».
En una entrevista, Aleaga le dijo a Drop Site que la relación con Salazar era una montaña rusa de emociones. Un día, dice él, ella era amigable y le ofrecía ayuda, asegurándole un resultado favorable en su caso. Otros días, ella le decía que las pruebas en su contra eran abrumadoras, y lo amenazaba e intimidaba. Aleaga dice que comenzó a grabar todos los mensajes para su propia protección redoblando sus esfuerzos por grabar los mensajes cuando la fiscal le comenzó a amenazar e intimidar en relación con el caso Metástasis y las investigaciones hacia el partido RC. Aleaga ha declarado públicamente que los cargos en su contra son falsos. Ha huido de Ecuador donde ahora es considerado un prófugo de la justicia.
En marzo de este año, Aleaga comenzó a hacer públicas sus revelaciones en una serie de vídeos publicados en X, anteriormente conocido como Twitter, y en Instagram. Y a pesar de que generaron interés mediático y controversia en Ecuador, en gran medida han sido ignorados por los medios estadounidenses.
Salazar no ha negado públicamente que los chats le pertenecen. Aleaga solicitó un análisis forense de sus videos por la empresa independiente Digital Forensics Now (DFN), basada en Florida, en respuesta a sus denuncias de intimidación, acoso y chantaje por parte de Salazar. Drop Site revisó el análisis forense a principios de este año.
“El alcance de la investigación consistió en investigar dos teléfonos celulares y analizar las comunicaciones e interacciones entre la cuenta de usuario ‘RA’ (Sr. Aleaga) y ‘Seño’ (Señora Diana Salazar) a través de la aplicación de mensajería encriptada Confide,” señala el informe forense de la DFN. “Con base en la evidencia disponible, el DFN concluye que hubo comunicaciones grabadas entre las cuentas de ‘RA’ y ‘Seño’ durante un período prolongado discutiendo política, casos criminales, y otros asuntos personales.”
Aleaga también dice que es necesario revelar estos mensajes privados para que el público ecuatoriano comprenda quién ocupa uno de los puestos de más poder en el país.
“No digo que soy perfecto, no digo que no me he equivocado, sí,” dice Aleaga. “Si no estuvo bien el hecho de exponer conversaciones privadas, creame que no existía, y no existe, ninguna otra forma de exponer quién es realmente Diana Salazar.”
Ecuador, desde 2017, bajo el liderazgo de derechistas opositores a Correa y el partido RC, ha emitido órdenes de arresto en contra de Correa y de varios políticos destacados de la RC en relación a las investigaciones de Salazar.
“[Salazar] sirve a los intereses de la derecha,” dijo Álvarez, profesora y experta en temas de seguridad ecuatoriana. “Que ahora es Noboa. Pero ayer fue Lasso y antes de ayer, Lenin Moreno. Es como una línea, hay una continuidad ideológica y de valores, que trasciende a los personajes.”
El “Influjo psíquico” de Correa
Correa estuvo en la presidencia de 2007 a 2017, durante un período en el que Ecuador fue visto como una isla segura de paz, rodeada de vecinos con conflictos prolongados. En 2009, el gobierno de Correa se deshizo de una base militar estadounidense en Ecuador, una medida que el actual presidente, Daniel Noboa, señala como la culpable del aumento del narcotráfico y la violencia.
En 2019, la oficina de Salazar inició una investigación denominada “Sobornos 2012-2016,” en la cual acusa a Correa de encabezar una red corrupta de funcionarios, que recaudaron más de 7 millones de dólares en sobornos. Los correístas alegan que el caso se basó en pruebas muy débiles. Durante la investigación, una asistente de Correa entregó un cuaderno que, según dijo, incluía evidencia contemporánea de que Correa había aceptado sobornos. Pero pronto se demostró que el cuaderno no se había impreso hasta el 2018, varios años después de que se habían tomado las supuestas notas. Aún así, fue aceptado como evidencia clave.
A pesar de la supuesta evidencia débil del caso, el propio Correa fue declarado culpable de “influjo psíquico” sobre funcionarios públicos, conminándolos a aceptar sobornos. Fue condenado in absentia a ocho años de prisión (por dicha brujería) y se le prohibió participar en la política nacional durante el término de su condena. Bélgica le concedió asilo y, debido a la naturaleza política del caso, Interpol se ha negado a emitir una alerta roja para arrestarlo. Correa apeló el veredicto de culpabilidad y, aunque se esperaba que fuera un proceso largo, el proceso total de la apelación duró únicamente 17 días. Los jueces, que habían sido designados por Moreno, ratificaron el veredicto.
