«Es a través del espíritu de la televisión que se manifiesta en concreto el espíritu del nuevo poder. No hay duda (se ve de los resultados) que la televisión es autoritaria y represiva como ningún medio de información en el mundo.» Pier Paolo Pasolini Wyoming 1963. Bajo los sombreros dos vaqueros esperan delante del despacho […]
Pier Paolo Pasolini
Wyoming 1963. Bajo los sombreros dos vaqueros esperan delante del despacho del ranchero local, Joe Aguirre, para subir la montaña del Brokeback para trashumar. Ennis Del Mar no tiene familia, perdida tras una curva en una carretera derecha, Jack Twist tiene una, que es mejor olvidarla, perdida en el campo del Texas. Fuera del mundo, en aquel lugar suspendido que «rompe» con las convenciones de más abajo, en el llano, que «quiebra» los tiempos de la cultura para seguir los de la naturaleza, los dos jóvenes se acercan hasta tocarse. Bajo la tienda, generosa alcoba, la camaradería se convierte en pasión, la realidad en épica amorosa.
Los vaqueros enamorados de Ang Lee nacen de la pluma de Annie Proulx que en el 1998 escribió un cuento breve en el The New Yorker, que al fin se convirtió en una novela con alta presión, «Gente del Wyoming.»
En aquel mismo año en Laramie, en el Wyoming, idealmente próxima a la montaña de Brokeback, muere, asesinado por dos manaderos homofobios, Matthew Wayne Shepard, homosexual de 21 años. Ennis y Jack tienen, entonces, un origen literario pero padres reales y rurales que practican la moral homofóbica.
No quisiera osar demasiado diciendo que también en Italia, parece que la homofobia todavía está bien lejos de haber sido desarraigada y me dejó, de veras, sorprendida la noticia que el 8 de diciembre de 2008 fue transmitida la famosa película norteamericana (una de las más premiadas de la historia, León de oro en el Festival del Cine de Venecia 2005, 4 Golden Globe 2005 y 3 Óscar en el 2006) en el segundo canal de la televisión del estado, RAI 2, con la censura completa de las escenas homosexuales.
El hecho que preocupa es que nadie quiso admitir la culpabilidad de este acto santurrón y absurdo, diría más que fascista e ignorante.
La televisión de estado afirma que la película llegó a los estudios televisivos ya amputada.
Esta película es tan conocida que claramente su mutilación levantó las protestas de los televidentes, indignados por el hecho cometido, que pone en ridículo la dirigencia del canal.
La única solución fue la promesa del director del canal de televisión de retransmitir próximamente la versión íntegra, que todavía, casi al final de enero del 2009, no se ha cumplido.
¿Yo me pregunto, aparte la estupidez de truncar una película famosa que ganó muchos premios, hasta dónde llegará esta manipulación de las conciencias, hasta cuándo se permitirá a la televisión el monopolio de la razón?
Y ahora la comparación nace espontánea, para mí, que vivo a Cuba y soy testigo de la evolución de esta Revolución cubana: aquí, al revés de mi «bonito país», transmitieron, en la televisión de estado, la película «Brokeback Mountain» en versión integral.
Los cubanos pudieron apreciar completamente el valor de denuncia de la película, que puso bajo la luz la ferocidad de una sociedad machista y racista de una parte del Norte de América, que defiende sus estúpidos valores de fachada, matando a quién cree «enfermo» sin una posible curación y fuente de un peligroso contagio.
Se transmitió el 17 de mayo de 2008, día mundial contra la homofobia, y fue sólo una gota de aquel mar de actividades que se desarrollaron para defender un derecho tan fundamental: lo de una sexualidad libre de los prejuicios.
Sí, porque en Cuba, donde muchos estúpidos muy poco informados creen hasta que los homosexuales sean condenados a muerte, este derecho a la sexualidad es defendido por el Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX), de quien Mariela Castro es la directora.
Por otra parte, qué podemos esperarnos, de una Italia que tiene como ministro de «las iguales oportunidades» a una ex vedette, Mara Carfagna, que en el 2007 en un seminario afirmó que «no hay ninguna razón por la cual el Estado tenga que reconocer las parejas homosexuales, en el momento que por constitución son estériles» y que «para quererse el requisito fundamental es poder procrear». Luego, al revés, contradiciéndose, justo en ocasión del 17 de mayo 2008, dijo que a ella no le interesa este tipo de conmemoración porque en Italia los homosexuales no son discriminados.
