A dos años (5 de noviembre de 2015) de la tragedia de Mariana (Minas Gerais, Brasil), Ekologistak Martxan se une a nuestra organización hermana Movimiento de los Afectados por Represas (MAB) para recordar ese crimen y sus víctimas, y para denunciar a su responsable, la compañía minera de hierro Samarco (consorcio entre Vale y BP […]
Pero no es sólo recordar y denunciar lo que pasó entonces, sino también lo que sigue sucediendo y de lo que es totalmente responsable el actual gobierno brasileño. Dos años después del crimen nadie ha sido juzgado, ni condenado, ni se ha pagado ninguna multa, ni ninguna familia damnificada ha sido reasentada, ni sus casas nuevas construidas.
La razón es muy sencilla: a parte de ser la Vale la empresa minera más poderosa de Brasil, con explotaciones en casi todo el mundo, la Vale también tiene una conexión muy estrecha con el actual gobierno golpista de Michel Temer. Samarco, con 2000 millones de euros de beneficios (2014), es también muy poderosa en la zona de Mariana.
Vale por otro lado financia el partido en el poder y aparece en distintos casos de corrupción. El año pasado tuvo lugar un golpe de estado en Brasil por la derecha brasileña del PMDB contra la democráticamente elegida Dilma Rousseff. El ahora presidente Michel Temer era confidente del gobierno de estados Unidos, y recibió su apoyo cuando asumió el poder. Después, él y su gobierno (hasta 9 ministros) se han enfrentado a cargos de corrupción, pero ha conseguido evitar la Justicia. La última vez este 25 de octubre, en la que sus diputados bloquearon una segunda denuncia. Así posibilitaron también que Temer pueda proseguir su carrera de privatización y desmantelamiento de servicios y derechos. Así la pasada semana vendieron yacimientos petroleros pertenecientes a la estatal Petrobras a empresas transnacionales y el pasado mes 4 hidroeléctricas.
Eso explica también que el mayor crimen ambiental y social de la historia de Brasil continúe impune. Todo el cauce de 800 kilómetros del río Doçe y su afluentes Gualaçu del Norte y Carmo, así como la costa de su desembocadura fueron contaminados por la minera por 50 millones de toneladas de lodos con altos contenidos de metales pesados. El lodazal arrastró pueblos enteros, cubriéndolos de limo mortal, y provocó la muerte de por lo menos 19 personas (muchos habitantes del río no están censados). De los 19 muertos 14 eran trabajadores de la compañía, y de ellos 12 eran trabajadores tercerizados.
El número de afectados total se estimaban en 1 millón, tanto como el cómputo global de afectados por los 2000 embalses existentes en todo Brasil. De esos afectados,a ctualmente más de 15.000 familias se encuentran sin casa o sin un medio de subsistencia. Como la delegación de Ekologistak Martxan pudo comprobar, los campos continúan improductivos tras el efecto del lodo tóxico. Los pescadores continúan sin poder faenar a lo largo de 700 kilómetros del río Doçe e incluso mar adentro, kilómetros arriba y abajo de su desembocadura.
Desde aquí nuestra solidaridad con el MAB y con las familias y comunidades afectadas, esperando se restituyan en parte sus derechos, y nuestro repudio a las empresas que perpetran semejantes crímenes contra el medio ambiente y los pueblos, y las instituciones que los amparan.
Martintxo Mantxo pertenence al colectivo Ekologistak Martxan y acaba de participar en el 8º Encontro Nacional do MAB (Movimiento de Afectados por los Embalses, por sus siglas en portugués), que viene de celebrarse entre los días 1 y 5 de octubre en Río de Janeiro (Brasil).