«No hay otra opción política más que el comunismo»

-¿Constituye una diferencia esta presentación de candidatura del comunismo?

-No, porque nos presentamos con la Alianza Patriótica Socialista, donde varios sectores sociales y campesinos están representados. Nos postulamos para casi todos los cargos, menos para la presidencia.

-Ya que apoyan a Lugo, ¿es así?

-Finalmente pudimos llegar a un acuerdo para apoyarle, en base a dos puntos fundamentales, que son la reforma agraria y la lucha por la verdadera soberanía del Paraguay, en especial por el reclamo de Itaipú y Yacyretá.

-A pesar de apoyar a Lugo, la izquierda va dividida en estas contiendas, ¿por qué?

-Evidentemente hay un contagio de los partidos tradicionales, especialmente en el problema de los cargos electivos. Pero el acuerdo de al APS está basado en ejes programáticos y, luego, en las candidaturas.

-¿Por qué la Alianza no pudo llegar a acuerdos con Tekojoja o el P-MAS?

-Porque no coincidimos en los puntos programáticos y en el deseo sincero por los cambios revolucionarios.

-Entonces no fue solo un problema de cargos…

-No, también de principios ideológicos.

-¿Cómo cuáles?

-Hay sectores que plantean otras formas de llegar al poder.

-¿Qué propuestas tiene la Alianza Socialista para los ciudadanos?

-Queremos terminar con la política de dependencia hacia las potencias extranjeras. Tenemos que acabar con el hambre, la miseria, la falta de salud. Tampoco hay seguridad ni fuentes de trabajo para los paraguayos, y a los que trabajan se les persigue.

-¿Qué plantean para solucionar todos estos problemas?

-Dejar de cumplir la receta del Fondo Monetario Internacional y poner término a la invasión y contaminación del imperialismo.

-¿Pero cómo se crearán fuentes de trabajo?

-Utilizando nuestras reservas internacionales, ya que se dejarían de pagar a los organismos mundiales, y se destinarían a la producción y a incentivar la organización social. También regulando el trabajo; el Estado recibe poco dinero de la producción de soja y de la venta de cabezas de ganado, el dinero es irrisorio, hay que regular eso.

-¿Pretenden también fortalecer las empresas públicas?

-Por supuesto, con la participación de la gente, hace falta un saneamiento de las empresas estatales.

-¿También estatizar las empresas privadas?

-Hay que aclarar que socializar no es lo mismo que estatizar, ya que de esa forma estamos acercando lo que al pueblo le pertenece.

-¿Promoverán esta medida?

-Hay que discutirlo más adelante y ver qué fuerza se tendrá en el Congreso.

-¿Cómo plantean las relaciones internacionales?

-Proponemos tener relaciones con todos los países del mundo, pero sentimos solidaridad, militante e internacionalista, con los pueblos que conquistaron libertad e independencia, por eso defendemos a la revolución cubana de Fidel Castro y la revolución bolivariana de Hugo Chávez, que han costado sangre y vida.

-¿Seguirán apoyando a Cuba a pesar de los informes sobre violaciones de DD.HH?

-Sí. Acá se difama y se distorsiona toda la información de Cuba o de otros países que están con revoluciones.

OPCIÓN

-¿Se sigue temiendo al comunismo en Paraguay?

-Sí, aunque en pequeña medida, pero quedó aquel temor que instaló la dictadura de Alfredo Stroessner, cuando se decía que ser comunista era ser traidor.

-¿Sigue siendo esta corriente una opción política en la sociedad capitalista y globalizada del siglo XXI?

-No hay otra opción más que el comunismo.

-¿Por qué?

-Porque se está dando la crisis del capitalismo y vemos cómo fracasa.

-Lo mismo pasó con el fracaso del comunismo en la URSS, y ahora se está viendo con Cuba y Corea del Norte…

-No fracasó.

-¿Qué pasó entonces?

-Fracasó la mala orientación de la ideología. No se puede hacer socialismo sin la participación consciente de la gente. Los trabajadores deben sentirse dueños del poder.

-¿Ve con posibilidad un gobierno comunista en nuestro país?

-A eso apuntamos, pero hay un largo proceso. Para el comunismo, primero, como decía Marx, hay que cambiar el pensamiento de la gente.