¿Y con estas declaraciones, qué podemos hacer: sólo avergonzarnos, nosotros los italianos honestos y con conciencia cívica, o también deberíamos permitir que critiquen la Revolución cubana sin protestar?
Me parece escuchar todavía en mis oídos la afirmación de un periodista italiano, hecha a Mariela Castro, en una conferencia sobre la sexualidad, en el mes de noviembre del 2008, en la sede de la Asociación Dante Alighieri de La Habana, donde afirmó que le parecía imposible que después de 50 años de Revolución en Cuba, los homosexuales cubanos no pudieran casarse todavía oficialmente, mientras que en España sí.
Mariela, con gran paciencia y profesionalidad (paciencia porque ya lo había dicho anteriormente) le explicó al periodista italiano, por una segunda vez, que se prefirió reconocer las parejas homosexuales con todos sus derechos legales, sin llegar al matrimonio para no ofender la sensibilidad de la iglesia católica de Cuba, que pidió esta solución: claro que, al fin, lo que importa concretamente son los derechos legales, no la ceremonia con brindis y pastel en la sede municipal!
¿Pero, que me disculpen, en Italia tenemos quizás el matrimonio gay reconocido?
¿Y para concluir, por qué incensar mucho a Zapatero como si fuera un gran héroe?
Lo sé, lo sé que en estos tiempos tan oscuros y tristes para la izquierda europea puede parecernos casi un auténtico revolucionario, casi un Che Guevara…… (¡y espero que el alma del gran guerrillero cubano-argentino pueda perdonarme por la infeliz comparación!!!!).
¿Pero en Italia nos incomodamos en algún momento al observar el gran e incesante trabajo del CENESEX?
El Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX) nació en Cuba en el 1989; desde entonces su imagen de prestigio y autoridad, avalada por años de dedicación al estudio, investigación y educación de la sexualidad, ha podido mostrar al mundo resultados concretos en favor del crecimiento y desarrollo de hombres y mujeres.
Ha tenido como encargo social, la coordinación, implementación y desarrollo del Programa Cubano de Educación Sexual, que como un abanico de opciones para el enriquecimiento del ser humano, contempla la educación de la sexualidad desde los primeros momentos de la vida y compromete a toda la sociedad en su ejecución.
La escuela, las instituciones de salud, la comunidad y los medios de comunicación social han sido sus principales escenarios de influencia.
Se han desarrollado acciones específicas en favor del mejoramiento y equilibrio de la salud sexual y reproductiva a través de diversos programas y servicios de salud: El Programa de Maternidad y Paternidad Responsable, los servicios de Planificación Familiar y de Prevención de Infecciones de transición sexual y SIDA, las consultas de Orientación y Terapia Sexual son entre otros, algunas de las acciones a las que se le han dedicado mucho esfuerzo.
Ha defendido la idea de que la educación de la sexualidad con un enfoque integral contribuye al proceso de crecer y aprender, crea las pautas que favorecen las relaciones entre madres, padres, hijas e hijos y entre maestros y alumnos, ayuda a superar las contradicciones, a tomar decisiones, a establecer proyectos personales, a ganar nuevos espacios de autonomía y a promover la ruptura de estereotipos sexistas. Además, el CENESEX ha extendido esta concepción de trabajo grupal a la comunidad. Para ella aprovecha numerosos espacios de influencia que existen en el país y así puede llegar a familias, parejas, jóvenes y ciudadanos en general con un mensaje educativo sobre la sexualidad.
Otro ámbito que no se puede olvidar es el Grupo Nacional de Trabajo por la Prevención y Atención a la Violencia Intrafamiliar, coordinado por la Federación de las Mujeres Cubanas, que en perfecta armonía con los principios éticos de la Revolución, continuará desarrollándose y mejorándose lo que se está aplicando y enseñando en Cuba desde el 1° de enero del 1959: el derecho a las mujeres a una vida sin violencia.
¿Y ahora, para concluir, quisiera todavía utilizar una frase del gran Pier Paolo Pasolini quien afirmó, en el diciembre del 1974, que «un homosexual hoy en Italia es chantajeado y chantajeable, llega también a arriesgar su vida todas las noches». ¿Estamos seguros de que con este aire «fascistoide» de nuestro actual gobierno italiano las cosas sean cambiadas?
*la autora es responsable de la página web en italiano de Prensa Latina