Recomiendo:
0

Manuel Talens ha escrito una fábula celestial sobre el presente

Ángeles del tercer milenio

Fuentes: Levante-EMV (Posdata)

Destaca la profundidad analítica de la historia de la humanidad y de los problemas de los albores del siglo XXI

   

   

Original, sorprendente, mordaz y un análisis profundo de nuestro mundo. Son calificativos para la novela La cinta de Moebius de Manuel Talens, en un momento donde la cultura está plagada de subproductos engañosos pseudoliterarios, olvidados al poco tiempo de haberse leído. Es muy difícil encontrar en las estanterías de las librerías, casi todas ubicadas en grandes almacenes, relatos innovadores que no pierdan la fuerza del contenido crítico. La novela de Talens escapa a la limitación argumental y estilística habitual de la literatura de mercado y continúa la línea personal de sus novelas anteriores, La parábola de Carmen la Reina (1992) e Hijas de Eva (1997).

Estamos ante una novela fantástica, de «ciencia-ficción celestial», que es una reflexión sobre el presente. La acción se inicia en el cielo a principios del tercer milenio, cuando el arcángel Gabriel, sin trabajo desde que anunciara a la Virgen la llegada del Mesías, se ha dedicado durante veinte siglos a almacenar la erudición libresca. Ello despierta el recelo de los papas, que han acaparado el poder al haber secuestrado a un Dios senil, en coma y postrado. En 1989, Gabriel recibió la orden divina de informatizar y controlar los archivos celestiales con el objeto de que la plataforma de la web www.yosoyelquesoy.com ocupe el vacío de autoridad dejado por el papa. Entonces empiezan a aparecer almas de escritores y filósofos célebres que intentaron cambiar el curso de la historia. El desenlace será aún más ingenioso. El ángel se convierte en un alter ego del Che Guevara (firma los mensajes de correo electrónico con los lemas «hasta la victoria siempre» y «venceremos») para convertir la teoría en praxis revolucionaria desde dentro del sistema. Aprovecha el vacío de poder para intentar acabar con la decadencia y la corrupción de las almas de los papas y examina las causas de este estado de la humanidad. Para ello, envía al resto de arcángeles a la Tierra, utilizando para contemplar los desvíos de la Iglesia al poeta nicaragüense Ernesto Cardenal, al ser un sacerdote excomulgado al que los papas no controlan, y se vale del alma de un antiguo hacker discípulo de Umberto Eco exterminado por haber entrado en el ordenador del Pentágono para ser el webmaster del Servidor Divino. Como se observa, detalles plenos de ingenio no exentos de ironía y sátira de una sociedad, la nuestra, que carece de un proyecto distinto al enriquecimiento económico.

La originalidad de la novela radica también en su forma. Dividida en dos partes, «Cielo, ciencia y tierra» y «El automatismo ineludible de la eternidad», que en realidad son la historia relatada la primera y el desenlace la segunda, atiende a un polimorfismo que mezcla la estética del relato con la del informe o el correo electrónico, ilustraciones e incluso utiliza diferentes tipografías y colores de caracteres; variedad que subraya la atmósfera etérea. Insólitas las tres últimas páginas de la primera parte y sorprendente el elemento gráfico de las últimas.

Pero si formalmente estamos ante una novela llamativa, el mensaje del contenido sorprende por la profundidad del análisis de la historia de la humanidad y de los problemas de los albores del siglo XXI. Talens es un escritor de enorme formación filosófica y lo aprovecha con continuas referencias para despertar el dilema entre justicia e injusticia. No esconde el amplio aparato crítico real que fundamenta la historia narrada, tanto internamente como con la inclusión de una bibliografía final, estrategia utilizada en Hijas de Eva para recrear la Valencia de antaño.

A ello se unen reflexiones sobre la novela y el narrador omnisciente, la metatextualidad (es el propio Gabriel quien está escribiendo la novela que estamos leyendo, y existe una cita en tipografía de color rojo donde se expresa que esta biografía se enviará por correo electrónico a la editorial Alcalá para su divulgación entre el resto de los mortales), el juego hipertextual con los distintos textos utilizados, y la intertextualidad con numerosos autores, pensadores y obras, o con fragmentos íntegros bien documentados de La Biblia reubicados con libertad creativa. La presencia en esta ficción celestial del alma de Julio Cortázar, el Lazarillo o los miembros del Club de los Escritores Seráficos, sumada a las explicaciones de sucesos históricos, convierten a la novela en un escrutinio sobre nuestra existencia entre la realidad y la ficción; en un completo círculo estructurado a partir de las intenciones del arcángel Gabriel en su intento por explicar el estado del mundo. Y lo consigue con fragmentos magistrales como los informes de los arcángeles sobre la globalización, los medios de comunicación y la energía, o la discusión sobre el poema de Lope de Vega.

Estos ingredientes nos dejan frente a una novela que despierta la confianza en la buena literatura y, sobre todo, en los relatos escrutinio de la historia y de una realidad, la actual, que se suele esquivar en el hecho literario. Talens no sólo se enfrenta al individualismo, sino también al futuro que sólo cambiará si el hombre adquiere un compromiso consigo mismo y con su entorno social y natural. La cinta de Moebius gustará a todos los lectores, sobre todo a quienes conciben la literatura como algo más que un pasatiempo.

Manuel Talens
La cinta de Moebius

Alcalá Grupo Editorial
Alcalá la Real (Jaén), 2007

Fuente: http://media.epi.es/www.levante-emv.es/media/documentos/2008-06-27_DOC_2008-06-20_01_56_12_posdata.pdf