1.- En este comienzo de 2016 nos volvemos a encontrar como al inicio de 2009, cuando Sarkozy decía que había que re-fundar el capitalismo, pero con los efectos más agravados. No es un círculo sino una espiral. Al sistema capitalista le ocurre como a la mayoría de los tiburones: tiene que estar en permanente movimiento […]
1.- En este comienzo de 2016 nos volvemos a encontrar como al inicio de 2009, cuando Sarkozy decía que había que re-fundar el capitalismo, pero con los efectos más agravados. No es un círculo sino una espiral. Al sistema capitalista le ocurre como a la mayoría de los tiburones: tiene que estar en permanente movimiento (crecimiento) para poder sobrevivir. El sistema-mundo de este capitalismo agonizante esta en quiebra:
- Estancamiento y recesión del crecimiento medido en PIB en Europa, EE UU, Japón, China, Rusia, Brasil, países productores de petróleo y gas (Arabia Saudita, Kuwait, Emiratos árabes, Argelia, Nigeria, Venezuela, …)
- Los BRICS, en los que se ha basado el crecimiento económico mundial desde 2008, son arrastrados en esta turbulencia de la nueva crisis financiera global, que ya no cuenta ni con políticas monetarias alternativas, ni la posibilidad de socializar las perdidas de las empresas y bancos privados.
- El actual sistema-mundo del capitalismo agonizante necesitaría inversiones seguras con perspectiva de beneficio para 2,16 billones de dólares al año (3% del PIB mundial cada año) Esta falta de sectores donde invertir lleva a que las entidades financieras privadas mantengan los fondos disponibles en los bancos centrales costándole dinero y a financiar fondos soberanos considerados «plazas seguras», como EE UU, Alemania y España, con tasas de interés negativo. Desde el pasado mes de noviembre 2015 el comercio internacional se desploma.
- El estallido de la burbuja de Bonos soberanos y el impago de la deuda es inminente en numerosos países. El primero ha sido Ucrania el pasado 8 de diciembre, con el beneplácito del FMI, y de EE UU que tiene derecho a veto, contraviniendo los propios estatutos del FMI.
- La guerra de divisas, devaluar el valor de la moneda para seguir exportando y manteniendo las cuotas de mercados, preludio en las dos guerras mundiales, se acelera. Lo mismo ocurre con el mercado del petróleo y gas, entre países productores y entre grandes corporaciones privadas. La bajada del precio del barril hasta los 30 dólares/barril, que incluso puede llegar a menos de 20 dólares/barril, resultado de este estancamiento y recesión de la actividad productiva, pero también de la estrategia marcada por Arabia Saudita lleva a la quiebra a países y transnacionales que tienen sus activos invertidos en pozos cuyo nivel de coste de extracción ronda los 45-50 dólares/barril, como puede ser el caso de REPSOL.
- Esta quiebra generalizada de países (bonos soberanos) y de grandes empresas de petróleo y gas, en las que los socios mayoritarios son las grandes entidades financieras, está hundiendo las bolsas mundiales. Sólo en la primera semana de 2016 han perdido más de 4 billones de dólares de capitalización bursátil.
2.- En esta agonía el sistema-mundo del capitalismo agonizante acelera la destrucción de la naturaleza, de la casa común, de la Madre Tierra. En su búsqueda de sectores económicos donde realizar beneficios esta mercantilizando los bienes comunes indispensables para la supervivencia de la Humanidad: agua, alimentación y hasta el sol. En la COP21 de Paris triunfó la mercantilización sobre la Vida. Y para invisibilizar el clamor de la Humanidad representado en las movilizaciones programadas de forma paralela durante la Cumbre no importó utilizar el terrorismo contra la propia ciudadanía una vez más. La primera prioridad de un Gobierno unido y hermanado de este mundo sería cortar el vertido diario de miles de litros de agua radioactiva en Fukuyima desde hace cinco años, e intentar neutralizar sus efectos de acidificación del mar, que esta acelerando progresivamente el cambio climático. Este sistema-mundo del capitalismo agonizante calla y mira hacia otro lado porque es incapaz de hacerle frente.
3.- Lejos de reconocer su fracaso se empecinan en más de lo mismo: TTIP, CETA, TPP y TISA. La ratificación de los Tratados de libre comercio de las Transnacionales no es sino la huida hacia delante de este sistema moribundo cada vez con menos sentido. Hace siete años Sarkozy convocó a más de cincuenta personalidades dirigidas por los premios Nóbel en economía Amartya Sen y Joseph Stiglitz para elaborar indicadores para el desarrollo humano distinto al simple crecimiento del PIB. El trabajo está hecho, aunque haya que revisar los postulados de salida en un futuro, pero archivado y olvidado. Es una aberración pensar en un crecimiento infinito en un mundo limitado y cerrado.
4.- El mundo actual es más desigual, dividido y enfrentado, y al borde de una tercera guerra mundial. La miseria y la falta de seguridad provocadas por la concentración del capital internacional en 147 transnacionales financieras de capital-riesgo, los efectos del cambio climático y las guerras provocadas por los enfrentamientos inter-oligárquicos en esta crisis final del sistema dan lugar a las migraciones masivas y a los flujos de refugiados. En esta situación de estancamiento económico y de enfrentamiento inter-oligárquico EE UU, Japón y Gran Bretaña no pueden devolver las deudas que mantienen con el resto del mundo. Su única salida es la guerra para no devolverlas.
