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Entrevista a Norberto Bacher

«Venezuela sufre una guerra económica inscripta en el marco de una guerra no convencional»

Fuentes: Rebelión

M.H.: Se reinició la producción de gasolina en Venezuela, la refinería Cardón empezó a trabajar. ¿Es así? 

N.B.: A medias. Hay tres refinerías importantes, una en el Oriente, en el Estado Anzoátegui y otra en el centro, la refinería El Palito y la más importante, de mayor envergadura y una de las más grandes a nivel mundial, que es el complejo de Paraguaná que tiene Amuay y Cardón. En la península de Paraguaná en el Estado Falcón.  

Había caído la producción por bloqueo, falta de mantenimiento técnico. Hay que entender que estas refinerías fueron forjadas en la época de la dependencia petrolera de acuerdo a la tecnología norteamericana, fundamentalmente de la Shell. Impulsada la refinería y la falta de mantenimiento técnico, en la que hay procesos combinados que tienen que ver con el bloqueo, la dependencia tecnológica y también por impericias burocráticas de los manejos de la propia industria, que llevaron la situación al desabastecimiento.  

Ha sido parcialmente superada la situación con la llegada de petroleros iraníes que trajeron gasolina y que fueron acosados o por lo menos tratados de intimidar como forma de represalia y se ha iniciado un proceso de mantenimiento de la mano de los propios trabajadores, de recuperación de tecnología con apoyo de la tecnología iraní que en algunos casos se puede adaptar a la tecnología que usan las refinerías venezolanas. Entonces hay un abastecimiento, se ha superado el momento crítico pero no hay una estabilidad lograda como la que tenía Venezuela antes.  

M.H.: Tengo un informe que señala que la producción petrolera ha disminuido un 64%.  

N.B.: En el momento del sabotaje petrolero, una suerte de lock out organizado por las dirigencias, que en ese entonces tenía PDVSA a fines de 2002 y principios de 2003, que fueron tres meses muy críticos, tumbó la producción casi a cero y en poco tiempo se llegó al nivel anterior que era aproximadamente de tres millones y medio de barriles diarios.  

Actualmente la producción de Venezuela llega a menos de un millón de barriles diarios, contando todas las empresas, las áreas de PDVSA y asociadas, algunas de ellas son empresas mixtas. Tanto en la zona tradicional de Maracaibo y Monagas como en la zona del crudo más pesado de la faja petrolera del Orinoco. Esos son los datos y ha habido una caída enorme, lo que se debe fundamentalmente a procesos de desinversión que ha habido. Procesos de bloqueo técnico y también manejos de la propia industria internos. Ha habido grandes cambios en la dirección de PDVSA que no siempre han sido acertados. Hay todo un manejo burocrático y ahora hay un intento de reimpulsar la producción en base a lo que siempre han planteado los trabajadores, desde 2002, que solo la gestión directa y democrática de los trabajadores lo va a gestionar. Pero las sucesivas direcciones que han estado a cargo a lo largo de los años, han sido un punto de fricción y choque, nunca han depositado la gestión en manos de los trabajadores. Más bien lo han evitado en muchísimos casos, tanto en la larga dirección de Rafael Ramírez como las que siguieron luego de su destitución. 

M.H.: Una industria petrolera que por otra parte genera el 95% de las divisas que ingresan a Venezuela. 

N.B.: Sí. Es el eje de la columna económica del país y además con una ventaja comparativa, que es la principal fuente de ingresos del país y está en manos del Estado, o sea que no depende de productores privados que tienen que liquidar las divisas, como ocurre en nuestro país que dependemos de si los sojeros liquidan o no divisas. 

M.H.: Nos referimos a PDVSA a la estuviste estrechamente vinculado en tu paso por Venezuela. 

N.B.: Desde fines de 2001 hasta 2016 con algunos viajes intermitentes a mi familia originaria de acá. Pero escasos, prácticamente mi estadía en Venezuela fue permanente. 

M.H.: Más allá de la problemática de la producción petrolera, cómo impacta el bloqueo, el saqueo, la piratería. Hace días atrás entrevistando a Carlos Aznárez hacía referencia a esta situación que se ha dado con el Banco de Inglaterra que ha retenido 31 toneladas de oro, está la situación de la empresa Citgo en EE UU también. ¿Qué información tenés al respecto? 

