A pesar de una profunda crisis económica, los tres partidos en el poder en Berlín -Liberales, Verdes y Socialdemócratas- se han puesto de acuerdo en una política de recortes agresivos del gasto. Una estrategia arriesgada, tanto económica como ecológicamente.
La coalición tripartita alemana, conocida como la coalición tricolor, ha alcanzado un compromiso para salir de la crisis presupuestaria… de abajo arriba. En noviembre, la alianza formada por los socialdemócratas (SPD) del canciller Olaf Scholz, los Verdes y el Partido Liberal (FDP) del ministro de Finanzas Christian Lindner, se había visto obligada a revisar completamente sus planes presupuestarios tras una sentencia del Tribunal Constitucional de Karlsruhe.