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¡Qué revés sufrió, señor ministro!

Fuentes: Acción ecológica

Hace poco menos de un año el ministro de energía y recursos no renovables, Carlos Pérez, protagonizó una escena vergonzosa en lo que a extracción de recursos petroleros se refiere. El 23 de octubre de 2018, en declaraciones públicas durante el Encuentro Anual de Minería, Energía y Petróleo, afirmó que para evitar conflictos y dado […]

Hace poco menos de un año el ministro de energía y recursos no renovables, Carlos Pérez, protagonizó una escena vergonzosa en lo que a extracción de recursos petroleros se refiere. El 23 de octubre de 2018, en declaraciones públicas durante el Encuentro Anual de Minería, Energía y Petróleo, afirmó que para evitar conflictos y dado que el impacto será mínimo para las comunidades , esperaba licitar hasta finales de ese año solamente los bloques petroleros 86 y 87 en la Ronda Suroriente.

Mientras, afuera del local donde se realizaba el encuentro, autoridades del movimiento indígena amazónico y organizaciones sociales y ambientalistas protestaban en defensa de los territorios amenazados por la expansión petrolera.

Lo que no se imaginó el ministro es que su anuncio a más de evidenciar una enorme ignorancia sobre la realidad de las comunidades y los territorios, provocó que las nacionalidades que habitan esos territorios se manifiesten contundentemente desde la reivindicación de su identidad y su existencia. «Este va a ser un acto de genocidio y etnocidio, nuestros territorios están ocupados, somos seres vivos que nos merecemos respeto» . Ese fue el momento clave en que la acusación de inexistencia se convirtió en motor de la resistencia.

El 13 de noviembre de 2018, en una acción pacífica que tomó desprevenida a la seguridad del ministerio, coloridas, adornadas con plumas y alegres, las Mujeres Amazónicas junto con el Colectivo Yasunidos se tomaron las instalaciones del Ministerio de Hidrocarburos y allí se quedaron a acampar por varios días hasta ser recibidas por el mismísimo ministro. Le plantearon todas las argumentaciones de rechazo a los proyectos petroleros y se opusieron con firmeza a la ampliación de la frontera extractiva.

El 20 y 21 de marzo de 2019 se realizó en Juyu Intza una asamblea donde participaron autoridades de tres nacionalidades: Kichwa, Shiwiar y Sapara. Comunidades de estas nacionalidades serían las principales afectadas por los bloques 86 y 87; y resolvieron asambleariamente rechazar cualquier intención de licitar su selva a los intereses petroleros.

Durante varios meses no se escuchó noticia alguna sobre la licitación de estos bloques, ni sobre la ronda Suroriente que se pretendía cerrar a finales de 2018. Ese silencio ocultaba algo, dando lugar a varias hipótesis: podría ser que el acuerdo con Petroperú, empresa que ya tenía contratos con el ministerio para poder movilizar el crudo de los bloques mencionados, se haya caído; o podría ser que el ministerio decidió invertir toda su energía en explotar las plataformas A y B del parque nacional Yasuní; también podría ser que la negociación con Andes Petroleum, que quiere retirarse de los bloques 79 y 83, esté en problemas y esto afecte a la licitación de la ronda Suroriente. Y parece que los bloques 79 y 83, ubicados un poco más al oeste, también enfrentan conflictos con el ministerio.

El 12 de julio de 2019 la Nacionalidad Sapara del Ecuador envió una carta oficial a la presidencia de la república, al vicepresidente de Andes Petroleum, y al ministro Carlos Pérez, en la que se mencionan negociaciones que ha mantenido el ministerio con personas que no son representantes ni dirigentes de la nacionalidad y que esto podría acarrear consecuencias legales para el ministerio y la empresa. E l gobierno estaría intentando aplicar el famoso «divide y vencerás». En la carta se manifiesta también la oposición a que los bloques 86 y 87, y la reivindicación de su territorio libre de actividades extractivas.

Por su parte, la empresa Andes Petroleum ha hecho saber desde hace un tiempo que quiere salir del país por motivos de fuerza mayor, que tiene que ver con la presión social de las comunidades, y con que el gobierno no realizó la consulta previa, libre e informada, como lo demostró la sentencia Waorani Vs Ecuador.

Existen varias razones por las que el ministro decida no licitar los bloques 86 y 87. Lo que sí es seguro es que han admitido que no los licitará debido a las presiones sociales y para evitar conflictos.

Festejemos la victoria de esta batalla que con toda seguridad se la debemos a todas esas personas que levantaron sus voces, sus cuerpos y sus lanzas contra la ignorancia de un ministro que pretendió negar su existencia.

Fuente: http://www.accionecologica.org/editoriales/2385-2019-08-13-22-00-40