Ante los resultados -aún provisionales- hechos públicos por el CNE, expresamos lo siguiente: – Saludamos la madurez y sabiduría del pueblo ecuatoriano, que en las urnas supo diferenciar entre las preguntas de fondo y aquellas que constituían un mero aditamento. En aquellas preguntas referidas al control de la función judicial y del contenido de los […]
Ante los resultados -aún provisionales- hechos públicos por el CNE, expresamos lo siguiente:
– Saludamos la madurez y sabiduría del pueblo ecuatoriano, que en las urnas supo diferenciar entre las preguntas de fondo y aquellas que constituían un mero aditamento. En aquellas preguntas referidas al control de la función judicial y del contenido de los medios de comunicación, existe una mayor disconformidad de los electores. Con este NO, casi la mitad de los votantes expresó que quiere una justicia independiente, proba y libre de todo tipo de injerencia de los grupos políticos y económicos. En realidad, la ínfima diferencia de votos entre el No y el SI en las preguntas relacionadas con la reestructuración de la Función Judicial deslegitiman totalmente cualquier iniciativa que quiera tomar el gobierno para «meterle mano a la justicia» de una manera burda y abusiva.
– Saludamos la actitud digna y altiva del pueblo indígena, que supo mantener la defensa de la democracia y de sus aspiraciones históricas a pesar de la campaña de regalos y ofrecimientos desatada por el gobierno. Igualmente resaltamos la resistencia altiva a los grandes proyectos extractivistas que amenazan la vida en varias provincias amazónicas. Así lo refleja el amplio triunfo del NO en las provincias de la Sierra y de la Amazonía.
– Fieles a nuestra profunda convicción democrática, respetamos y valoramos a los millones de compatriotas que votaron SI, ratificando su fe en el cambio. Esperamos que esta expectativa no sea atraicionada por el gobierno.
– Rechazamos la mañosería del gobierno en el procesamiento de los resultados electorales el día 7 de mayo. Es más, sin aprender de la lección de aquel día, cuando el presidente anunció triunfante los resultados de un fraudulento exit poll, nuevamente, sin contar todavía con resultados definitivos, el gobierno anuncia decisiones que confunden al país y violentan el normal desenlace del proceso electoral. Los argumentos utilizados por el gobierno para defender el proceso electoral y el supuesto «triunfo contundente» del SI son torpes e insuficientes, demuestran inseguridad y provocan más suspicacia en la ciudadanía. Lo que hoy necesita el país es transparencia y certeza respecto de la decisión tomada por el pueblo en las urnas.
– Lamentamos que el gobierno se haya distanciado de los principios éticos que se fundamentaban en la participación ciudadana efectiva y que haya recurrido a prácticas clientelares de la época oligárquica, que se pretendía dejar en el pasado. El gobierno realizó la campaña más costosa y clientelar de la era correísta, lo cual no fue suficiente para asegurar el triunfo arrollador que predijo. Los resultados obtenidos por el SI son notoriamente inferiores a los conseguidos en el 2008 para la aprobación de la actual Constitución. En ninguna de las preguntas el gobierno obtiene más del 50% de los votos emitidos, es decir contabilizando los votos nulos y blancos. Esto demuestra que más de la mitad de los electores no confían en el presidente ni están de acuerdo con la consulta.
– Protestamos en contra del manejo del proceso electoral desde las principales autoridades políticas es una reedición corregida y aumentada de las prácticas de la vieja partidocracia. Festejos anticipados; declaraciones prepotentes y descalificadoras sobre la base de un triunfo incierto, parcial y relativo; influencia directa y desembozada del Ejecutivo sobre la Función Electoral , así lo confirman.
– Consideramos que la derrota política del régimen en la consulta popular es una consecuencia directa de la incompetencia de los principales responsables de la estrategia electoral oficial. Esta situación refleja el agotamiento de un estilo autoritario de poder y expresa el fracaso de la agenda de la derecha que se quiso introducir mañosamente a través de la consulta. Mientras no se supere el actual régimen de acumulación, sustentado en la sobre explotación de la mano de obra y de la naturaleza, el autoritarismo estará presente en la vida nacional.
– Constatamos que el gobierno queda profundamente debilitado y resquebrajado como consecuencia de una consulta popular que no abordó los temas de fondo, salvo el de la justicia, y que en este caso lo hizo de manera equivocada. La tozudez y miopía de los principales conductores del gobierno y de Alianza País han terminado por agotar las esperanzas y la paciencia de muchos de sus militantes y seguidores, quienes no han tenido más opción que abandonar las filas oficiales.
– Finalmente, agradecemos a todas y todos los periodistas de diversos medios (tanto radiales, como televisivos e impresos) que nos han invitado y dado cobertura a nuestras actividades; de igual manera a las y los técnicos informáticos que nos ayudaron cuando nuestras herramientas de TIC han sido atacadas porque no gustaba al poder lo que decíamos; a todos los compañeros y compañeras que en diferentes territorios del país nos han alojado, movilizado y organizado actos y entrevistas en medios de comunicación, invitándoles a participar en Montecristi Vive en este futuro que recién empieza. Tampoco nos queremos olvidar de todas y todos los amigos que nos han mostrado su simpatía a lo largo y ancho del país, dándonos la energía necesaria para seguir día a día en esta lucha tan desigual. Un abrazo muy fraterno a todos aquellos que de una forma o de otra nos han apoyado.
Montecristi Vive quiere canalizar los anhelos populares y las expectativas de las luchas emancipadoras sintetizadas en la Constitución del 2008, recuperando las propuestas originales que dieron luz a un proyecto de transformación nacional que ha sido paulatinamente desechado por el gobierno. Por eso mismo creemos que la consulta popular, como herramienta fundamental de la democracia directa, debe promover la deliberación democrática para hacer realidad la reforma de tierras, la redistribución del agua, así como el futuro del extractivismo, sobre todo la minería metálica a gran escala, así como otras transformaciones que demanda el pueblo ecuatoriano.
Todas las fuerzas progresistas y de izquierda que hemos coincidido en la lucha por defender la Constitución debemos caminar juntas, hacia la construcción de nuevos espacios y referentes políticos acordes con una propuesta de cambio democrático y pluralista. Hoy es posible recuperar la senda trazada durante décadas de lucha, que permitió la derrota de la partidocracia y la recuperación de la dignidad nacional.
¡Siempre más democracia, nunca menos!