Otro caso, el caso Sinohydro, acusó a una red de funcionarios, incluyendo al expresidente Moreno, de recibir sobornos a cambio de permitir que un proyecto hidroeléctrico continuara operando. Ese caso aún permanece abierto y es parte de una táctica de comunicación pública de la derecha para acusar a Correa de vender el país a China — de nuevo, una estrategia que se alinea claramente con los intereses de los Estados Unidos en la región.
El procesamiento de Correa polarizó profundamente a Ecuador, y muchos acusaron a Salazar de perseguir el caso por razones políticas, señalando la velocidad del proceso. El caso en contra de Correa y sus aliados está cerrado, pero los otros casos, que implican al expresidente Moreno y a los aliados del expresidente Lasso, aún permanecen abiertos.
Caso Metástasis
En el caso Metástasis, una de las investigaciones más importantes en la carrera de Salazar, la fiscal ha perseguido a una gran cantidad de funcionarios, acusándolos de haber recibido sobornos del narcotraficante Leandro Norero, quien ayudaba a lavar dinero mientras mantenía conexiones con varias organizaciones criminales, incluyendo Los Lobos. Norero, quien supuestamente dio dinero a funcionarios para continuar dirigiendo sus operaciones desde prisión, fue asesinado ahí en 2022. Salazar ha dicho que el caso Metástasis en Ecuador es “el más grande de la historia contra la corrupción y el narcotráfico”.
Salazar ha basado el caso en gran medida en mensajes de texto supuestamente encontrados en los teléfonos de Norero. Recientemente, un testigo en el caso, quien supuestamente era compañero de celda de Norero, brindó testimonio diciendo que Correa había tenido videollamadas con Norero mientras él estuvo en prisión, pero no se han presentado pruebas concretas de las llamadas.
Antes de huir del país, Aleaga fue formalmente implicado en el caso Metástasis. Fue acusado de corrupción en marzo, casi dos años después de ser fotografiado en una piscina en Miami con otro prófugo ecuatoriano vinculado a Norero. Los fiscales de la oficina de Salazar han acusado a Aleaga de ser “El Ruso,” un personaje mencionado en algunos de los mensajes de Norero. También lo han acusado de actuar en representación de Norero en la Asamblea Nacional. Aleaga ha categóricamente rechazado la acusación. “Seño” le dijo a Aleaga que ella creía que el partido RC lo estaba abandonando y lo trató de convencer de que se convirtiera en testigo cooperante, no sólo para el gobierno ecuatoriano, sino también para el gobierno de los Estados Unidos. En los mensajes, Salazar supuestamente le explica que tiene conexiones con fiscales en Florida y que, al cooperar con ambos países, su sentencia podría reducirse al 90 por ciento.
3/13/2024 4:26 PM
Seño: Le interesaría hacer cooperación eficaz?
3/13/2024 4:29 PM
Aleaga: Cuáles serían las condiciones?
3/13/2024 5:11 PM
Seño: Bajar la pena.
De hasta el 90%
Ingreso al sistema de protección
Su organización lo dejó solo
Sálvese
3/13/2024 5:15 PM
Aleaga: Pero ni siquiera soy culpable 😢 Y cooperador sobre que tema? Mejor dicho a quien tengo que tirar al agua ?
3/13/2024 6:23 PM
Seño: Jamás digo lo que tiene que decir.
Simplemente Ud elige lo que considere
3/13/2024 7:38 PM
Aleaga: Le soy honesto, mejor esta la propuesta de sus amigos gringos.
3/13/2024 8:03 PM
Seño: Tengo que conversar con los fiscales, dependiendo del Estado donde esté. Florida es el más fácil porque ahí tengo los fiscales y quienes trabajan conmigo.
3/13/2024 8:03 PM
Seño: Podría pedir que haga una cooperación conjunta. Pida eso ud y me llaman. Yo allá no puedo hacer acciones individuales.
El caso Metástasis se ha enfocado principalmente en funcionarios judiciales considerados aliados de Correa, con el pretexto de erradicar la corrupción en el poder judicial del país. En diciembre de 2023, el lanzamiento de Metástasis, por parte de Salazar, provocó otro escándalo cuando arrestaron a Wilman Terán, el presidente del Consejo de la Judicatura, una autoridad de defensoría del pueblo encargada de supervisar a la Fiscalía y a las cortes. Mientras estuvo en el cargo, Terán encabezaba un proceso para rediseñar una sección del poder judicial en el país. Los opositores de Salazar dicen que la evidencia que vincula a Norero con funcionarios, incluyendo a Terán, es escasa, lo que fomenta acusaciones de supuestos motivos políticos.