5.- La des-dolarización de los BRICS, reforma del FMI y el fracaso de Europa. En esta dinámica de impago generalizado de las deudas se inserta la creación del Banco Asiático de Inversión e Infraestructura (BAII) como alternativa al Banco Mundial, que entrará en funcionamiento real a lo largo de 2016, y el proceso de des-dolarización en el comercio de los BRICS, al que cada vez se incorporan nuevos países, el último Irán el pasado 26 de diciembre de 2015 para el comercio del petróleo, que a su vez se incorpora como socio de pleno derecho a la Organización de Cooperación de Shangai (OCS). Este proceso donde se deja de usar los petrodólares en el comercio del petróleo y gas perjudica sobre todo a EE UU y a Arabia Saudita, que a su vez están enfrentados entre si por el abandono del apoyo de EE UU al ISIS (DAESH) en Siria, lo que lleva a Arabia Saudita a desencadenar la guerra de precios del petróleo. La invasión de Libia fue desencadenada por la inminente puesta en circulación del Dinar-oro para 55 países de África, así como su propio Banco de Desarrollo impulsado por Gadaffi y apoyado desde el FMI dirigido entonces por Dominique Strauss Kahn, en desarrollo de lo tratado en el G20 de 2010. La primera guerra del Golfo se desencadenó cuando Saddam Hussein dejó de usar el dólar en la venta de su petróleo y se pasó al euro. La reciente incorporación del Yuan (renmimbi) a la cesta de monedas del FMI, así como la mayor consideración del rublo ruso y de la rupia india por parte del FMI, manteniendo el derecho a veto de EE UU, es una maniobra para intentar paralizar esta puesta en marcha del sistema financiero internacional alternativo, que a medio plazo colapsará el FMI y el Banco Mundial. La dinámica que se visualiza en este comienzo de 2016 es de profundización de la crisis económica y financiera, de los flujos migratorios y las calamidades por desastres naturales provocados por el hombre con el cambio climático y los enfrentamientos militares cada vez más graves. Y en esta dinámica la falta de integración política europea aboca a la Unión Europea y a la zona euro a su desintegración.
6.- La Humanidad sigue sin tener Voz. No existe como sujeto político alternativo. Desde 2008 venimos diciendo que de esta crisis financiera no se saldrá hasta que no seamos concientes de que la realidad es distinta y tenemos que hacer cosas diferentes de manera diferente. Tenemos que replantearnos qué producimos, con qué lo producimos y para quienes lo producimos. Tenemos que producir, consumir y distribuir de otro modo. De esta crisis no se saldrá hasta que desarrollemos una economía por y para la Vida, la economía del Bien Común. Frente al Poder actual debemos tener tranquilidad interior, pensamientos claros y honestos que no se dejen fascinar por la importancia de poseer objetos, de la propiedad privada, sabiendo que la situación favorable para instaurar el Poder de la nueva época que viene debe basarse en un análisis riguroso de la inseguridad y tensión del mundo actual. La humanidad necesita trabajar activamente con libertad, equilibrio y creatividad; elegir la verdadera mejora económica; cambiar para no tener que preocuparse por la salud y el bienestar futuro; y unirse volviéndose a encontrar con seguridad en si misma. Todas las civilizaciones que constituyen la humanidad tendrán que compartir y promover seis objetivos: la construcción de un mundo ecológico, con igualdad de género, imperio de los derechos humanos, realización personal, convivencia pacífica intercultural y democracia participativa; y todas deberán asumir los conocimientos en profundidad para poder superar este periodo difícil con entusiasmo.
7.- Construyendo el futuro con las nuevas Tablas de la Ley. Hace siete años dejamos que fuesen los mismos que habían provocado la crisis quienes marcaran la ruta de salida con este resultado nefasto. Ahora tenemos que poner la alternativa del Bien Común de la Humanidad en marcha. Enfrente tenemos a los planificadores de la seguridad de este sistema-mundo del capitalismo agonizante, la Comisión permanente del Club Bilderberg, que con una visión global y el poder de las 147 Transnacionales financieras marcan las acciones a realizar locales, en cada país. Para que haya una posibilidad de éxito nuestra alternativa también tiene que tener una visión global que se desarrolle localmente. Y esa visión global pasa por convertir a la Humanidad en sujeto político dotándose de su Manifiesto constitutivo y de la mínima organización que lo desarrolle. Hay que destruir las Tablas de la Ley de la oligarquía financiera internacional, los adoradores del Becerro de oro de Wall Street y la City de Londres, que nos oprime y destruye como Humanidad y crear la necesaria nuevas Tablas de la Ley para este nuevo tiempo de unidad y progreso, de justicia y Paz, de equilibrio y armonía, la primera Constitución del mundo, democrática, legítima y transparente, sustentada sobre el nuevo Poder soberano de la ciudadanía mundial y que reconozca los derechos jurídicos de nuestra común Madre Tierra.
Fernando Moreno Bernal. ATTAC Andalucía en Cádiz
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