El cineasta admite que ya en las proyecciones pudo ver las chances que tenía su película Che. Un hombre nuevo en el Festival Internacional de Cine de Montreal. El film rescata imágenes nunca vistas y papeles desclasificados del guerrillero argentino.
La película de Tristán Bauer Che. Un hombre nuevo recibió este lunes el premio al Mejor Documental en el Festival Internacional de Cine de Montreal. El titular del Sistema Nacional de Medios Públicos comentó a Página/12 que «desde el mismo momento» en que llegó a Canadá sintió que él y su equipo podían volver con la estatuilla, que se adjudica a partir de los votos del público. «El estreno fue a sala llena y las dos fechas posteriores repitieron el éxito. Tanto fue el revuelo, que hubo que agregar una proyección por fuera de la grilla», contó el realizador. La prensa especializada, por su parte, destacó la novedad de haber logrado un retrato íntimo del prócer revolucionario; e incluso el hijo del Che, Camilo, calificó la cinta como «el mejor» trabajo que se ha hecho sobre su padre dentro del género.
El rubro «documentales del mundo» reunió a más de cincuenta títulos en competencia. Pero probablemente ninguna otra cinta sintetizaba los frutos de doce años de investigación, con imágenes reveladoras y nunca antes vistas. Los canadienses se entusiasmaron: de acuerdo con un comunicado difundido por la Universidad Nacional de San Martín -que coprodujo el largometraje junto al Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa); el Centro de Estudios Che Guevara e Icaic, de Cuba, y Golem Distribución, de España-, cada presentación terminó con ovaciones y aplausos de pie. «Alguno podría sospechar que en una nación tan lejana el recuerdo del Che se recibe desde la distancia y la apatía. Pero son prejuicios. Yo no vine con prejuicios sobre la repercusión que podíamos tener y de hecho, a poco de estar acá, era obvio que teníamos una firme candidata a llevarse la estatuilla», reconoció el cineasta. Acompañaron a Bauer el rector de la UNSM, Carlos Ruta, y la guionista e investigadora Carolina Scaglione, quienes también participaron del proyecto.
El rodaje se desarrolló en Argentina, Perú, Bolivia y Cuba. Fue más de una década de llamados, viajes, e-mails, permisos, transportes. En referencia al camino que le tocó recorrer, el director admitió que tanta paciencia había valido la pena. «A medida que avanzábamos nos dábamos cuenta de que íbamos a mostrar un retrato que no se conocía. Eso nos mantenía activos», dijo. Y es verdad que reunió de todo: la viuda de Guevara, Aleida March, le permitió indagar entre sus recuerdos, donde se pueden encontrar dedicatorias románticas que el guerrillero mandaba cuando la lucha por la libertad le dejaba ratos libres. ¿Un galán de izquierda? Por supuesto, pero no sólo eso. El presidente Evo Morales habilitó los dos últimos cuadernos del Che, que se escribieron cerca de La Higuera y que permanecen inéditos porque estaban clasificados como documentos secretos del ejército boliviano. Bauer no se conformó con eso y recopiló innumerables textos que el revolucionario redactó a lo largo de su vida, incluso cuando las balas le silbaban cerca. Consiguió revisar los libros que Teté leía durante su niñez en Alta Gracia, los cuadernos filosóficos que inició a los diecisiete años y los diarios de sus viajes.
Además el Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográficos aportó originales de cámara sin editar. Hay fotos inéditas y fragmentos de películas que provienen del Congo, Estados Unidos, Irlanda, Checoslovaquia, la URSS e Inglaterra. Asimismo, perlas como la correspondencia que Guevara mantenía con su madre revelan aspectos inesperados de una identidad que todavía resulta fascinante, y hasta hay imágenes del archivo fílmico familiar, entre ellas un rollo 8 mm en el que se ve al Che la última vez que se reunió con sus padres y hermanos en Punta del Este. Semejante recopilación justifica las reacciones de la prensa canadiense, que no ha ahorrado en elogios. Para Ginette Leroux, del diario L’Aut’Journal, se trata de una obra «única, excepcional y útil» que recupera «al ser humano, el pensador y al escritor» que vibró detrás del icono.
La banda sonora es reflejo de una época y un sentimiento. Contiene temas de Daniel Viglietti («Canción del hombre nuevo»), Carlos Puebla («Todo por la reforma agraria» y «Hasta siempre») y Alfredo Zitarrosa («Adagio en mi país»). Una selección que, junto al rescate del Che como figura necesaria para el presente, incomodará a quienes no esperan encontrar esas ideas en las oficinas del Sistema Nacional de Medios Públicos. «Obviamente, estoy pasando por una instancia en la que se me representa casi siempre como funcionario. Me gustaría aclarar que, a pesar de eso, yo asumo todos mis trabajos con la misma responsabilidad, porque me esfuerzo por ser el mismo en un espacio y en el otro. Simplemente siento que los latinoamericanos estamos pasando por una etapa histórica y quiero sumarme para dar lo mejor de mí», recalcó el entrevistado.
* Che. Un hombre nuevo llegará a la Argentina el próximo 7 de octubre, conmemorando la muerte de Guevara. Habrá estrenos simultáneos en Cuba y España.
Fuente: http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/espectaculos/5-19205-2010-09-08.html
rCR