En las últimas semanas ha surgido un nuevo escándalo por parte del testimonio de Terán durante una audiencia en su contra. Él acusó a Salazar de enviar “emisarios” para meterle presión, y que fallara en contra de la apelación de Correa de 2020, y que ahora tiene la sospecha de que le ocultaron evidencia durante el proceso de apelación.
Como parte de las audiencias en contra Terán, él ha presentado nueva evidencia — mensajes que él dice haber intercambiado con Salazar usando un teléfono que los fiscales nunca confiscaron. Como en el caso de Aleaga, Terán solicitó una revisión forense de su celular por un grupo de expertos. El informe está disponible públicamente.
En su testimonio, Terán acusó a Salazar de compartir información confidencial acerca de investigaciones criminales y dijo que los mensajes, incluidos en el informe forense, comprueban la falta de ética por parte de la fiscal.En una serie de mensajes en el informe, con fecha de 11 de mayo de 2023, Salazar informó a Terán acerca de una investigación por parte de su oficina, relacionada a una decisión del Consejo de la Judicatura. En esa decisión, el Consejo de la Judicatura suspendió a un juez de la Corte Nacional de Justicia, el máximo tribunal de Ecuador.La decisión del Consejo se produjo a raíz de una denuncia presentada por un hombre anteriormente sentenciado por haber participado en el crimen organizado.Posteriormente, Salazar le dijo a Terán en los mensajesque él y otros tres miembros del Consejo de la Judicatura estaban siendo investigados y serían notificados formalmente al día siguiente.
El 12 de mayo, mensajes demuestran que Salazar supuestamente le notificó a Terán que los fiscales allanarían las oficinas del Consejo de la Judicatura, lo cual ocurrió ese mismo día. La investigación acerca de la suspensión y destitución del juez nacional, que luego se convertiría en un caso penal aparte, en el que están implicados Terán y otros, alega irregularidades en la decisión del Consejo de la Judicatura de suspender al juez.
Sin embargo, cuando Terán le preguntó a Salazar por qué la destitución del juez estaba bajo un escrutinio tan intenso, cuando otros jueces habían sido destituidos por razones similares, la explicación de la fiscal no mencionó irregularidades. Más bien, de acuerdo a los mensajes que Terán compartió con el tribunal, ella dijo que el caso involucraba a personas importantes y una investigación paralela en los Estados Unidos. En esencia, Terán y los demás estaban siendo castigados por haber “dado paso a la queja de un investigado en una trama de corrupción que involucra a USA y Ecuador,” se lee en uno de los supuestos mensajes de Salazar.
En los mensajes anteriores, del 11 de abril, Salazar le envió a Terán un mensaje de una persona no identificada, informándole acerca de una audiencia en el caso de lavado de dinero de Leandro Norero. Este dice que la fiscal, Lidia Sarabia; la Unidad de Análisis Financiero y Económico (UAFE); y la embajada de los Estados Unidos “están sumamente preocupados por las irregularidades del juez. Podría usted llamar al Presidente del Consejo de la Judicatura para expresar su preocupación. Me indicaron que el director de la UAFE también le va a llamar. Nosotros por nuestro lado también.”
Los medios de comunicación ecuatorianos han ignorado en gran medida el contenido de los mensajes de Terán, prestando poca atención a los sorprendentes paralelismos con los mensajes con Aleaga. En cambio, la prensa ecuatoriana ha estado, en gran medida satisfecha con la negación de la fiscal sobre las acusaciones.
En una reciente entrevista, Salazar dijo que el fallo legal de Terán en su contra, es un intento de retrasar su caso para que — cuando la fiscal se ausente para atender su juicio político — haya impunidad en su caso.
La semana pasada, la oficina de Salazar allanó a la Corte Nacional de Justicia para investigar a dos juezas de alto rango. Esas juezas habían emitido un fallo permitiendo el traslado de Terán a otra prisión, para continuar armando su defensa legal. La Asociación Ecuatoriana de Magistrados y Jueces, que propugna a favor de la independencia judicial en el país, rechazó fuertemente la redada.
Los ecuatorianos se están preparando para nuevas elecciones en el 2025. La primera ronda de votaciones en Ecuador está programada para febrero de 2025, en las que Noboa se postulará de nuevo para la presidencia.
Fuente: https://www.dropsitenews.com/p/mensajes-filtrados-revelan-como-una?utm_medium=web&sfnsn=wa