N.B.: Es dramático. Hay que contextualizarlo en el marco político global, más allá de describir los hechos. Hay que enmarcarlo en el largo enfrentamiento que tiene el proceso bolivariano con el imperialismo yanqui en particular. Desde febrero de 2004 cuando el extinto Presidente Chávez declaró que la revolución bolivariana era una revolución antiimperialista, en tono bastante combativo en un inmenso acto de masas que se realizó en ese entonces en Caracas. 

Los enfrentamientos se acentuaron a fines de 2015, en diciembre, cuando por primera vez la oposición de derecha logra tomar el control de la Asamblea Nacional, o sea la institución parlamentaria. A partir de ahí se plantea no jugar el rol constitucional que le corresponde al Parlamento, como en cualquier República según la clásica división de poderes, que también rige en Venezuela. Sino que plantea quien tomó la presidencia de la Asamblea, Ramos Allup, hombre de la derecha proveniente de Adeco, que en 6 meses van a sustituir a Maduro, o sea, una estrategia de derrocamiento.  

Inmediatamente, a principios de 2016, en el último año de gobierno de Obama, saca un decreto, una resolución que declara a Venezuela como un peligro inusual para la seguridad de EE UU en el hemisferio. Ahí queda muy claro que estaba preparando el terreno, dejando las “bases legales” de la legalidad que impone el imperialismo, para llevar adelante una estrategia de cerco económico, que asimilada a una táctica militar es una táctica de cerco y aniquilamiento.  

Por un lado la oposición anuncia el hecho del derrocamiento y, por otro, el imperialismo prepara el cerco económico. De ahí se desarrollan unas secuencias crecientes que podríamos enumerar, pero sería un poco largo, en general es un crescendo, como la música, aumentando hasta que finalmente designan a principios de 2019 un Presidente sustituto, de la derecha, Guaidó, que toma la presidencia de la Asamblea y lo reconocen como Presidente. Alegando que termina el mandato de Maduro y no reconocen las elecciones que fueron en mayo de 2018 cuando fue reelecto; creando un gobierno paralelo. Un gobierno que no tiene control territorial, no tiene control de la fuerza armada y el único sostén que tiene es el de la legalidad internacional que le da el capitalismo mundial, en particular el yanqui y sus aliados europeos, más de 90 países que reconocen su legitimidad y a partir de ahí empieza el despojo abierto. 

Bloquean todos los activos de Venezuela en EE UU, le transfieren el manejo de Citgo a Gauidó. El caso del oro es muy llamativo, era una especie de garantía que le había dado el pueblo venezolano al City Bank, son garantías reales a cambio de préstamos, cancelado ese préstamo el City Bank alega que no puede devolver el oro a Venezuela por las sanciones que impuso el gobierno de Trump. Entonces lo deposita en el Banco de Inglaterra, el banco tradicional donde se deposita el oro mundial, de la época del Imperio británico que era el gran tesorero del mundo capitalista.   

El gobierno de Maduro le plantea al juez británico que se liquide ese oro y no se lo dé al gobierno sino que lo entregue a ayuda humanitaria, vista la situación de bloqueo y pandemia. El juez toma la resolución de negar eso. Es un acto de la más rancia piratería de todas las historias. De la misma manera que nos piratearon la territorialidad de las Malvinas. Siguen su trayectoria histórica.  

Comenzaron el bloqueo por las transacciones financieras, porque todos sabemos que las transacciones en el mundo financiero se hacen a través de un código que manejan los bancos y que permite mover las transacciones, y el control de esas tecnologías está en manos del imperialismo yanqui. Entonces empezaron por ahí, luego el bloqueo comercial, sanciones a las empresas venezolanas que comercian con EE UU. Recientemente han impuesto sanciones a los barcos que llevan mercadería de cualquier tipo.  

El transporte marítimo, igual que el transporte aéreo requiere grandes seguros, las aseguradoras se niegan a asegurar a las transportadoras que viajen a Venezuela. Es todo un cerco que evidentemente es una estrategia de derrumbe. Es una guerra económica que se inscribe en el marco de una guerra no convencional, que algunos llaman “guerra de cuarta generación” otros “guerra híbrida” según los distintos analistas o estrategas militares. Pero que es el mismo estilo que han seguido en países de Medio Oriente desarticulándolos. Como Siria. 

El imperialismo y la oposición han creado una situación de guerra civil 

M.H.: En este contexto cómo analizaste la declaración del representante del gobierno argentino ante la ONU, Federico Villegas, en el mismo sentido de la presentación del Informe de la Alta comisionada de DD HH de la ONU, Michelle Bachelet, que alerta sobre numerosas violaciones de los DD HH por parte del régimen de Nicolás Maduro, cuando en realidad, de acuerdo a lo que estás describiendo la situación es exactamente al revés. 

N.B.: Lo primero que habría que hacer es hablar de las violaciones a la ley internacional del imperialismo y la situación que vive la población como consecuencia. Puede ser que dentro de Venezuela al crear tensiones haya situaciones que violenten la armonía social y excesos policiales. Eso no lo niega nadie. Porque han creado una situación de guerra civil, que el gobierno ha desarmado y que la derecha no ha tenido capacidad de movilización para desarrollarla, entonces está apoyada en la presión externa.  

La declaración del gobierno argentino muestra las propias contradicciones internas que conforman el Frente de Todos. Sabemos que es una coalición donde hay fuerzas que son más nacionalistas o moderadamente antiimperialistas, o incluso hay fuerzas antiimperialistas; pero hay otros que se inscriben dentro de la institucionalidad de una convivencia con el imperialismo yanqui. 

Nadie puede llamarse a engaño sobre el carácter del gobierno argentino. No es el gobierno de Chávez. Lo que ha hecho enojar a partidarios del propio gobierno, entre ellos Víctor Hugo Morales que tuvo un enfrentamiento muy duro con el Presidente y me imagino que muchos otros compatriotas que forman parte de esta coalición también estarán disgustados con esta declaración.  

Y sabemos la posición, la diplomacia responde a Felipe Solá. Recordemos que ha sido el hombre que en su función pública dio la autorización para la entrada de los transgénicos a la Argentina, entre otras medidas de su larga trayectoria política. 

M.H.: ¿Cómo cerrarías esta charla? ¿Qué querés agregar respecto de la situación que viven nuestros compatriotas venezolanos? 

N.B.: En primer lugar que el pueblo venezolano está sufriendo mucho por la presión imperialista, más allá de las contradicciones internas que existen en toda sociedad, o en toda fuerza plural y de masas. Para todos aquellos que tengan un sentido antiimperialista, de autodeterminación de los pueblos, lo primero es brindar solidaridad y denunciar esta ilegalidad. Esta es la primera tarea que tenemos.  

Lo segundo es decir que la derecha muestra su impotencia para desarrollar la estrategia de guerra civil y derrocamiento que se ha impuesto y más allá de los claroscuros que podemos encontrar en Venezuela, hay un bloque muy fuerte, un sentimiento popular de una parte muy importante de la sociedad, en la cual hay una idea que se ha consolidado con el Chavismo, que es una idea de independencia nacional con la de transformación social en una dirección opuesta al capitalismo, llamado Socialismo, por más difuso que sea la forma concreta que tome pero que no puede ser por la vía capitalista.  

Eso anida en una parte muy importante del pueblo, de las bases populares, muchas están haciendo denodados esfuerzos de autoproducción y autogestión para recuperar las empresas del Estado con los trabajadores y están resistiendo. Hay otras fuerzas dentro del gobierno que están buscando una suerte de acuerdo institucional para garantizar la gobernabilidad. Parte de esto son posiblemente los acuerdos que se están gestando para elegir un nuevo Consejo nacional electoral, para lo que corresponde institucionalmente que es la renovación por vencimiento de mandato de la Asamblea Nacional, para elegir una nueva Asamblea a fines de este año, precisamente en diciembre, creo que se ha fijado la fecha del 6 de diciembre.  

Entonces una parte de la oposición se da cuenta que no puede desarrollar una guerra civil, entonces busca elementos de la socialdemocracia europea, entre ellos Rodríguez Zapatero, el ex jefe de gobierno de España del PSOE, para un acuerdo que permita elegir un nuevo Tribunal electoral que ya se ha nombrado, con representantes de esas fuerzas opositoras y veremos si se desemboca en eso, y tratando de recomponer la economía bajo el cerco imperialista que no da muestras de ceder.  

En estos días ha habido declaraciones de Elliott Abrams, sabemos que es representante de Trump, justamente para tratar de quebrar a Venezuela, ha habido una provocación de la flota que desplegó EE UU frente a las costas de Venezuela entrando en territorio venezolano diciendo que no son aguas territoriales del Mar Caribe. Y vamos a ver en estos meses provocaciones que irán al compás de la propia crisis interna de EE UU, de sus avatares, de cómo se desarrolla la crisis interna y también motivada por la situación de disputa electoral que vive EE UU que es la renovación electoral de noviembre donde se disputa la continuidad o no de Trump.